Correo
Ahorro previsional
En más de 40 años de nuestro actual sistema previsional de capitalización individual, ningún peso a ido a parar a las manos políticas, y por lo mismo, entre el aporte de los trabajadores y la rentabilidad ganada por interés compuesto se logró llegar a cerca de US$250.000 millones previo a los retiros previsionales.Pero ¿cuál fue el secreto que logró que ningún peso fuera expropiado por algún gobierno de turno? La respuesta es porque la cotización obligatoria es a cargo del trabajador y no a cargo del empleador. Hoy, la única seguridad que tiene un trabajador de que sus cotizaciones no sean expropiadas en el futuro es que se descuenten de su liquidación de sueldo y ello ha funcionado por más de 40 años.
Hoy los trabajadores están empoderados respecto a sus ahorros previsionales y no dejarán que les metan mano. Por lo mismo, cualquier aumento de la tasa de cotización debe ser a cargo del trabajador y no a cargo del empleador.
Eduardo Jerez Sanhueza
Asesinato de carabinero
El presidente del Cuerpo de Generales de Carabineros en Retiro declaró que los carabineros deben defenderse "a mano limpia" de agresiones con fierros, artefactos incendiarios o balas. ¿Cómo es posible este absurdo? En los países civilizados quienes atacan a un policía son reprimidos muy severamente, incluso con armas letales.
Ello se debe a los restrictivísimos protocolos para el uso de armas; al temor de los carabineros a ser dados de baja o condenados a presidio por "violar los derechos humanos" si las usan; y a un concepto equivocado del principio de proporcionalidad. Este principio no significa igualdad -si los delincuentes agreden a un carabinero con piedras este debe responderles con piedras-, sino que aplicar la fuerza que sea necesaria para lograr que el delincuente se someta al control policial, la que, evidentemente, debe ser superior.
La desproporción en el uso de la fuerza no solo puede predicarse respecto de la que es excesiva para cumplir con un determinado fin legítimo, sino que también respecto de la que es insuficiente para lograrlo.
A lo anterior se suma la pusilanimidad del Gobierno -cuya obligación esencial es el mantenimiento del orden público-, que no se atreve a aplicar la violencia física legítima del Estado porque ha sido permeado por el "discurso de los derechos humanos"; un arma estratégica de comunismo que considera violatoria de los derechos humanos cualquier acción destinada a reprimir la delincuencia, el vandalismo, el flagelo terrorista o la insurrección revolucionaria.
Adolfo Paúl Latorre
Falta de medidas efectivas
Víctima de un disparo a mansalva de un delincuente, ha muerto en cumplimiento de su deber el joven carabinero Breant Rivas Manríquez (Q.E.P.D.). Lamentablemente, no será el último mártir de esta institución que ofrendará su vida para prevenir el delito y dar seguridad a los chilenos.
Este homicidio es consecuencia de la falta de voluntad política para reprimir la delincuencia. Factores tales como vacíos legales, legislación garantista, migración ilegal descontrolada y falta de apoyo a la labor de Carabineros de Chile nos permiten colegir que la sensación de inseguridad seguirá aumentando hasta alcanzar niveles de otros países latinoamericanos.
La seguridad constituye una de las principales preocupaciones de la ciudadanía. A pesar de ello, los poderes del Estado han sido incapaces de tomar medidas efectivas para combatir la escalada delictual. Solamente vemos medidas populistas e intrascendentes que denotan ignorancia, falta de prolijidad e improvisación.
Iván Stenger Larenas
Proceso constitucional
Cada vez que los constituyentes crean una situación que no saben cómo arreglar recurren a inventar una comisión o a dejarle el tema a los legisladores. De costos, ni hablar, esta es la única Constituyente del mundo en que los costos no importan, aunque el país esté en crisis económica y muy endeudado.
Hablar de "todos los escenarios" parece una exageración. Son solo dos: o gana por poco el Apruebo o pierde el Apruebo. Si el Apruebo gana por poco es el escenario más difícil, ya que el país tendrá una enorme tarea en reformular leyes, crear instituciones, cambiar completamente los sistemas, etc., en un proceso que, en el mejor de los casos, si estuviera la gran mayoría de acuerdo con esos cambios, tomaría años, pero ahora estaría haciéndose todo eso con casi un 50% de la gente en contra y, por lo tanto, sería una misión imposible.
La victoria del Apruebo sería una victoria pírrica.
José Luis Hernández Vidal