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Pandemia y ciberacoso

La mitad de los niños y jóvenes del país reconocen haber sido acosados por redes sociales en alguna ocasión, el problema no es nuevo, pero se está agudizando El mundo virtual se ha convertido en un ambiente ineludible para la mayoría de nosotros debido a la pandemia y lo seguirá siendo después que ella pase. Por eso es muy importante educar en su uso.
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Con las clases online originadas por la pandemia, nuestros niños y jóvenes quedaron expuestos a pasar gran parte del día conectados a plataformas digitales. Claramente no se trata de algo que antes no hicieran, pero es obvio que los tiempos de exposición a la pantalla, y a los contenidos que allí se pueden encontrar se amplificaron.

Y si a eso sumamos que estas interacciones normalmente se realizaron en la soledad de una habitación y sin la supervisión de un adulto, el escenario para cualquier observador se torna preocupante.

Hace unos días se conocieron los resultados del Estudio Nacional sobre Ciberacoso en Pandemia, desarrollado por la Secretaría General de Gobierno en conjunto con Fundación Summer y la Facultad de Psicología de la Universidad del Desarrollo.

Se trató de una investigación que buscó justamente conocer el efecto y riesgos asociados a los mayores tiempos de exposición que tuvieron los jóvenes a contenidos virtuales debido a la emergencia que nos afecta.

Y los resultados fueron inquietantes.

El sondeo arroja que prácticamente la mitad de los participantes (49%) reconoce haber sido acosado virtualmente en los últimos tres meses y el 88% declara haber sido amenazado por internet o redes sociales al menos una vez.

En cuanto a las emociones que generan esos hechos, las víctimas mencionan la ansiedad (48%), angustia (41%) y aburrimiento (33%). Además, un 27% admite que su reacción ante el hecho fue "hacerse daño", lo que sube al 47% en los jóvenes entre 15 y 19 años.

El mundo virtual se ha convertido en un ambiente ineludible para la mayoría de nosotros debido a la pandemia y lo seguirá siendo después que ella pase. Su uso, por cierto, conlleva una infinidad de ventajas y comodidades, pensemos en la telemedicina, en el teletrabajo, en la posibilidad de construir redes de con personas de todo el mundo, pero al mismo tiempo encierra riesgos que debemos advertir.

Las víctimas de ciberacoso no suelen pedir ayuda a terceros, por lo general viven estos trances en soledad. Las familias deben ocuparse de esto, educar, acompañar y generar confianzas. Sin duda este es un tema que debe estar en cada mesa, sobre todo en estos días.

El agua en tiempos de pandemia y crisis climática

"La desalación es nuestra apuesta para darle sustentabilidad al suministro de agua potable en esta zona del país". Carlos Méndez, gerente general Aguas Antofagasta
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El pasado lunes 22 celebramos el Día Mundial del Agua, conmemoración que recibimos en medio de una pandemia por Covid-19, que nos tiene hace más de un año en Estado de Catástrofe, con continuos confinamientos y un permanente recuerdo de la importancia del uso de este recurso vital para prevenir contagios.

Pero sabemos que este rol clave que juega el agua ahora, se extenderá en el tiempo, más allá de la actual emergencia sanitaria mundial, puesto que los efectos de la crisis climática hacen cada día más inestable el abastecimiento con fuentes de agua continentales, lo que nos obliga a todos a repensar con responsabilidad el uso y aprovechamiento que le damos al agua.

Esta realidad, que cada día tenemos más presente, nos recuerda la importancia de seguir mejorando en calidad de servicio a los habitantes de la región de Antofagasta, a partir de contar con un sistema que dé mayor seguridad de suministro a cada uno de los hogares.

Sin duda la continuidad del servicio es parte de los objetivos fundamentales que hemos perseguido en Aguas Antofagasta desde la llegada del Grupo EPM a su administración en 2015. En efecto, entre 2015 y 2020 hemos invertido más de 220 mil millones de pesos, para robustecer nuestro sistema de producción, de distribución y recolección. De hecho, sólo durante el año 2020 concretamos inversiones históricas por más de 44 mil millones de pesos, con más de cien proyectos ejecutados para reforzar la infraestructura de cara a los desafíos que impone el aumento sostenido de la demanda en los próximos años. En tanto para este 2021 las obras a ejecutar implicarán una inversión que supera los 56 mil millones de pesos e incluyen obras emblemáticas para asegurar abastecimiento a la actual y futura demanda en medio del desierto más seco del mundo.

Como lo hemos dicho antes, la desalación es nuestra apuesta para darle sustentabilidad al suministro de agua potable en esta zona del país, donde las precipitaciones escasean y las reservas naturales de las napas subterráneas y afluentes cordilleranos están cada día más inestables producto de la alta demanda industrial, sumado a los efectos del cambio climático.

Sumado a este esfuerzo por dar sustentabilidad al suministro de agua potable, también estamos preocupados por nuestras intervenciones en la vía pública. Sabemos que es un anhelo permanente de la comunidad el que nuestras obras no sean invasivas. Por eso desde hace algunos años comenzamos a incorporar paulatinamente el uso de tecnología a los proyectos de refuerzo y reposición. Como por ejemplo las tecnologías de Cracking, CIPP, Hot Tapping y Line Stop, que en conjunto tienen por misión evitar la generación de zanjas o rotura de pavimentos en la calle, disminuir los ruidos molestos, reponer ductos sin cortar el suministro y evitar obstrucciones vehiculares, entre otros beneficios.

Sin duda estamos más que preocupados, estamos ocupados en atender aquellos requerimientos que la comunidad nos demanda, así como aquellos que debemos atender por el rol de acompañantes activos del desarrollo regional.

Nixon y Piñera

Pablo Manterola Domínguez , Facultad de Ciencias Jurídicas UCN
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Richard Nixon fue reelegido para un segundo periodo como presidente de los Estados Unidos de América, con más del 60% de los votos. Podía presentar logros económicos notables: una moderada inflación de un 2,7%, un crecimiento económico de 6,3%, un aumento de los salarios en 4% real y una importante disminución de la carga tributaria, datos que tomo del británico Paul Johnson. Bajo la presidencia de Nixon se realizaron avances en materia de derechos civiles, problema bien delicado en los años 70: propició la integración escolar de los afroamericanos y puso en marcha un importante programa de discriminación positiva.

Sin embargo, desde los años 60 la autoridad estaba siendo severamente cuestionada en los Estados Unidos. La transversal crítica a la autoridad se manifestó de formas diversas: desde el desafío generalizado a los valores morales recibidos, hasta las protestas estudiantiles y la hostilidad de los medios de comunicación. Como anota el mismo Johnson, "en el espacio de una década, la palabra «jefe» casi desapareció del idioma". Y si bien de aquella época nos han llegado historias dignas de contarse como "El juicio de los 7 de Chicago", y maravillosos productos culturales como la música rock, cualquier intento por socavar la autoridad -no una autoridad, sino la existencia misma de una autoridad- acaba volviéndose contra la propia comunidad política.

Ese intento se tradujo, para Nixon, en un juicio político desde el Congreso. La constitución de los Estados Unidos permite al Senado destituir al Presidente en caso de traición, cohecho y otros delitos graves. El llamado caso Watergate pudo ser solo un ejemplo más de las malas prácticas de los gobiernos de la época, pero se transformó en la excusa para deshacerse de un presidente ingrato para los medios, incómodo para el Congreso y demasiado exitoso para la oposición. Nixon renunció, pero el resultado no fue la reaparición del prestigio de la autoridad, sino el ascenso de un vicepresidente no preparado para dirigir el país más poderoso del mundo y un vacío geopolítico que la Unión Soviética supo aprovechar.

Durante los últimos días el diputado Marcelo Díaz ha sugerido la posibilidad de una nueva acusación constitucional contra el presidente Piñera, y el diputado Jaime Mulet le ha secundado. Aunque sí se pueda evitar prácticas como las que afectaron al gobierno de Nixon, ningún gobierno puede asegurar, en el plazo de poco más de un año, una solución efectiva y responsable a una inédita crisis social, sanitaria y económica. Al igual que Nixon, el presidente Piñera ha obtenido importantes logros en su administración, y el ministro Paris ha reivindicado su derecho a mostrarlos. Es indudable que ha sido preciso ejercer la autoridad, estableciendo severas restricciones de movimiento y suministrando en dosis medidas y focalizadas una ayuda económica para la que no hay fondos infinitos. Algunos pensamos que esa misma fortaleza le daría buenos resultados para enfrentar otros problemas, pero con guitarra es otra cosa.

Es fácil encontrar culpables cuyo sacrificio sirva de calmante frente a la impotencia que todos sentimos. Sin embargo, el político prudente -y, en su radio de opinión y acción política, también el ciudadano común- ha de saber resistir esa tentación, pues el legítimo prestigio de la autoridad es un reflejo del respeto de la sociedad hacia sí misma.