Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Actualidad general
  • Opinión
  • Clasificados
  • Servicios
  • Deportes
  • Contraportada

Región: 695 eventos con foco preocupante en Antofagasta

SOCIEDAD. Falta y ausencia de Estado en muchos sectores, segregación, desigualdad y modernización bajo análisis.
E-mail Compartir

Si el país estaba acostumbrado a observar protestas y violencia en Santiago, Valparaíso y Concepción, hoy deberá sumarse Antofagasta a ese listado. Desde el 18 de octubre y hasta el 29 de abril, Carabineros registra 695 eventos a nivel regional (marchas, cortes de ruta, desórdenes, barricadas, saqueos, entre otros), una cifra inédita en la historia.

El total de detenidos asciende a 3204: 2.167 en la Prefectura Antofagasta y 1.037 en la Prefectura El Loa.

Los detenidos con antecedentes penales son el 15% y los detenidos prolíferos (+ de 5 detenciones), el 18% y el grueso son mayores de edad: 86%.

Qué está pasando

Qué podría explicar la cantidad y gravedad de hechos vistos en este tiempo. Podría decirse que la capital regional reproduce los sucesos y fracasos chilenos. Por una parte es una región técnicamente rica, con un PIB per capita similar al de Londres (que no es lo mismo que ingreso), pero con una paradoja brutal: los cerros están coronados de campamentos o poblaciones que no tienen acceso a cuestiones elementales como bienes de uso público en salud, buena educación, entretención o incluso sombra.

Un ejemplo: el estudio de "Diagnóstico de la demanda y déficit de infraestructura de Educación de Primera Infancia en la comuna de Antofagasta", realizado por el Sistema de Información Territorial (SIT), dio cuenta que de los 11.852 menores sin oferta educativa de salas cuna, 5.285 viven en el lado norte de la capital regional y 2.749, pertenecen a familias de bajo ingresos económicos.

Es decir, la segregación es palpable y genera efectos negativos para quienes lo sufren.

Hernán Vargas, exgobernador y dirigente del PS, apuntó que la clave es el sentimiento de malestar "que irrita muchísimo a la población, debido a las desigualdades, falta de oportunidades y abuso en el acceso a la educación, a la salud, al trabajo, a la vivienda, AFP, isapres, farmacias, cuentas de servicios básicos, etc. Visualizan que la región, al igual que el país, obtiene riqueza y crece, pero que sólo a algunos les llega".

Las expresiones de estos grupos, dijo Vargas, si bien no son masivos, tienen legitimidad en sectores como Bonilla, Cachimba del agua, Miramar y Avenida Argentina con Nicanor Plaza y Homero Ávila.

"En el caso de la Cachimba del agua, la mayoría son jóvenes marginales entre 13 y 17 años, que se sienten fuera del sistema y que nos les importa nada ni nadie, porque no distinguen o no hacen diferencia entre las personas... Como están fuera del sistema, ellos no pierden nada".

Cristian Rodríguez, director del Instituto de Políticas Públicas UCN, precisó que hay un "descontento acumulado con una economía y arreglos sociales que no anduvieron de acuerdo a las expectativas", en un contexto de creciente descrédito y desconfianza en las instituciones.

En segundo lugar, el descontento se multiplicó por los efectos del término del súper ciclo del cobre, que se arrastran desde el 2013, lo cual implicó el inicio de un largo periodo de ajuste que se reflejó en desempleo, inestabilidad laboral, reducción de ingresos que afectó las expectativas de las familias antofagastinas.

"O sea, estaban las condiciones sociales y económicas para la irrupción del descontento de amplios segmentos de la sociedad", apuntó.

"También estuvo la irrupción en la protesta pacífica de grupos delictivos organizados para realizar delitos (saqueos al comercio, incendio de establecimientos), que transformaron las manifestaciones pacíficas en violencia. Finalmente, estuvo el actuar de una fuerza policial que no tuvo las capacidades y la eficacia para identificar, aislar y controlar la acción de los grupos delictuales infiltrados.

"Alguien que sale más temprano y toma el metro a las 7 AM tiene la posibilidad de una tarifa más baja... quien madrugue puede ser ayudado a través de una tarifa más baja".

J. A. Fontaine, exministro, 7 de octubre de 2019

"En medio de esta América Latina convulsionada, Chile es un verdadero oasis con una democracia estable".

Presidente Piñera, 8 de octubre de 2019

"Estamos en guerra contra un enemigo poderoso, implacable, que no respeta nada ni a nadie, que está dispuesto a usar la violencia y la delincuencia sin ningún límite".

Presidente Piñera, 20 de octubre de 2019

La crisis de los liderazgos

Todas las encuestas muestran otra cosa definitivamente dramática. No hay ninguna institución que tenga solidez en su credibilidad y confianza. ¿Se trata de un efecto indeseado e inevitable de la democracia o estamos en presencia de políticos que son parte del problema? Interpretar a Chile, los chilenos y el mundo es hoy cada vez más difícil, en tanto las dos corrientes ideológicas que dominaron el siglo XX no son tan nítidas. Peor aún, cuáles son las ideas de desarrollo para Chile, cuáles son las ideas matrices en discusión. Aquí, debe decirse, en general campea el desolado. Alberto Torres, sociólogo, apuntó que la clase política cuenta con una responsabilidad primaria en las causas del estallido social. Desde el retorno a la democracia, conocía el diagnóstico, no obstante los esfuerzos no fueron suficientes y si bien hay indicadores de pobreza e indigencia a la baja a desigualdad se perpetuó e incluso, se acrecentó. "Esto implica que el discurso de la igualdad de oportunidades en muchos casos se percibió como teórico antes que real. Los fallos son estructurales: debemos apuntar a un modelo que releve una mayor preponderancia del Estado en los temas país, sin comprometer la libertad de empresa, asociación y las libertades individuales. Por otra parte, estimular la consolidación de un modelo sociopolítico que apunte a una mayor solidaridad. Otro fallo posible radica en la ansiedad por generar cambios en forma inmediata, referidos principalmente por la oposición. Los cambios deben realizarse, pero en forma gradual y como parte de una agenda país con plazos definidos", explicó. Carlos Cantero, exparlamentario y doctor en sociología, precisó que la gente tomó convicción que la causa basal de sus males está en la crisis ética, que invade toda la sociedad. "Hay consciencia de la traición al pacto social por parte de la política y los políticos de todos los colores, que no cautelan el bien común: salud, educación, seguridad, sirviendo intereses privados". "No se espera nada de los políticos, se desprecia su rol. Un segmento juvenil cree que debe destruir el orden preestablecido, lo que explica las movilizaciones, la violencia, los robos, saqueos, la quema de edificios, etc. La autoridad política muestra ineptitud para entender y enfrentar estos conflictos", apuntó.

"Estas manifestaciones son de gente que te está diciendo a gritos 'oye, solucióname estas cuestiones que no dan para más', por lo tanto, probablemente sí estaría (en la calle)".

Mario Desbordes, pdte. de RN, 12 de noviembre de 2019

"Presentar la cuestión constitucional como la clave del malestar es un simplismo, una utopía halagadora... en estos tiempos ideológicamente flojos".

Carlos Peña, rector UDP, 1 de noviembre de 2019

"Son tantas 'weás' que no sé qué poner" (SIC).

Letrero de un protestante, octubre de 2020

La cuestión económica: las expectativas, el menor crecimiento y el impacto en los ingresos

E-mail Compartir

Chile ha crecido y mucho desde 1986. Eso ha permitido tener resultados notables, como reducir la pobreza desde el 40% en los 90 hasta menos del 8,6% en la actualidad. Pero hay que entrar en detalles para entender lo que esconden las macro cifras. Cuando hablamos de pobreza multidimensional, los buenos resultados quedan algo opacados: 20,7% (Casen 2017). Otro punto es la desigualdad en sus dos formas de verla. La objetiva y otra más difícil de entender: percibir que la desigualdad es un muro infranqueable y que por más esfuerzos que se hagan, el resultado será el mismo: éxito para los privilegiados (ya sea en lo económico o incluso en la justicia) y derrota para los sectores más desposeídos. Un ejemplo concreto: "En Antofagasta un postulante con apellido común tiene menos posibilidades de ser contratado, ganando incluso 1.054.000 pesos menos que un candidato de apellido poco común". Este es un detalle de la conclusión a la cual llegó un grupo de estudiantes locales quienes, constataron que la discriminación por apellidos en la etapa de reclutamiento, se refleja en la sociedad local. El estudio "El peso del apellido en el proceso de selección personal en la ciudad de Antofagasta", por alumnos de ingeniería comercial de la Universidad Católica del Norte (UCN), apoyados por el profesor Dusan Paredes, dio cuenta de una realidad que solo confirma la segregación existente en el país, la que apenas se ha movido el último siglo. Respecto de la "objetiva", la Cepal indicó en su informe 2017 que en nuestro país hay una alta concentración de la riqueza. En 2017, el 50% de los hogares de menores ingresos tenía un 2,1% de la riqueza neta, el 10% concentraba un 66,5% del total y el 1% más acaudalado el 26,5% Otro análisis de Boston Consulting Group en 2019 dio cuenta que 140 chilenos concentran el 20% de la riqueza del país, unos US$ 500 mil millones. Pablo Manterola, académico de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la UCN, citó que las verdaderas causas del estallido social no han de buscarse en la economía, sino únicamente en nuestra percepción de la economía, "en una percepción negativa y pesimista, naturalmente". "No me resulta posible identificar un solo factor económico que explique las multitudinarias marchas, y menos los hechos de violencia que las han seguido. Es verdad que la economía mundial, y la chilena con ella, venían experimentando un estancamiento por lo menos desde principios de 2019. Este estancamiento tenía como causas, al menos en la superficie, la guerra comercial entre Estados Unidos y China, especialmente sensible para una economía abierta como la nuestra -cuyo desempleo estaba pegado en un frustrante 7% a 8%-. Pero también es cierto que las remuneraciones venían experimentando un progresivo aumento en términos reales, y la inmigración prometía mejorar el techo del crecimiento potencial del país. A mi juicio, no hay cifra que baste para explicar el estallido social". El economista José Miguel Serrano apuntó que se crearon grandes expectativas con el arribo de Piñera, en particular que la situación económica de los menos privilegiados iba a cambiar drásticamente y los pobres iban a tener un mejor pasar. Pero a poco andar - ya durante el segundo semestre de 2018 se comenzó a mencionar que el crecimiento no se traducía en mejoras salariales.