Quiebre tecnológico impulsaría la demanda de cobre hasta 45 millones de toneladas en 2050
FUTURO. En las próximas décadas la economía verde por la que apuestan tanto China como los principales países de Europa, será el motor de la ascendente demanda de metal rojo, según las proyecciones de la Comisión Chilena del Cobre.
El cambio tecnológico asociado a la irrupción de las energías renovables no convencionales (ERNC), la electromovilidad, y la economía verde en su conjunto, que impulsan la demanda y la cotización al alza del cobre y de otros minerales, aumentarían la necesidad de metal rojo hasta los 45 millones de toneladas al 2050, lo que supone un desafío para la industria mundial y en particular para Chile.
Escenario que analizó en profundidad durante su intervención en el Seminario Internacional Infraestructura y Minería 2021; el director de Estudios y Políticas Públicas de Cochilco, Jorge Cantallopts, quien anticipa un quiebre estructural en la industria cuprífera que actualmente produce 29 millones de toneladas de cobre entre las minas, reciclaje y aleaciones.
Cambio estructural
El ejecutivo de la Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) explicó que entre los factores que explican el buen momento que vive la cotización del cobre, que este año registró su máximo valor histórico (US$4,7 la libra), y que podrían mantener al alza su cotización por un periodo largo de tiempo es "el quiebre tecnológico asociado a las energías renovables no convencionales (ERNC) que impactan dramáticamente, y la electromovilidad".
Un cambio de paradigma tecnológico que podría explicar el quiebre estructural significativo en la demanda de cobre y algunos otros minerales: litio, cobalto, zinc, grafito, y algunos otros, agregó el director, quien sostuvo que "el cobre, en este escenario, independiente de la tecnología que se mencione, es el más sólido, de hecho Tesla acaba de anunciar nuevas tecnologías para tratar de reducir su dependencia del litio".
Si bien en el caso del cobre hay sustitutos, todavía no son de tan buena calidad ni tan competitivos en términos de costos, explicó Cantallopts, quien proyecta que la demanda crecerá 3,4% este año y un 3,8 en 2022, impulsada principalmente por China, India, pero también en volúmenes importantes por países de Europa y Estados Unidos.
Economía verde
Sobre los nuevos paradigmas que afectan al mercado de los commodities, el ejecutivo de Cochilco explicó que "los desafíos globales tienen que ver con un cambio en la mirada y no solamente en la minería, sino en toda la economía. El mundo se puso de acuerdo en un marco que son los 17 objetivos de desarrollo sostenible que nos fijan un marco sobre cómo tenemos que entender el desarrollo, que antes se entendía solo como crecimiento económico".
En este sentido, profundizó que Europa y China piensan que el motor de desarrollo para las próximas décadas será la economía verde, mucho más sostenible y dentro de esta economía verde hay un elemento muy importante y un concepto clave que es la economía circular.
Demanda creciente
Jorge Cantallopts dijo que ven una demanda creciente por electromovilidad que "puede llegar a aumentar en 5 millones de toneladas adicionales el consumo de cobre en unas pocas décadas, hoy no hay suficiente cobre. Hay una serie de otros elementos, como la propia smart house, que es el concepto de una casa y una ciudad más inteligentes. Hoy una casa requiere mucho más cobre del que requerían las casas antiguas".
Respecto de las ERNC dijo que son mucho más exigentes y mucho más intensivas en el uso de cobre y "no solamente porque necesita más cobre en la tecnología, en las bobinas de la turbinas eólicas, en las redes internas de las plantas solares, sino que se atomizan las mega centrales y se crean muchas pequeñas centrales generadoras, mucho más diversificadas y eso implica redes más complejas, más extensas y eso incrementa la demanda de cobre. Sin hablar de las redes eléctricas de altísima tensión que se están desarrollando en China".
Sobre el impacto de la economía verde, Cantallopts especificó que "pensamos que habrá un quiebre estructural, porque si hoy pensamos que la demanda de cobre a nivel global es del orden de 29 millones de toneladas, y 20 millones vienen de la minas; 4 millones que son chatarra refinada; y 5 a 6 millones de toneladas que son aleaciones de bronce o latón principalmente; y pensamos que en el futuro, en una proyección que no es tan exagerada y que incluso podría considerarse conservadora".
"Estimamos, añadió, que se puede llegar a perfectamente a 45 millones de toneladas de cobre necesarios para el mundo en el año 2050, el punto es de dónde va a venir ese cobre, la economía circular, reciclaje, probablemente van a ser mucho más relevantes, pero al menos se pueden mantener, pero si no vamos a necesitar de todas maneras 10 millones de toneladas adicionales como mínimo. Por lo tanto, es un tremendo desafío para la industria minera, para la oferta de la industria minera y países como Chile".
"El mundo necesita más minería"
Sobre el nuevo contexto que vive la industria minera y la cuprífera en particular, el director de Estudios, Jorge Cantallopts dijo que "para muchos puede haber una contradicción, incluso en nuestro país hay gente que no quiere más minería, y tiene que entender que el mundo necesita más minería, porque no podemos quedarnos en el reciclaje, porque tendríamos computadores que valdrían 3 mil o 4 mil dólares u automóviles de 40 mil dólares, o una energía que valdría 150 dólares el megawatt".