Para muchos, fue el gran responsable del triunfo del fin de semana, ya que en la segunda parte del duelo contra La Serena envió a la cancha a Pablo Parra y Leandro Reymúndez y de los pies de ambos salieron los dos goles que finalmente anotó Lucas Simón.

Pero fiel a su estilo, Rodrigo Pérez salió a destacar el trabajo de sus jugadores. "Rescato la actitud, la fortaleza y la disposición para ir a dar vuelta un partido que se nos complicó en el segundo tiempo, cuando el rival creció bastante", relata.

El DT explica esa baja de rendimiento de su equipo en que "caemos inexplicablemente en lagunas que tenemos que solucionar, pero que no sé por qué son. Quizás por la presión, caemos en el miedo escénico y terminamos complicándonos en partidos que tenemos totalmente controlados como éste, que si en el primer tiempo terminaba dos a cero, no le extrañaba a nadie", detalló.

Melipilla

El adiestrador entiende, como todo su plantel, que en calidad de forastero hay una deuda pendiente y que ante Melipilla tienen la opción de revertirla.

"Si queremos ser protagonistas del torneo, tenemos que rescatar puntos afuera. Pero mis jugadores, pese a ese bajón que debemos trabajar, hace rato que vienen entendiendo que no va a ser fácil, que somos Cobreloa y que por eso, tenemos obligación de mostrar más concentración y contundencia en todas las canchas donde jugamos", concluyó.

Nace hacia fines del año 1700, cuando en China, durante el mandato del emperador Gangxi, de la dinastía Qing (1662-1722), los templos de los monjes Shaolín son destruidos debido al "peligro" que representaban.

Desde entonces, y tras la huida hacia distintas latitudes del mundo, los monjes Ng Mui, Jee Sin, Bak Mei, Fung Do-Dak y Miu Hin, esparcieron las semillas de una disciplina de defensa casi olvidada: el Wing Chun, que en chino quiere decir "flor de primavera". Ésta fue transmitida por Ng Mui, quien se refugió en el "Templo de la Grulla Blanca", sobre el monte Tai Liang.

La historia indica que Ng Mui al ver cómo una chica de 15 años llamada Wing Chun, era asediada por un matón local, decide traspasarle sus conocimientos marciales, con los que Wing Chun, posteriormente, retó a su acosador estableciendo que si éste no lograba derrotarla en un intento, no podría obligarla a casarse.

La joven ganó la batalla, y con eso su libertad. Desde entonces, se dedicó a transmitir el arte de defensa que aprendió de su maestra, la monje Ng Mui.

Antofagasta

En la ciudad este estilo de defensa aún no logra su máxima popularidad.

El Wing Chun es una disciplina sin normas ni reglas, ya que en la defensa humana, está permitido todo lo que sea necesario, sin embargo existe una versión normada, que reciben el nombre de Sanda.

Esta versión es la que más se desarrolla en la actualidad e incluso se están organizando certámenes de competición.

Sus fundamentos básicos provienen del Kung fu (boxeo chino), mezclando una gran cantidad de veloces golpes de manos y pies.

Para el maestro de estas disciplinas en Antofagasta, Esteban Robles, el crecimiento que registra el Sanda se asocia directamente con la popularidad alcanzada por las películas de Bruce Lee e Ip-Man.

"El Kung Fu, es la base del Wing Chun. Y eso es muy atractivo para las personas. Todas, o al menos la gran mayoría, está familiarizada con los trabajos de esos grandes artistas marciales, y por eso quieren aprender", manifestó el 1° y 2° Dan.

A la fecha, cerca de 40 estdiantes ya practican esta disciplina y se espera que a futuro más personas se interesen (consultas en Facebook: Boxeo Chino Antofagasta).

alumnos practican Sanda, que es una derivación normada del Wing Chun, nacido hace siglos en China. 40