Johnson resta importancia al escándalo del "Wallpapergate"
REINO UNIDO. Primer ministro dijo que costosa remodelación de su departamento oficial en Downing Street no es una preocupación para el pueblo británico.
Agencias
El primer ministro británico, Boris Johnson, defendió que su Gobierno debe centrarse en "asuntos prioritarios" como la pandemia, en lugar de atender al último escándalo que mancha su reputación, por el cuestionado financiamiento de las obras de su residencia en Downing Street.
El asunto que Johnson busca minimizar lo enfrentará a una investigación de la Comisión Electoral británica -agencia independiente que controla cómo se financian los partidos políticos- por las dudas generadas en torno a cómo se pagó inicialmente una lujosa remodelación realizada en el departamento oficial de Johnson, caso bautizado como "Wallpapergate", por los llamativos papeles murales utilizados en la renovación, atribuidos a la decoradora Lulu Lytle.
La comisión sostiene que existen "motivos razonables para sospechar que puede haber existido una o más infracciones" de las reglas en las obras para acondicionar el piso del jefe del Ejecutivo, quien podría haber recibido un préstamo no declarado.
Desviar el foco
Johnson, que el miércoles se defendió ante el Parlamento ante cualquier crítica de malas prácticas y aclaró que él personalmente asumió los gastos, dijo ayer en declaraciones que "lo que quieren los ciudadanos es que este Gobierno se centre en las prioridades de la gente", desviando así la atención que rodea la remodelación de su departamento.
En un nuevo intento por virar el foco a preguntas de los reporteros, el líder británico indicó ahora que no creía que este fuera ahora "el asunto más importante para los ciudadanos del Reino Unido", más preocupados por "temas como la educación y otros muchos problemas".
"Lo que a la gente le interesa es que el Gobierno continúe con su hoja de ruta (hacia el desconfinamiento), que siga trabajando para hacer avanzar al país, que continúe con la manera más rápida de implementar el programa de vacunación y que siga reclutando a más agentes de policía", recalcó.
Pese a la presión del opositor Partido Laborista, que se aferra a la controversia como munición contra el Gobierno, el Partido Conservador no ha aclarado si realmente desembolsó el costo de la remodelación y simplemente ha dicho que los "fondos del partido no se están usando para pagar por el departamento", sin especificar si Johnson recibió un préstamo no declarado.