Guerra Comercial impactó fuerte en el cobre y fondos de pensiones
ECONOMÍA. Mientras el metal rojo empezó el año en US$3,25 y cerrará cerca de los US$2,95, la rentabilidad de los fondos terminó con el peor resultado en siete años por efecto de esta pugna.
Se podría decir que la Guerra Comercial entre Estados Unidos y China condicionó la evolución de la economía mundial durante buena parte de 2018. Y -según algunos analistas- es probable que ese escenario se mantenga durante el año que viene.
En concreto, en Chile sus efectos se dejaron sentir principalmente en dos áreas: la menor cotización del cobre (con todo lo que eso significa en materia de inversión, empleo y salarios) y los negativos resultados de los fondos de pensiones que cerraron con su peor rentabilidad en los últimos siete años.
Los primeros atisbos de esta disputa comenzaron a tomar vuelo durante el primer trimestre de este año cuando Donald Trump anunció su decisión de elevar los aranceles sobre las importaciones chinas de acero y aluminio.
El gigante asiático no se quedó atrás y respondió con la imposición de aranceles comerciales a un conjunto de 128 productos estadounidenses.
Hasta promediar 2018 la temida guerra se llevó en anuncios y escaramuzas, las solo se hicieron efectivas en julio, cuando se produjo el primer disparo y entraron en vigencia impuestos a US$34.000 millones en productos chinos.
De allí en adelante la situación fue en escalada y se estima que a esta altura Washington ya impuso aranceles a US$250.000 millones de productos chinos, y Beijing hizo lo propio a US$110.000 millones en importaciones estadounidenses.
Hegemonía
Respecto del trasfondo de esta disputa el analista y exdirector general de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, Osvaldo Rosales, consideró que "lo que está en ciernes entre China y Estados Unidos es un tema que nos va a acompañar por décadas", haciendo hincapié en que "éste no es un tema comercial, sino que una batalla tecnológica, por la hegemonía en el siglo XXI".
Rosales, expuso el jueves en un seminario organizado por la Asociación Interamericana de Periodistas de Economía y Finanzas (Aipef) y Sura, instancia en la que se abordó especialmente el impacto del conflicto comercial entre China y Estados Unidos.
Comentó que "Estados Unidos tiene un sueño del pasado, de volver a la década de 1960, en que Detroit era el epicentro de la industria automotriz".
En contrapartida, dijo que el gigante asiático busca "ascender en la jerarquía tecnológica de las cadenas de valor; reestructurar su sector industrial de manera que en 2025 reduzcan su brecha tecnológica con occidente, y en 2045 sean líderes de la innovación global".
Y advirtió que "China ya no es mera copia; en varios ítemes supera a Estados Unidos".
Datos
El gerente de Estudios de Renta4, Guillermo Araya, advirtió que la incertidumbre sobre los mercados y la economía mundial se prolongará -al menos- durante el periodo que se mantenga Trump al mando de Estados Unidos.
"Si no es una guerra comercial con otra potencia -como ahora es China- será por otro mal manejo diplomático, amenaza de conflictos armados con Irán o Irak, sus relaciones con la Fed, etc.", comentó Araya.
Y agregó que si los datos comienzan a mostrar un impacto real en la economía china y hay indicios en el mismo sentido para la economía norteamericana, el escenario podría ser aún peor.
"Éste no es un tema comercial, sino que una batalla tecnológica, por la hegemonía en el siglo XXI".
Osvaldo Rosales, Exdirector general de Relaciones Económicas Internacionales Cancillería"