Niño, este es tu libro
En estos tiempos en que se estimula a personas de cualquier edad para que participen en concursos de "Escriba un cuento en cien palabras", logrando que escriban y que unos pocos sean premiados, me resulta inevitable recordar a aquellos escritores que han hecho el ejercicio personal de escribir cuentos breves y brevísimos.
Un hermoso ejemplo es "Chile, fértil provincia", libro de Andrés Sabella, dedicado a los niños. Sus cuentos son bellos y valen por sí mismos, pero, como si eso fuera poco, también portan la tarea de enseñar: Comienza con estas palabras: "Niño de Chile, este es tu libro, como quien dice un jardín para tus ojos. Lo escribí de mi mano y en ella temblaban alas. Yo quiero que sea entre tus dedos un poco de luz maravillada."
Algunos cuentos breves y relacionados con nuestra región: "Camanchaca: Estoy en el corazón de la noche pampina, con las estrellas poderosas volando en derredor de mi cabeza; la noche gira en sí misma, golpeada por el frío, la noche muestra su cara húmeda por la camanchaca. Camanchaca: lágrimas de los mineros extraviados para siempre".
"Río Loa: Herradura de agua, mira el desierto y en su carrera de lenta brida moja la garganta de la tierra. Verdea en las vegas de Atacama. Después busca el mar. pero el desierto abre todas sus bocas y lo vence, hasta dejarlo como hebrita de luna"
"Pastel de choclo: En la fuente de greda aroma el delicado manjar. Ahí se guarda el secreto de la tierra donde el viento conversa con los maizales calameños y los choclos se balancean, pesadamente, como antiguos dioses de barba pobre"
"La pampa: He aquí la pampa chilena ¡qué dura mejilla de la tierra! Sobre sus kilómetros de fuego viven el silencio y la soledad. Las piedras recuerdan las materias del espanto. Y su cielo sonríe, dulcemente, a lo lejos, como una limpia dentadura azul".
Creemos que 78 años después de su primera edición, este libro sigue cumpliendo su tarea. Su nombre, además, nos traslada a los versos de Alonso de Ercilla y abrazamos nuestra chilenidad.
Nota de la Editorial. Recordemos que el 13 de diciembre de 1912 nació el autor de este libro, el poeta Andrés Sabella.
Andrés Sabella
Andrés Sabella