Correo
Denuncia
Quiero denunciar una situación muy desagradable que nos tocó vivir el viernes recién pasado. Mi señora madre Dora Bordones Espinoza falleció y concurrimos a la oficina del Cementerio Parque San Cristóbal en calle Riquelme, para programar su funeral, ya que tenemos una cripta aérea doble en ese cementerio. Y allí fuimos, no digo atendidos, sino que desatendidos por un funcionario. En este tipo de empresas, dado el tipo de servicio que venden, uno espera encontrar una atención amable y funcionarios empáticos, pero la realidad allí fue muy diferente, ya que la persona que nos atendió (O. Lichiock) nos atendió de muy mala manera con un trato muy prepotente. Pero eso no es todo ya que al parecer en esta empresa son todos igual de prepotentes y descriteriados, ya que al día siguiente nos tocó vivir otro mal trato y prepotencia por la persona que recibe la carroza en el Parque San Cristóbal, ya que solo permitió el ingreso de 10 personas en circunstancias que la comitiva era de 16 familiares directos. El protocolo de funerales en contexto de Pandemia por covid-19 de la Subsecretaria de Salud dice textualmente: "La asistencia a la celebración de la ceremonia fúnebre queda restringida exclusivamente al núcleo directo del fallecido con un máximo de 20 personas". Debo mencionar que mi madre ni siquiera era fallecida covid- 19, insistí ante el para que permitiera el ingreso de los otros 6 familiares al recinto, mostrándole incluso el Protocolo de funerales de la autoridad sanitaria, pero el con tono soberbio me respondió que a él le importaba bien poco lo que dictaminara la autoridad sanitaria, ya que en el Cementerio San Cristóbal, la autoridad era él y punto. Confío en que los propietarios del cementerio en cuestión al tomar conocimiento de la calidad de personas que atienden al público, tomen las medidas respectivas y correctivas para que este tipo de situaciones no se repitan, ya que los contratantes están pagando por un servicio el que incluye recibir un trato amable y respetuoso.
Fernando Andrés Soto Bordones
Parlamentarios
Hagamos un esfuerzo en la crisis: bajemos el sueldo de nuestros parlamentarios.
Andrea González P.
Cuarentena
Para quienes han trabajado toda su vida, el covid-19, no solamente ha sido un problema sanitario, sino que también se ha transformado en un problema social/afectivo. El estar en casa sin poder salir, es un "suplicio" para todos. Para la dueña de casa, el que el esposo esté en casa, le ha significado la perdida de una parte del espacio donde ella se desenvolvía diariamente. En cierto modo el esposo es una visita, pues cualquier cosa que se necesite hay que preguntarle a ella, dónde las dejó o donde están. Cuando supe que tenía que estar en casa obligatoriamente, de inmediato me imaginé en un sillón echadito atrás, viendo mis películas favoritas y por ahora, los partidos de fútbol de las ligas extranjeras. ¡Qué equivocado estaba!, he tenido que agachar la cabeza y conformarme con ver cada día: Caso cerrado-Carmen Gloria a su servicio y las "culturales" telenovelas que invaden nuestras pantallas. Para mí la paradoja es: Estar cansado de tanto descansar.
Jorge Valenzuela Araya
Constitución
Tenemos un sector de la clase política que intenta cambiar la constitución, pero no sabe respetar la actual, votando proyectos inconstitucionales. Este mismo sector habla de cambios de estrategia en la pandemia, critica la gestión del ejecutivo como si fuese una suerte de ente inquisidor omnisciente omnipotente, pero no es capaz de respetar la cuarentena y se pasea en skate como si esto fuese un juego. Piden acuerdos y luego se restan. Buscan empecinadamente que le entre agua al buque, aun mas de toda la que ya le ha entrado en estos últimos meses.
¿Que hicimos mal como para merecer que nos llegue este azote de Dios?
Pedro Pablo Toledo B.
La vida
Sin lugar a ninguna duda, el dicho "La vida de una persona no tiene (un) precio (posible de pagar)" es una indiscutible verdad, y quedó demostrado, cuando una persona salvada de las garras del COVID-19 en una clínica privada, al ser dada de alta, se enteró que la cuenta era de 50 millones de pesos. Debemos estar muy alegres, porque ganó la vida, pero igual queda la duda... ¿Qué habrá sido más impactante para la persona, cuando se enteró que tenía COVID 19 ó al enterarse del valor de la cuenta de la clínica?
"La vida es un arco iris que incluye el negro" Yevgeny Yevtushenko (1933-2017) poeta ruso.
Luis Enrique Soler Milla