"La primaria presidencial va a ser entre un ex alcalde de Las Condes y otro de Puente Alto".
Manuel José Ossandón — Senador de RN
"La institución está en crisis, hay un descontrol, esto no ocurría antes".
Emiliano Arias
Fiscal de O'Higgins criticando a
Jorge Abbott
El aviador Meauley realiza un raid con una escala desde la costa atlántica hasta la costa del Pacífico de Estados Unidos, cubriendo 5.500 millas en 44 horas y 15 minutos. La mayor etapa es de 880 millas.
El profesional usó un aeroplano De Haviland con motor Liberty, que está en excelentes condiciones.
La fuga de un reo desde la cárcel pública actualiza la evidencia de la falta de seguridad y de mayor dotación de personal en el recinto carcelario.
Ayer, a eso de las 15 horas, el preso Manuel Carrasco, condenado por violación, escaló la muralla y saltó hasta la casa del exalcalde Juan Rojas, para luego perderse entre las calles.
Una de las consignas de la astronomía es encontrar algún mundo parecido a la Tierra, al menos por su masa, pero casi todos son enormes. También lo es el último planeta extrasolar hallado, pero éste ya se acerca a los parámetros del nuestro. Se llama Gliese 581 e, tiene una masa de 1,9 veces la terrestre, y es el más ligero descubierto.
Es insoslayable y sano que la gente discuta y aporte en asuntos que tienen que ver con el devenir del territorio, uno de los cuales dice relación con el sistema de turnos mineros y lo que la Región de Antofagasta deja de percibir por la conmutación.
Opiniones hay variadas. En un lado están aquellos que estiman que el camino delineado con el proyecto de ley de la diputada Paulina Núñez es el correcto y debe avanzarse sobre eso, en el entendido que en la actualidad se ha abusado o mal interpretado de una norma que permite las autorizaciones respectivas a las compañías.
Pero hay otras opiniones. La más repetida es que no se puede obligar a nadie a vivir en una ciudad o zona determinada, punto de vista desde el cual, una iniciativa de este tipo tendría una colisión directa con exigencias más fundamentales. De allí que se sostenga que la salida correcta es mejorar la oferta de nuestras ciudades para retener y atraer talento.
En tal perspectiva, hay una cuestión más de fondo y necesaria de abordar, la que tiene que ver con la manera en que parte de estos trabajadores miran a nuestras ciudades. No puede obviarse algo tan relevante, porque es sustantivo para entender el por qué se produce este éxodo.
Y aquí debe hacerse un mea culpa y más que eso, sentarse a elaborar un plan para corregir los déficits y proponer una oferta para nuestras ciudades, acorde a las exigencias de un mundo globalizado y para esto es más relevante que nunca trabajar en conjunto y lograr compromisos básicos y elementales respecto al presente y futuro. Ello solo será posible si el sentido de pertenencia comienza a desarrollarse con fuerza y un plan claro y consensuado.
El programa Creo Antofagasta es una oportunidad y enorme responsabilidad. Si se ejecuta y mejora, habrá cambios sustantivos para la capital regional.
Porque debe reconocerse que la discusión de los "7x 7" esconde algo más profundo que el sistema de turnos, más bien se vincula con el reclamo de calidad de vida en nuestras ciudades. Ese es el fondo.
Eso no puede perderse de vista y con eso claro será más sencillo reconocer un plan de abordaje.
Todo indica que las próximas décadas serán mucho más complejas para el trabajo de las personas, ante la pérdida de oportunidades laborales. Todos los expertos y analistas - no la narrativa de la ciencia-ficción -, coinciden en que las variables del empleo están y estarán determinadas por la inestabilidad, y por una empleabilidad hasta cierto punto fugaz, ante el avance de la automatización y la robotización.
Se estima que las personas con alta formación tecnológica tendrán más oportunidades que aquellos con menos. Estos últimos estarán muy a la deriva, desarrollando trabajos informales u ocasionales, sin posibilidad de generar recursos previsionales para la vejez y la salud.
La OIT ha puesto históricamente en evidencia lo que significa el trabajo como forma de asegurar la paz y la justicia social, y como camino para que el ser humano se dignifique socialmente.
No cabe duda que la automatización y la robotización es un factor que ya está marginando de oportunidades laborales, de manera creciente, a los menos preparados y con menos relaciones sociales vinculadas al empleo. Personas que trabajaban en funciones de servicio y atención de público, por ejemplo, los más y en la escala más baja de la especialización o la formación, están perdiendo sus empleos de manera dramática. Lo propio ocurre con personas que han trabajado como operarios o como trabajadores manuales, aún cuando se trata de aquellos con formación técnica.
La clase media está reduciéndose, producto de los mismos factores, lo que ha sido advertido por la Ocde.
Ello tendrá un efecto en los sistemas previsionales para la vejez y la salud, y en el financiamiento de políticas de Estado para el igualamiento de derechos y las oportunidades.
Así, es oportuno que los gobiernos y los parlamentos comiencen a debatir el establecimiento de una tasa sobre el uso de equipos y programas automatizados y/o robotizados que sustituyen el trabajo humano. Cada empresa o entidad que sustituya el trabajo humano por medios automatizados y/o robotizados debería pagar un tributo que exprese en justicia lo que implica el costo social de la pérdida del derecho al trabajo, tasa que permitiría generar recursos que puedan financiar la vejez en condiciones de dignidad, especialmente de los que irán quedando al margen.
Esa tasa debería constituir fondos que sean de manejo de los sistemas previsionales, y no simples impuestos que terminen financiando otros objetivos públicos.
De esa manera, también se podría cumplir con la promesa de la ciencia, de que la automatización y la robotización traerá oportunidades para la felicidad humana, y no la amenaza de la sustitución de las personas para la garantizar la optimización de las ganancias, que, inequívocamente, el mercado solo asigna a unos pocos.
Sebastián Jans Pérez
Gran Maestro de la Gran Logia de Chile