Eugenio Sugg Gálvez
La necesidad urgente de "actualizar" la normativa nacional para proteger el uso de los datos personales, es -según expertos- la principal conclusión del reciente episodio de FaceApp. La aplicación, que permite usar un filtro para envejecer el rostro- a través de varias cláusulas abusivas en sus condiciones de uso, permitió el acceso de sus creadores a información sensible y personal de quienes la descargaron.
Asimismo, fue utilizada por ciberdelincuentes quienes -valiéndose la popularidad de la aplicación- lograron engañar a miles de usuarios.
En efecto, millones de usuarios de redes sociales a nivel global compartieron durante la semana pasada sus fotografías envejecidos utilizando la aplicación disponible para Android e iOS: Desde rutilantes estrellas de cine y famosos cantantes, hasta deportistas top y conspicuos políticos.
Sin embargo, el auge de FaceApp atrajo a los estafadores, quienes diseñaron modelos de engaño para intentar sacar provecho de su popularidad. Si bien la aplicación en sí es gratuita, algunas funciones marcadas como "PRO", son pagas.
Desde ESET -compañía dedicada a la detección de amenazas- explicaron que los estafadores utilizan una falsa versión "Pro" -de forma gratuita- como señuelo. Además, apuntan a que se difundió esta versión ficticia de la aplicación volviéndola viral, al momento que una búsqueda en Google de "FaceApp Pro" arrojó hace unos días cerca de 200 mil artículos.
"Todo lo que esté en boga atrae a los estafadores, y cuanto más grande sea la ola, mayor es el riesgo de ser víctima de una estafa. Antes de sumarse y participar de aquello que se está utilizando, como en este caso puede ser FaceApp, como usuarios debemos atenernos a los principios básicos de seguridad", advirtió Camilo Gutiérrez, jefe del Laboratorio de ESET Latinoamérica.
Condiciones
Un reciente estudio de Kaspersky -empresa global de ciberseguridad- reveló que cerca del 55% de los internautas latinoamericanos no lee las condiciones de una aplicación antes de descargarla en sus dispositivos, porque las considera extensas y aburridas, o porque no cree que esto lo perjudique, ignorando la configuración de privacidad.
De estos, los argentinos y chilenos llevan la delantera con un 71%, seguidos por los colombianos (69%), brasileros (64%), peruanos (57%) y mexicanos (54%).
Según Pablo Viollier, analista de Políticas Públicas de la ONG Derechos Digitales, la principal conclusión que se puede sacar del episodio FaceApp es que "el consentimiento de los usuarios no es suficiente protección para resguardar sus datos personales".
Explicó que en este caso, la aplicación tenía términos y condiciones completamente abusivos.
"Al momento de usarla, el usuario entregaba una licencia perpetua, sublicenciable, gratuita, cedible y un montón de otros aspectos absolutamente abusivos respecto del contenido generado por la app, y eso es porque está demostrado que las personas no leen los términos y condiciones, y cuando lo hacen, están entregados de tal forma que son muy difíciles de entender".
Legislación
No obstante reconocer la responsabilidad de cada usuario en esta materia, Viollier advirtió que el debate debe centrarse en los aspectos estructurales del mercado y en una mejor normativa. "No puede permitirse que una empresa establezca condiciones así de abusivas, independiente si el usuario las acepta o no", dijo.
Y advirtió que es algo que ya se ha hecho en otras áreas como el derecho laboral.
"Se establecen sueldos, jornadas o vacaciones que no se pueden ignorar aunque haya consentimiento de las partes. Hay una asimetría de poder o información, el consumidor no puede hacer un estudio de mercado cada vez que va a comprar, por eso las empresas deben etiquetar el valor por unidad o por litro, de tal forma que el consumidor puede efectivamente comparar y no puede renunciar a su derecho de garantía mínimo", advirtió.
Ese línea de protección no ha sido seguida por la legislación nacional en lo que respecta a los datos.
En esa materia, Chile promulgó la primera ley de protección de datos de Latinoamérica y actualmente hay una decena de proyectos de ley tramitándose en la Cámara de Diputados, y otro tanto en el Senado, asociados a esta materia.
"Hay consenso en torno a que la legislación actual requiere una actualización urgente por el bajo nivel de protección que entrega a los titulares y porque no cuenta con una autoridad administrativa que sea capaz de fiscalizar su cumplimiento", concluyó Viollier.
Proyectos
En materia legislativa, el proyecto que mejor avanza -y al parecer el más completo está radicado en la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado.
Hace unas semanas, esa instancia aprobó gran parte del articulado del proyecto, pero está pendiente una definición respecto de si se creará una agencia especializada para hacerse cargo de ese tema o si el rol lo asumirá el Consejo para la Transparencia.
En esa oportunidad, el presidente de la comisión, senador Felipe Harboe, aseguró que "este es probablemente el proyecto de mayor impacto en la ciudadanía que vamos a tener en los últimos 10 años. Estamos hablando de una ley que va a establecer que todos los chilenos y chilenas vamos a ser dueños de nuestros datos personales y por tanto las empresas que los administran no son los dueños".
El proyecto contempla una serie de normas que detallan qué se entiende por datos personales, datos sensibles, los derechos que tienen las personas sobre sus datos, las responsabilidades de quienes los manejan tanto en el sector privado como en el público y las multas que se arriesgan por el mal uso de la información.
Según Voillier, este proyecto va en la línea correcta, aunque lamentó que no considere como información sensible los hábitos de las personas, que usan aplicaciones como Facebook para perfilarlas.
Pablo Voillier, Analista Polt. Púb. Derechos Digitales
"No puede permitirse que una empresa establezca condiciones así de arbitrarias, independiente si el usuario las acepta".
55% de los internautas latinoamericanos no lee las condiciones de las apps antes de descargar.
20,1% de los chilenos fueron víctimas de phishing vía correo electrónico o en portales de internet durante 2018, esto según un informe elaborado por la empresa Kaspersky Lab.
1 millón de descargas alcanzó en pocos días la app Face App, una copia de la original que llegó a estar en segundo lugar de las más descargadas en la Play Store.
71% de los chilenos no lee las condiciones de uso antes de descargar una aplicación, el mayor porcentaje entre los países de Latinoamérica, según un estudio de Kaspersky.