Don Alberto Romero
Rodolfo Garcés Guzmán es un periodista que, afortunado en recuerdos y en lecturas, nos conmueve, frecuentemente, con sus ´páginas evocadoras. Recién hemos regresado al viejo Santiago de 1938, leyendo sus trazos en torno a Alberto Romero, ese gran novelista chileno que relató cómo era nuestra existencia popular más desgarrada. La vivió, como escritor honesto, persiguiéndola, encuestándola en sus actores. Fue espectáculo clásico de la noche santiaguina hallarse con don Alberto, en los barrios más turbios, andándolos, con seguro paso, observándolos, escuchándolos. Con su chambergo, que no desdeñó nunca, tras sus anteojos de lector severo y su increíble parecido con el pintor Foujitas, le entregó a las letras chilenas preciosos testimonios de nuestra realidad. ¿Quién olvidaría la ternura de "La Viuda del Conventillo", uno de los libros de mayor intensidad humana en nuestra literatura? ¿Y quién desdeñaría la historia de Perucho González?
La viuda del conventillo es, sin duda, una de las obras cumbres de Alberto Romero, en la cual el autor desarrolló la temática social que caracterizó su labor creativa y que le valió el reconocimiento del ambiente literario nacional. La temática social es en Romero el leit motiv del ejercicio creativo, siendo el eje sobre el cual desarrollaró la inmensa mayoría de su obra.
Cajero de la Caja de Crédito Hipotecario, se hallaba siempre, puntualmente, tras las rejillas de su puesto, sin que los clientes sospecharan que, allí, no había un funcionario, sino un creador. Ahí, lo íbamos a buscar con el poeta Víctor Castro para inicia4 nuestros paseos de crepúsculo que, a veces, concluía pasada la medianoche. Don Alberto caminaba con parsimonia, pidiéndonos hablarle por "el oído bueno", vigilante de cuánto importaba a los hombres.
Esta pasión explica sus largas presidencias en la Sociedad de Escritores de Chile y en la Alianza de Intelectuales. No pidió honores: los ganó con la limpidez de su vida y la nobleza de sus libros, Volvemos a caminar con el inolvidable Alberto Romero, entre las líneas de este artículo.
NdeR. Alberto Romero falleció el 21 de noviembre de 1981. Este es nuestro homenaje.
Andrés Sabella
Andrés Sabella, El Mercurio, 28.01.1989