El Grupo H del Mundial se anotó ayer como el más impredecible de un campeonato que se ha caracterizado por las sorpresas. Esto porque, además del batacazo que dio Japón al vencer a Colombia (ver nota principal), Senegal protagonizó otro gran golpe al derrotar 2-1 a Polonia, equipo que llegó a Rusia como cabeza de serie.

La mera presencia de Robert Lewandowski, además de la buena etapa clasificatoria que realizaron, le daba el favoritismo a los polacos de cara el encuentro disputado ayer en el Otkrytie Arena de Moscú ante 44.190 personas.

Sin embargo, Senegal, a fuerza de físico, desesperó a Polonia y aprovechó los regalos del equipo de Adam Nawalka para lograr una victoria que atenta contra todo los pronósticos.

El primer gol llegó a los 38 minutos, cuando la enésima recuperación de balón de Mbaye Niang derivó en un remate de Idrissa Gana Gueye que se desvió en el defensor polaco Thiago Cionek, entrando lentamente en el arco de Wojciech Szczesny y decretando el 1-0.

El segundo llegó a los 15' del complemento, cuando una grave descoordinación entre un defensor y el arquero europeo permitió al propio Niang definir a placer para poner el merecido 2-0. Polonia en todo ese tiempo apenas generó peligro en la portería defendida por Khadim N'Diaye.

Tras este nuevo tanto africano, el partido entró en un letargo que implicó un dominio insulso de Polonia y la apuesta por el contragolpe de Sadio Mane, quien al igual que Lewandowski no tuvo un buen partido.

Así, sobre el final del partido y de pelota detenida, llegó el descuento polaco por medio de Grzegorz Krychowiak, gol que no fue suficiente para poner en duda el triunfo del equipo adiestrado por Aliou Cisse.

Tras la victoria, la primera de una selección africana en Rusia, el propio Cisse, héroe y capitán de Senegal en la Copa del Mundo de Corea-Japón 2002, torneo en el que alcanzó los cuartos de final, destacó lo hecho por sus dirigidos. "Polonia es un equipo muy peligroso. Nos las arreglamos para controlar el juego tanto emocional como táctico, y nos merecíamos ganar. Senegal representa a toda África. Estamos orgullosos de esto", dijo.

El seleccionador polaco, por su parte, fue más severo con su equipo al señalar que "para ganar en la Copa del Mundo, tienes que jugar mejor que esto".

El domingo, Senegal enfrentará a Japón en Ekaterimburgo y Polonia hará lo propio ante Colombia en Kazán.

Contra todo pronóstico, Rusia dejó ayer prácticamente asegurado su paso a los octavos de final de su Mundial, siendo el primer equipo en hacerlo, al derrotar por 3-1 a Egipto, conjunto que necesita un milagro para seguir con vida en la Copa del Mundo.

Por la segunda fecha del Grupo A, ante 64.468 espectadores en el Estadio Krestovski de San Petersburgo, el cuadro anfitrión salió a confirmar lo hecho en la primera jornada, cuando aplastó 5-0 a Arabia Saudita. Egipto, por su parte, intentó lavar la pobre imagen que dejó en la derrota ante Uruguay con la inclusión de su máxima figura, Mohamed Salah, pero eso no fue suficiente.

Tras un primer tiempo sin goles y con escasas situaciones de peligro, el marcador empezó a moverse temprano en el complemento. No iban ni dos minutos cuando el capitán de los "Faraones", Ahmed Fathi, introdujo la pelota en su propio arco tras intentar despejar un centro desde la derecha.

Luego, a los 59', el héroe ruso en el estreno ante Arabia Saudita, Denis Cherysev, volvió a demostrar que sigue en forma al finiquitar una buena jugada colectiva de su equipo, poniendo el 2-0 parcial.

El tercer gol, en tanto, llegó por parte de una lucida maniobra personal de Artem Dzyuba apenas tres minutos más tarde, prácticamente definiendo el duelo en favor de los dueños de casa.

Sin embargo, a los 73', y con ayuda del VAR, Salah logró descontar de penal para maquillar un poco el resultado, anotando el primer tanto de Egipto en el Mundial.

Extremos opuestos

Con este resultado, Rusia llegó a seis puntos en el Grupo A con una diferencia de siete goles a favor, con lo que quedó a un paso de asegurar su presencia en octavos de final.

Egipto, en tanto, quedó con cero unidades y a la espera de un milagro para avanzar de fase: necesita derrotar a Arabia Saudita en la tercera jornada y que Uruguay pierda hoy ante el conjunto de Juan Antonio Pizzi y el lunes ante Rusia.

El futbolista Neymar ha encendido ayer las alarmas en el entrenamiento de Brasil en Sochi. La estrella del equipo dirigido por Tite, abandonó el entrenamiento a los 10 minutos de haber comenzado con fuertes dolores en su tobillo derecho, el mismo en el que sufrió un esguince hace casi tres meses.

En pleno calentamiento previo, el jugador del Paris Saint Germain decidió irse del campo de juego. La jugada se produjo después de que el atacante interceptó un pase de Thiago Silva. Tras tapar el balón, comenzó a cojear y de inmediato se llevó la mano al pie derecho.

Neymar había dejado buenas sensaciones en los amistosos que Brasil disputó antes de llegar a Rusia, pero en el estreno contra Suiza fue anulado. El 10 de Brasil fue uno de los jugadores más castigados por los mediocampistas suizos, y pudo hacer poco para que su equipo no empate 1-1 en su debut.

Wl asesor de prensa de la selección brasileña Vinicius Rodrigues, salió a rebajar la alarma sobre Neymar Jr. "Entrenará mañana (hoy) con normalidad. Ha notado molestias en el tobillo derecho, que nada tiene que ver con el pie derecho operado, y los médicos han decidido que siga tratamiento de fisioterapia. Estaba contemplado para hoy (ayer) un entrenamiento regenerativo de los titulares ante Suiza, así que entra todo dentro de lo normal".