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Política digital

Dra. Francis Espinoza F. Académica UCN
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Ya las cartas están echadas en torno al desarrollo de las campañas políticas por el Apruebo y el Rechazo. Algunos analistas como Pedro Santander de la Universidad Católica de Valparaíso señalan que habría un despertar digital de la 'opción positiva' luego de un largo letargo político (El Mostrador, 20/07/2022). En un medio nacional esta semana (Radio Análisis, diarioUchile, 19/07/2022), yo llamé a esta estrategia propagandística 'take for granted' (dar por sentado), es decir, que desde el triunfo del Plebiscito del 25 de octubre (2020), quienes votaron por una nueva constitución asumieron que el alto porcentaje de votación se mantendría de principio a fin, pero los vientos cambiaron, el contexto político, la institucionalidad (gobierno y parlamento), la profundización de la 'pedagogía del rechazo' (Diamela Eltit, Somos Zonas de Dolor, 23/04/2022) por parte de la derecha, y finalmente como dice Margareth Macmillan (2010), en política todo es contingencia.

La derecha ha llevado una campaña muy estratégica a favor de la 'opción negativa'. Efectivamente las tácticas se montaron antes y posterior al triunfo del apruebo por una nueva constitución en diferentes frentes. Recuerdo haber participado de algunos conversatorios, entrevistas y programas que venían analizando más bien el 'anecdotario negativo' del proceso constituyente que el contenido mismo del documento. A esto se debe sumar la jugada maestra de la alineación casi militar de los partidos políticos de Chile Vamos en torno a la opción rechazo, algo que el ex - presidente Sebastián Piñera valoraba como la capacidad de 'convocatoria marcial' de la derecha en torno a grandes temas país. La guinda que coronó la torta fue la arrogante decisión de las 10 concesiones que la derecha haría en caso de ganar la opción rechazo, entre ellas el mantenimiento de un modelo de 'capitalismo responsable' o consciente (John Mackey y Raj Sisodia, 2013), y los derechos jurídico-territoriales limitados a los pueblos indígenas (EMOL, 09/07/2022). Esta semana se puede agregar además, las 'vacaciones políticas' que algunos/as ediles entre ellos/as Evelyn Matthei y Germán Codina se están dando en el norte del país para promover el 'NO' a la nueva constitución.

Desde la 'tiranía de los números', la estrategia digital de la derecha ha estado enfocada eminentemente en las redes sociales, en especial en Instagram precisa Patricio Durán de la Fundación Íntegra (El Mostrador, 20/07/2022). Un estudio interesante al respecto es el "Bots don't vote, but they surely bother!" ("Los bots no votan, ¡pero vaya que molestan!"), realizado por los académicos Ricardo Baeza-Yates y Eduardo Graells-Garrido. Los investigadores analizaron Twitter, pero en relación al Plebiscito de Entrada y sus resultados si bien muestran baja presencia de bots, pero la coordinación de éstos influyó en el debate digital en favor de la opción Rechazo. Esta situación estaría más presente ahora en la estrategia de la derecha (El Desconcierto.cl, 16/07/2022). A esto debe sumarse también, el ejercicio populistas de fake news, que bien como dice Carolina Tohá, la campaña del Apruebo es un camino cuesta arriba (Futuro, 13/07/2022). Desde la teorías de la conspiración, incluso se ha dicho en redes sociales que se están entregando constituciones falsas, pero eso requiere comprobación empírica. De seguro sí se está haciendo harta pedagogía del rechazo como hemos visto en la senadora Paulina Núñez y su marido ex-constituyente.

Si bien como señalaba en mi columna de la semana pasada, la elección está todavía muy abierta, o como es muy difícil de interpretar (Pedro Santander). Hay que reconocer que la campaña del Rechazo ha sido mucho más coherente en tiempo y logística. El Apruebo, por su parte, ha conducido una magra campaña, floja, caótica, con un lento despertar en Facebook y en Twitter, y con figuras emblemáticas concertacionistas que hasta estas alturas más podrían provocar un efecto negativo que una inclinación a votar. Así también están los 'apruebo con elástico' de algunas personalidades y del presidente mismo que podrían impactar negativamente. Sin embargo, la 'algocracia' o gobernanza algorítmica no significa que hay una traducción directa de lo que se dice en las redes sociales o encuestas (datos) con los resultados electorales, la vida democrática tiene un carácter dinámico y transformador (Daniel Innerarity, La Vanguardia, 31/07/2021), inclusive errático. Por ende, no vale la pena dar por sentado que ya se ganó la elección cuando en ésta hay demasiadas variables que analizar y la decisión final la tendrá el/la votante.

"Hay que reconocer que la campaña del Rechazo ha sido mucho más coherente en tiempo y logística. El Apruebo, por su parte, ha conducido una magra campaña, floja, caótica, con un lento despertar en Facebook y en Twitter, y con figuras emblemáticas concertacionistas que hasta estas alturas más podrían provocar un efecto negativo que una inclinación a votar".

Arremetida contra el emprendimiento y los empresarios

José Miguel Serrano Economista U. de Columbia
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El emprendimiento es uno de los principales motores de la economía, impulsando significativamente el desarrollo productivo. Esta afirmación está respaldada por innumerables ejemplos, en países tan diversos como Australia, Sudáfrica, Finlandia, Colombia o Chile. El tema del emprendimiento está presente en todas aquellas naciones que buscan progresar y desarrollarse, apostando a fomentar esta característica entre sus ciudadanos; es decir, que incentivan emprendimientos en el ámbito privado, de la empresa privada.

Estamos hablando acá de la capacidad de identificar y coordinar los recursos productivos y ponerlos al servicio de una idea o innovación, con el fin de materializar un negocio. La simple estadística de muchos individuos emprendiendo en un país, habla de la salud social y económica del mismo. Y resulta que en Chile existe un millón de micro y pequeñas empresas formales (y una cantidad similar de informales), más otras 30.000 empresas medianas. Estas cifras incluyen una inmensa cantidad de empresarios privados, quienes mediante un gran esfuerzo y sacrificio personal, sacan adelante sus negocios y contribuyen a generar el 80% del empleo nacional. Esa es nuestra realidad, virtuosa realidad.

Sin embargo, lo que se advierte ahora desde la Convención y su propuesta constitucional, es la intención de instalar un nuevo paradigma contrario al emprendimiento, donde se aloja la sospecha de que toda acumulación de bienestar y valor económico tiene que ser mal habida, toda utilidad o ganancia sería obtenida con algún grado de aprovechamiento ilícito, a lo menos. La Convención fue dominada filosóficamente por una mayoría circunstancial radicalizada, y esto queda meridianamente expuesto en los obstáculos y trabas que se le colocan a los emprendimientos, y los derechos que se le quitan a los negocios, pequeños o grandes, para entregárselos a un Estado todo abarcador, controlado quién sabe por qué tipo de personajes en el futuro. Los agricultores de diversos tamaños, los comerciantes, las industrias, los dueños de pequeños predios forestales (en el sur abundan), están advertidos. La propuesta constitucional dice que Chile es un país plurinacional, intercultural, ecológico, no sexista (bella utopía). Pero en ninguna parte se menciona nuestra patente realidad: somos una nación de millones de emprendimientos que generan actividad, empleo y traen progreso a la patria. El extremismo y el "revanchismo" parecen haber nublado la visión de las mayorías. Obviamente, no fueron capaces de visualizar que los emprendimientos contribuyen de un modo extraordinario al bienestar y la riqueza de nuestra sociedad.

No tiene mucho sentido entonces centrar la discusión pública solamente en la "desigualdad" y en una supuesta falta de sensibilidad social de los que tienen más, pues ello conduce a situaciones extremas que son sumamente perjudiciales para una nación emprendedora y dinámica como Chile. El actual debate sobre la Reforma Tributaria es un buen ejemplo de lo anterior. En vez de consignas anti empresariales y anti capital, levantadas por una izquierda reaccionaria, lo que se debe privilegiar en momentos de carestía y serias dificultades económicas, es recaudar más promoviendo mecanismos pro inversión, maximizando así el crecimiento, el empleo y la equidad. Sin emprendimientos privados no hay crecimiento, y sin esto último no hay nada que repartir.

" La propuesta constitucional dice que Chile es un país plurinacional, intercultural, ecológico, no sexista (bella utopía). Pero en ninguna parte se menciona nuestra patente realidad: somos una nación de millones de emprendimientos que generan actividad, empleo y traen progreso a la patria".