Un caso positivo de coronavirus obliga a cerrar la presidencia israelí
JERUSALÉN. El trabajo en la oficina del presidente de Israel, Reuvén Rivlin, ha sido suspendido al confirmar que un empleado se contagió.
El sábado pasado, Beit HaNasi, la residencia del presidente de Israel, Reuvén Rivlin, tuvo que ser desocupada y desinfectada exhaustivamente tras detectarse un caso positivo de Covid-19 en un empleado.
Tras el anuncio, se están llevando a cabo consultas con el Ministerio de Sanidad sobre la necesidad de poner en cuarentena a otros empleados y las implicaciones que podría tener para el presidente, quien ya tiene 80 años de edad, según informó la vocería de presidencia.
"De acuerdo a las instrucciones de Sanidad, no se requiere que el presidente Rivlin haga cuarentena porque no estuvo en contacto directo con el infectado", aseguraron más tarde desde presidencia.
A raíz del foco de contagio, se están estudiando los contactos que tuvo el empleado para poder identificar la trazabilidad, por lo que se realizarán pruebas al personas y se hará un estudio epidemiológico. En tanto, la agenda de Rivlin tuvo que ser reprogramada.
Este caso se suma a los casos confirmados en la oficina del primer ministro, Benjamín Netanyahu, donde tres guardias de seguridad dieron positivo por Covid-19. Sin embargo, el jefe de gobierno tampoco entrará en cuarentena y argumentaron que los tres trabajadores ejercían sus labores fuera del edificio, en las puertas de acceso y puestos de control, pero no habían estado dentro del edificios.
Para mayor seguridad, Netanyahu se realizó el test de Covid-19, pero dio negativo. Este domingo, el primer ministro alertó que el ritmo de infecciones no ha bajado, con 200 nuevos casos diarios, lo que considera una llamada de atención e instó a la población a mantener las precauciones y utilizar mascarillas, aunque aseguró que continuará la apertura económica.
Israel, que impuso fuertes medidas restrictivas en los primeros meses de la pandemia, ha tenido consecuencias moderadas respecto a otros países europeos, considerando que registra 300 fallecidos y alrededor de 18.000 infectados, según las cifras oficiales.
El país por el momento mantiene sus fronteras cerradas a extranjeros.
18.000 casos confirmados registra Israel y 300 fallecidos desde que comenzó la pandemia.