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La filosofía del feminismo

"El Congreso de nuestro país es uno de los lugares llamados a representar la riqueza de la causa de la mujer".
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Ernst Tugendhat, notable pensador alemán, sostiene que la antropología no es simplemente una disciplina filosófica entre otras, sino que se la debería entender como la filosofía primera, es decir, que la pregunta "¿qué somos como seres humanos?" es aquella en que tienen su base todas las preguntas y disciplinas filosóficas.

¿Tiene el feminismo un sustrato filosófico? ¿Responden los movimientos actuales a alguna corriente de pensamiento o teoría política? Desde la irrupción de la filosofía en la Grecia y Roma Clásicas, ha habido pensamiento de mujeres (véase a Gilles Ménage, Historia de la Mujeres Filósofas).

La cristiandad ha producido mujeres excepcionales del ámbito religioso y secular. Sin embargo, el feminismo puede reconocer en el giro cartesiano, su inicio remoto y en la ilustración su real origen; pero, ha sido el siglo XX donde ha aparecido en todo su esplendor. Europa, América y por cierto Chile fueron arrebatados por esta causa.

Quisiera encarnar en Clara Campoamor, extraordinaria pensadora, escritora y abogada española, la quintaesencia del feminismo, que es la lucha por la vindicación de la mujer, fundada en una mirada antropológica, la mujer es un ser humano, es una persona al igual que el hombre y por tanto con igualdad de derechos. El feminismo de este cuño es una vindicación de justicia, de verdad y de libertad. ¿Cuál es el escenario? Las cortes españolas de 1931. Una comisión de 21 diputados (ella la única mujer) redacta la nueva constitución y propone un decisivo artículo: "No podrá ser fundamento de privilegio jurídico, el nacimiento… Se reconoce, en principio, la igualdad de derechos de los dos sexos". Clara sabe la importancia que tiene el buen uso del idioma y rechaza la expresión "en principio" y propone: "No podrá ser fundamento de privilegio jurídico, el nacimiento, el sexo, la clase social, la riqueza, las ideas políticas y las creencias religiosas". Por un escaso margen vence su postura y se consagra la igualdad de derechos.

Dos hechos le ayudan a clarificar aún más el sentido de su causa. Un diálogo con su cuñada: "No te sientas más mujer por tener un hombre a tu lado; ni tú más lista por no tenerlo". Muestra que el hombre, a pesar de todo, no es el hilo conductor y lo confirma la batalla por obtener el voto femenino, donde Victoria Kent, la otra diputada, se opone al igual que su propio partido. Vence finalmente su posición.

¿Sucede en Chile algo similar actualmente? Si no es así o se fuese en otra dirección, sería dramático, puesto que se obnubilaría un problema real, la deuda que tiene el país con la mujer, en especial con la mujer trabajadora, no obstante estar consagrado en la constitución la igualdad de derechos de todas las personas sin condiciones.

Amelia Valcárcel, notable filosofa y feminista española actual, dice que su lucha no tiene que ver con la cultura de la queja sino con la cultura de la vindicación de la justicia para la mujer y las armas empleadas son las mismas de Clara Campoamor, estudio, inteligencia, argumentos, voluntad férrea y espíritu indomable, a pesar de no estar en lo políticamente correcto.

El Congreso de nuestro país es uno de los lugares llamados a representar la riqueza de la causa de la mujer y para la Universidad es un imperativo, pues, es el sitio por excelencia de la racionalidad, el diálogo reflexivo, el argumento fundado, la búsqueda de la verdad, el espíritu formativo y la conciencia crítica de la sociedad.

Salvador Lanas Hidalgo

Director académico de Escuela de Liderazgo USS

Minería, proveedores y valor compartido

"El desafío de la competitividad en el largo plazo no pasa solo por reducir costos ni por disminuir los estándares".
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En el escenario actual las empresas de la Región de Antofagasta deben liderar la batalla por la competitividad en la industria minera en general y, en particular, en la minería del cobre. Este propósito compromete múltiples dimensiones, pero sin duda, demanda un compromiso fundamental en la innovación, desarrollo tecnológico, inserción en redes globales, empresas intensivas en conocimiento. Este desafío de innovación y desarrollo tecnológico, estructuralmente implica consolidar la alianza estratégica entre las empresas mineras y las pequeñas, medianas y grandes empresas proveedoras.

Estamos hablando de pasar a una etapa cualitativamente superior en el relacionamiento entre estas empresas. Este nuevo relacionamiento debe dar origen a una nueva arquitectura organizacional en esta área. Esta, debe perfeccionar una institucionalidad de comunicación aportadora de prácticas de valor compartido en la gestión de contratos; identificar participativamente los desafíos operacionales estratégicos; promover y permitir la prueba de innovaciones en faena; fortalecer las competencias empresariales de las empresas proveedoras; diseñar y establecer cláusulas de contratos que potencien el modelo gana-gana.

En suma y en palabras de Diego Hernández, "tenemos que reaccionar ante esta realidad….esto pasa, entre otras cosas, por continuar potenciando el cluster minero, para tener proveedores de clase mundial". Michael Porter también es un buen consejero estratégico: "Los clusters son prominentes en todas las economías regionales que crecen y tienen éxito...además, juegan un papel crucial en el aumento de la productividad, la innovación y la competitividad".

El desafío de la competitividad en el largo plazo no pasa exclusivamente por reducir costos de corto plazo ni por disminuir o flexibilizar los estándares de calidad y gestión. Una mayor competitividad sustentable requiere profundizar con compromiso y valentía el valor compartido entre las empresas clientes y las empresas proveedoras y prestadoras de servicios.

En el actual escenario, una tarea clave para la industria minera y para las regiones y ciudades mineras es fortalecer esta alianza estratégica: valor compartido en la gestión de abastecimiento y contratos. De esta manera, se fortalece el aparato productivo regional, el empleo, la demanda, el dinamismo económico, la calidad de vida y la sustentabilidad.

Fernando Cortez Guerra

Gerente general, Asociación de Industriales de Antofagasta

¿Qué oferta somos?

Enfocarnos en la oferta que somos exige cierta madurez de toda la élite y exige advertir que el desarrollo del territorio pasa por lo que nosotros podamos hacer. La tentación es de reclamar para esta tierra tales futuros emprendimientos, considerando que el litio es explotado en esta zona; sin embargo, eso no es suficiente. Ese análisis exclusivo no garantiza nada.
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Hay una cosa que Antofagasta debe tener muy presente y es la calidad de oferta que es para Chile y el mundo. Este territorio sí es atractivo y puede serlo mucho más si se convence de aquello y hace las correcciones necesarias para mejorar tal disposición.

Vale la pena recordar aquello en momentos en que la región discute la posibilidad de que dos institutos que Corfo creará en el país con parte de los recursos obtenidos por el litio. Los contratos de la Corporación con SQM y Albemarle fueron muy positivos en tales términos, el fisco contará con millonarios recursos parte de los cuales servirán para apalancar desarrollos de fuste y útiles para el país.

Se ha hablado de tres institutos: Uno es el "instituto solar minero", ligado a la energía, especialmente solar, que tendría un desarrollo relevante en la zona.

Un segundo estaría vinculado al desarrollo del "Big data", es decir, el análisis y estudio de grandes volúmenes de información para obtener ideas y mejorar la toma de decisiones.

El tercero es el citado centro de manufactura avanzada, que también interesa a la zona. La tentación es de reclamar para esta tierra tales futuros emprendimientos, considerando que el litio es explotado en esta zona; sin embargo, eso no es suficiente. Solo eso no garantiza nada.

En el mundo competitivo de hoy, las posibilidades aparecen cuando la oferta es buena y óptima. Dicho de otro modo, gana quien presenta mejores alternativas. Y Antofagasta es una gran alternativa para desarrollar, por ejemplo el Instituto Solar Minero y por qué no el centro vinculado a las manufacturas. Claro que sí, considerando el desarrollo de la minería, la industria más potente del país.

Pero enfocarnos en la oferta que somos exige cierta madurez de toda la élite, exige comportarse de determinada forma y advertir que el desarrollo del territorio pasa en lo fundamental por lo que nosotros podamos hacer y menos por las contingencias que nos sean ajenas.

En el caso concreto de los centros que planea Corfo: ¿Qué oferta tenemos para quedarnos con ellos? ¿O solo pretenderemos que el Estado decidirá por un mero reclamo de supuestos derechos?

No; pensar de esa forma no nos llevará al cumplimiento de ningún objetivo; debemos ser atractivos, debemos ser la mejor oferta.