Secciones

Gigante francés de la tecnología aeroespacial fabricará espejos del ELT

ASTRONOMÍA. En Francia se construyó fábrica de última generación para armar instrumental óptico.
E-mail Compartir

Redacción.

Entre junio de 2015 y marzo de 2019, la ESO (European Southern Observatory) adjudicó a la francesa Safran Reosc, una de las empresas líderes en el desarrollo de óptica para la astronomía y la aeronáutica, los contratos para la elaboración de los cinco espejos del Extremely Large Telescope (ELT) que será instalado en el Cerro Armazones, frente al complejo astronómico Paranal.

Para el cumplimiento de los acuerdos, la multinacional Safran inauguró el martes pasado, en la zona de Saint Benoît, Francia, una fábrica de última generación dedicada a la producción de los segmentos de cada espejo del E-ELT.

Para Xavier Barcons, director general de ESO, las nuevas instalaciones permitirán desarrollar uno de los proyectos más ambiciosos de la década.

"El ELT nos permitirá responder muchas preguntas sin respuesta sobre nuestro universo y nos dará pistas sobre dónde podría existir vida fuera de nuestro sistema solar. Este es un gran desafío técnico, para el cual la industria europea tiene un papel central que desempeñar", indicó

Por su parte, Martin Sion, presidente de Safran Electronics & Defense, indicó que el desarrollo de la nueva fábrica constituirá un importante avance en la producción de instrumental óptico de última generación.

"Esta línea de producción automatizada y robótica ofrecerá un verdadero avance en términos de competitividad y agilidad en la producción. Y ayudará a garantizar un alto nivel de satisfacción para la ESO", indicó el ejecutivo.

Cinco espejos

El ELT podrá detectar estrellas 26 veces menos brillantes, con una resolución cuatro veces mayor. Será el primer telescopio terrestre capaz de detectar agua en pequeños exoplanetas.

Parte fundamental de la óptica dice relación con el pulido de los espejos, un paso crucial y crítico del que depende la precisión del telescopio.

Con un diámetro de 39 metros, el M1 está destinado a recoger la luz para redirigirla sucesivamente a los cinco espejos.

Como parte de este programa de producción, la compañía pulirá 931 segmentos ópticos. Durante la fase de producción de tres años, los segmentos se producirán a una velocidad de una copia por día.

El espejo secundario M2 también es un desafío tecnológico: con un diámetro de 4 metros, será el espejo convexo monolítico más grande jamás creado.

El tercer espejo del telescopio -M3- es extremadamente delgado, cóncavo y está hecho de vitrocerámica y también será pulido y verificado por interferometría de extrema precisión.

Gracias a su óptica adaptativa -una tecnología que deforma la superficie del espejo para compensar la turbulencia atmosférica- el espejo M4 proporcionará a los científicos imágenes equivalentes a las de un telescopio espacial. Finalmente, el espejo M5, ayudará a estabilizar la imagen proporcionada por el telescopio una vez que esté montado.

"El ELT nos permitirá responder muchas preguntas sobre nuestro universo y nos dará pistas sobre dónde podría existir vida fuera de nuestro sistema solar"

Xavier Barcons

Director General ESO