Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Actualidad general
  • Opinión
  • Clasificados
  • Clasificados
  • Servicios
  • Deportes
  • Espectáculos
  • Contraportada

Vecinos se organizan a través de trueques y compras compartidas

PROPUESTAS. Ante la compleja situación económica y laboral que viven algunas familias antofagastinas producto de la pandemia, la comunidad busca alternativas con una economía colaborativa.
E-mail Compartir

Loreto Erices Hun es psicóloga de profesión y siempre ha ejercido de forma independiente. Al igual que muchas personas su situación financiera también se ha visto afectada por las medidas de restricción implementadas en el contexto de la emergencia sanitaria.

Bajo este escenario de incertidumbre económica y la imposibilidad de generar ingresos, la especialista optó por ofrecer sus habilidades profesionales en el grupo de Facebook Trueque Antofagasta, espacio creado hace algunas semanas con el objetivo de promover la práctica de intercambio de productos o servicios, sin la intervención de dinero.

"Horas psicólogicas a la disposición de quien lo necesite, a cambio de lo que podamos pactar...". Esa fue la propuesta que lanzó Loreto para participar en esta comunidad virtual que ya suma más de 2 mil miembros, y que tiene como premisa el concepto de economía colaborativa, la que prioriza la satisfacción de las necesidades de las personas por encima del lucro. Una tendencia que ha tomado fuerza, junto a otras iniciativas socioeconómicas de este tipo, entre los antofagastinos para hacer frente a los efectos colaterales que ha generado la pandemia del coronavirus.

"Antes yo cobraba 35 mil pesos la sesión, pero evidentemente en estos tiempos no se puede pedir esa cantidad de dinero. Entonces a quienes me puedan pagar les cobro 10 mil pesos y a aquellos que no lo puedan hacer, tranzamos. Por ejemplo, hay una señora que es asesora del hogar a la que estoy atendiendo hace varias sesiones y que cuando termine todo esto ella hará el aseo en mi casa dos veces a la semana. Hemos ido valorizando la atención versus su trabajo. Ha sido una experiencia muy linda", explicó la profesional.

Christian Morales, médico veterinario, es el administrador y creador del grupo de Facebook Trueque Antofagasta. Él cuenta que hasta ahora esta dinámica de intercambiar productos y servicios ha funcionado bien, asegurando que la gente está tomándole el gusto a la "colaboración y el apoyo mutuo".

"La idea partió hace meses comentando con mi pareja una noticia que apareció de un dentista que ejercía su profesión a través del trueque, lo encontramos súper interesante. Empecé a investigar un poco acerca del trueque y su historia, viendo como en Argentina en tiempos de crisis surgieron clubes de trueque que ayudaron a palear la situación. La finalidad es ayudar a las personas de Antofagasta a intercambiar productos o artículos que en la casa están acumulando polvo por cosas que nos hacen falta, dándoles una segunda vida a las cosas", enfatizó.

Libreta solidaria

Otro ejemplo de economía social es el proyecto impulsado por el padre Felipe Berríos a través de la Fundación Recrea. Se trata de la iniciativa "Libreta solidaria", una fórmula que busca apoyar a las familias en situación de campamento canalizando de manera más eficiente la entrega de ayuda.

Para ello, este nuevo sistema que reemplaza la entrega de cajas de alimentos por una libreta, permite a las familias más vulnerables canjear productos, con un máximo de 50 mil pesos al mes, ayudando también de forma directa a los almacenes de barrio.

"A través del trabajo que llevamos realizando hace años con familias vulnerables, nos hemos dado cuenta que una de las cosas principales que generó el malestar social es la indignidad. La gente hoy pide un nuevo trato, que se les escuche y se les ponga atención. Y la caja de mercadería en estos lugares (campamentos) es disruptiva. Uno le pregunta a la gente si lo que contienen estas cajas lo necesitan o no. Entiendo que en una situación de emergencia la gente no se puede poner exquisita, pero cuando esto ya pasa a alargarse la gente a veces necesitas otras cosas", apuntó el sacerdote Felipe Berríos.

El jesuita además explica que este modelo de colaboración permite, por ejemplo, "fortalecer el comercio local y la red social que hay acá. También es una manera más digna de ayudar ya que las personas pueden ir adquiriendo las cosas que necesiten".

Según explicó la directora ejecutiva de la Fundación Recrea, Alejandra Stevenson, la idea de esta iniciativa es ayudar a 450 familias de Antofagasta y Calama que viven en campamentos, por un periodo de tres meses, planteándose para ello como desafío reunir cerca de 100 millones de pesos en aportes.