Caso Campillai: "Los carabineros se sintieron con el derecho a disparar a la cara"
CASO. Formalizan a exoficial como presunto autor de disparo de lacrimógena que la dejó ciega.
Al cierre de esta edición, se realizaba ante el Juzgado de Garantía de San Bernardo la formalización del excapitán de Carabineros Patricio Maturana, como presunto autor de apremios ilegítimos con resultado de lesiones graves gravísimas contra Fabiola Campillai (37). El 26 de noviembre de 2019, ella recibió el impacto de una bomba de gas lacrimógeno mientras esperaba el autobús, lo que le provocó ceguera completa y le quitó el gusto y el olfato.
Maturana fue detenido en Curicó cerca de las 23 horas del jueves. La jefa de la Brigada de Derechos Humanos de la PDI, Carolina Namor, explicó: "Hemos podido determinar el mecanismo del disparo, el tipo de lesión desarrollada y el arma utilizada para el disparo".
El 14 de agosto, Maturana y otro oficial fueron desvinculados de Carabineros, que en un sumario estableció que los ahora exoficiales no hicieron nada para verificar el estado de salud y prestar auxilio a la víctima, y omitieron el procedimiento legal correspondiente.
La Fiscalía expuso que Maturana disparó de frente, en forma recta, a personas que se manifestaban en San Bernardo. "¿Qué les íbamos a hacer dos mujeres solas de 1 metro 60 de estatura?", dijo Fabiola Campillai antes de la audiencia. "Más que órdenes directas, los carabineros se sintieron con el derecho a disparar a la cara", afirmó. Añadió que le "sorprende" este avance en la investigación y pidió prisión preventiva para Maturana, porque "es un peligro para la sociedad: así como me hizo esto a mí, se lo puede hacer a cualquier persona".
Los hechos
Ante el magistrado Claudio Ortega, del Juzgado de Garantía de San Bernardo, la fiscal Paola Zárate detalló lo que habría ocurrido el 26 de noviembre: Maturana llegó a eso de las 19:30 junto a otros policías de la 14° Comisaría a la estación de Metrotren 5 Pinos por la instalación de barricadas en las vías férreas, las cuales fueron despejadas casi media hora después. En tanto, manifestantes se trasladaron hacia calles cercanas insultando a los carabineros, quienes se acercaron.
Ante ello, "y contraviniendo las disposiciones del manual para el control del orden público", el capitán a cargo del procedimiento usa su carabina lanzagases hacia el grupo, dando orden de hacerlo. Le siguió un teniente que portaba el mismo armamento.
Campillai, manifestó Zárate, se encontraba junto a su hermana en la esquina del pasaje Angel Guido con Fermín Vivaceta cuando el capitán dio la orden del tercer disparo y el imputado, "advirtiendo la presencia de personas ubicadas en dicha intersección, sin que por ello se estuviera afectando la libre circulación de transeúntes y vehículos ni se pusiera en peligro la vida o seguridad de las personas que circulaban en el sector, ni tampoco la de los funcionarios policiales, abusando de su cargo y con el propósito de proferir dolor efectúa un disparo".
El arma, sostuvo la fiscal, fue percutada "de frente, en forma recta, dirigiéndola directamente a las personas ubicadas en el lugar, en un ángulo inferior a 10 grados, sin realizar parábola alguna, impactando un proyectil de frente en el rostro de la víctima que se encontraba a aproximadamente 51 metros de distancia, quien cae al suelo, perdiendo el conocimiento".