Cristian Castro Orozco
Es muy probable que muchas de las frescas lechugas y acelgas que usted adquiere dentro de reconocidos supermercados locales sean "made in Antofagasta". Pero saberlo es casi imposible dado que ningún sello lo testifica.
Es por ello que los cultivadores hidropónicos de Altos la Portada ya tienen preparado un nuevo sello (próximo a estrenar) que le dará la distinción a sus productos estrella, cuyos principales demandantes son los supermercados Unimarc y Jumbo.
Pero eso no es todo para este año. Extender la marca de la cooperativa hacia Calama e Iquique; ser proveedores de la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb) y agregar a sus dos productos estrellas nuevas cosechas como tomate del árbol, sandías, frutillas y hasta aceitunas son algunas de las metas que tienen los más de 70 asociados que integran la cooperativa de agricultores de Altos la Portada.
Esta cooperativa se emplaza en desérticos paños de arenales en el sector de La Chimba, en donde un grupo de cultivadores a través de una innovadora técnica (ver recuadro de ésta página) lograron cosechar en el desierto.
Balance
Durante 2018 hubo muchas dificultades para los emprendedores del sector, entre las cuales cuentan las vicisitudes del clima y los robos que han afectado a varios asociados (en seis años les han robado en 40 ocasiones).
Pero su presidenta Dolores Jiménez, dice que las alianzas con nuevos demandantes les llevó a tener una excelente producción durante el año pasado.
"Hemos aumentado las producciones a raíz de que tenemos nuevos contratos, y en estos nos exigen que debemos tener mayor número de ofertas. Nosotros cada uno entregamos el 20% de la producción a la cooperativa, y ese 20% se ve reflejado en ocho toneladas mensuales, pero el 80% restante queda para el socio que lo vende por su parte", explica.
En la misma línea el gerente de operaciones de la cooperativa, Jaime Barra, cuenta cuál fue el monto total por el concepto solo de la venta del 20% durante el 2018.
"Nosotros sin tener a nuestros clientes estratégicos como lo son dos supermercados anualmente alcanzamos a vender como cooperativa unos $26 millones, pero con la incorporación ahora de estos clientes nuestra venta creció y cerramos el año pasado con casi $96 millones de venta".
Otra de las circunstancias que ha jugado a favor de los asociados es la preferencia cada vez mayor de la población en consumir productos sanos, es decir verduras y vegetales, los cuales están siendo cada vez más cotizados tanto en supermercados, a los vendedores particulares de la cooperativa y en La Vega.
"Para este 2019 nuestros proyectos es estar presentes en todas las cadenas de supermercados locales, abarcando también otras ciudades como Calama e Iquique, diversificar los productos y también estamos en conversaciones con la Junaeb para que nuestros productos no solo estén en los supermercados o almacenes, sino también en escuelas".
"Ahora creamos un nuevo envase que nos caracterizará en el cual la persona podrá reconocer un producto regional, sano y cultivado con agua de mar desalada", dijo Barra.
Hidroponía
Esta es una técnica de cultivo en la cual no se utiliza directamente la tierra, sino que las cosechas se realizan a base de disoluciones minerales prácticamente "en el aire", las cuales son regadas y controladas por un complejo sistema que va controlando el crecimiento de la planta.
Lechugas Tomate de árbol Sandías y frutillas
Estas son las plantas herbáceas más cotizadas (junto a las acelgas) a los agricultores. Éstos cuentan que además su producción en masa es más económica, por lo cual pueden inclusive cosechar diferentes tipos, como la lechuga morada o escarola. Para realizar el proceso, los cultivadores cuentan que solo lo hacen con semillas "certificadas", lo que quiere decir que se garantizará el posterior brote de la misma. Esto quita el factor de riesgo de que parte de lo plantado no germine.
A tres meses de madurar se encuentra lo que sería el primer experimento de comercializar "tomate del árbol" (conocido también como tomate andino o francés) que es un fruto que crece generalmente en países andinos (chile no está incluido) y que se diferencia del tomate que usted conoce por ser más pequeño en tamaño, agridulce y además muy utilizado en la cocina gourmet. Jaime Barra, quien es gerente de operaciones de la cooperativa cuenta que uno de los socios se interesó en el cultivo de este fruto luego de ver que muchos residentes extranjeros en la ciudad comentaban que prácticamente no existía dicho alimento, siendo éste muy predilecto en sus dietas.
El mérito es del joven Fernando Salinas, quien luego de varios experimentos fallidos logró dar con su primera cosecha de sandías producidas en el norte. En la temporada 2018 Salinas contó que sus sandías (que en promedio pesaban ocho kilos), solo lograron pesar seis kilos. "Ocurrió que durante el año pasado hubo muchos días nublados, días de frío. Entonces lo que más necesitan las sandías es de la luz del sol. Por eso la cosecha no logró el porte de las anteriores". No obstante dice que para este 2019, la siembra recién será en agosto para cosechar en diciembre. "Además postulé a un proyecto para poder producir frutillas, las cuales serían las primeras a gran escala para ser comercializadas".
Acelgas
Si bien tienen fama de ser un "vegetal aburrido", el consumo de la acelga ha aumentado al nivel en que los agricultores también la consideran para su producción en masa. La característica de la acelga es que al ser un vegetal en donde la parte que más se aprovecha es la hoja en vez de la raíz, los trabajadores en época de cosecha solo arrancan las hojas, dejando los tallos intactos en el macetero, lo cual al cabo del tiempo vuelven a brotar sin necesidad de replantarlos. Por ello son muy económicas.
2006 comenzó el emprendimiento del cultivo vía hidroponía en el sector de Altos la Portada, dado a que los agricultores del kilómetro 12 habían sido movidos del lugar por cambios en plan regulador.
20% de la producción de cada uno de los socios va hacia la cooperativa, la cual después la venden a sus demandantes, el resto de la producción queda para el asociado, quien la vende por cuenta propia.
$96 millones fue el balance de las ventas totales de la cooperativa durante el año pasado, sin contar las que efectuó cada uno de sus asociados por cuenta particular.