El desafío del desempleo
La economía en todo el mundo enfrenta una crisis global, que está golpeando a nuestro país. Será duro enfrentar la recuperación económica. Una parte de las empresas lograron continuar funcionando mediante el teletrabajo de su personal, pero otras no lo han podido hacer ya que requieren presencia física de los trabajadores.
Los efectos de la emergencia sanitaria por el COVID-19, con el cese de actividades productivas y las consecuencias negativas en el empleo, significarán este año un duro golpe para todas las economías. El Banco Mundial pronosticó para este año una contracción de 5% para Brasil, 5,2% en Argentina, 6% en México, 2% en Colombia, 3% en Chile y 4,7% en Perú. De acuerdo con ese organismo, las economías sólo comenzarán a recuperarse en 2021 en el continente.
A modo de ejemplo, el Centro de Microdatos de la Universidad de Chile, informó que la tasa de desempleo en el Gran Santiago subió hasta un 15,6%, ante el impacto de la pandemia en la economía. La cifra representa un alza de 8 puntos porcentuales en relación al mismo periodo del año pasado y de 6,8%, respecto a la medición de diciembre y es el mayor nivel en 35 años, desde junio de 1985, cuando alcanzó el 15,7%.
Las cifras regionales serán conocidas mañana, cuando las entregue el INE.
Si bien Latinoamérica tiene experiencias enfrentando las crisis financieras, la pandemia representa una nueva dimensión, pues las medidas preventivas que se han adoptado han afectado la producción de las empresas y de los servicios, desde el momento en que muchas actividades han cesado su trabajo o se han declarado en quiebra, y otras aún operan a media capacidad, luego de dos meses y medio de declarada la emergencia.
Un ejemplo es la aerolínea Latam que solicitó la protección de la ley de bancarrota de Estados Unidos como "proceso voluntario de reorganización y reestructuración de su deuda".
Los efectos están a la vista, porque de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas, la desocupación en Chile alcanzó el 8,2% durante el trimestre de enero a marzo, un punto porcentual más que en igual período del año pasado, lo que representa el registro más alto en diez años.
Ayer la ministra del Trabajo, María José Zaldívar anticipó que la tasa de desempleo llegó a los dos dígitos y que ya hay más de un millón desocupados.
Lo que viene exige una enorme ayuda de todos.