Dániza Urrutia Sepúlveda
Como parte del Plan de Fortalecimiento del Ministerio Público, el próximo año en Antofagasta hará su estreno el Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos, que buscará hacer un diagnóstico de los delitos y mejorar la persecución penal.
El fiscal regional Alberto Ayala sostiene que se trata de un gran desafío y una transformación al trabajo donde deberá aunarse el esfuerzo de la Fiscalía y las policías, tal como ha ocurrido en otras regiones, donde, por ejemplo, fueron investigados algunos robos en lugar no habitado, y tras seguir el foco investigativo, fue condenado un guardia.
Éste entraba a trabajar en un sitio y a los pocos días ocurría el robo. Así, el trabajo de la unidad logró establecer el patrón común, que en este caso era la presencia del trabajador.
¿En qué consiste el trabajo de esta nueva unidad?
-El Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos nos permitirá tener una mirada diferente en la forma de tramitar los casos. Por ejemplo, se abría una causa para investigar el robo de un vehículo, y se hacía lo mismo, lo que a veces se traducía en que no había resultado porque se analizaba el caso a caso. A partir de la implementación de este sistema podremos establecer cuáles son los focos de delitos, los más importantes.
¿Qué delitos perseguirán?
-Seguramente será el tráfico de armas, drogas o ciertos robos. Habrá una Unidad de Análisis que verá, por ejemplo, 100 causas que están archivadas donde no hicimos nada o muy poco, y que dicen relación con robo de vehículos en el sector centro.
Esa unidad contará con analistas (diversos profesionales) que van a analizar esos partes en busca de elementos comunes, patrones, etc., y con eso establecer si obedece a fenómenos cíclicos o fenómenos de bandas delictivas.
Con esa información vamos a establecer quiénes fueron los responsables o quiénes van a seguir siendo los responsables, es decir, se aplicará una mirada de inteligencia.
¿Cómo ha funcionado este sistema en otras regiones?
-Esas unidades se establecieron en otras ciudades y llevan poco tiempo. Se establecieron tres fases y Antofagasta estaba en la última etapa.
Nosotros entraremos el próximo año. En otras regiones se han logrado algunas cosas, pero por regla general son al menos seis meses o un año de estudio e investigación para después empezar a desarrollar procedimientos.
Ahora estamos llamando a concurso para los fiscales que estarán en esta unidad y para analistas. En el caso de estos últimos, se hizo un concurso a nivel nacional, se tomaron pruebas y 25 personas aprobaron para la región.
Ahora tengo que ver si están en condiciones de cumplir los requisitos que como región queremos. Necesitamos a personas que se queden y no que estén sólo seis meses en la ciudad. Deben tener sentido de pertenencia para dar forma a este proyecto.
¿Cómo será el trabajo de esos fiscales en particular?
-En esa unidad vamos a tener a un fiscal jefe más cuatro fiscales, tres analistas y personal administrativo. La idea no es hacer lo que hemos estado realizando hasta ahora, sino otro trabajo. No es que estemos cubriendo el déficit histórico que traemos, es para otras cosas.
Focos delictivos
¿Entonces van a atacar de lleno los nuevos delitos?
-Queremos atacar los nuevos delitos, estructuración de bandas y focos delictivos a través del análisis criminal. Esta unidad tendrá un jefe que va a depender del fiscal regional, y cuyas instalaciones funcionarán transitoriamente en un edificio de calle Prat.
Estamos pensando en sacar un fiscal de esa unidad y tenerlo permanentemente en Calama, porque estamos a mucha distancia, y se hace necesario estar allá. Los otros dos deberían estar viajando constantemente a Tocopilla y Taltal.
Esto será una realidad el primer semestre del próximo año. El 2 de enero ingresarán los analistas, quienes harán un trabajo de investigación.
En marzo deberían empezar a trabajar los fiscales en base a la información reunida por los analistas. Necesitamos gente comprometida que tenga alta capacidad de análisis. No sólo debe ser litigante, sino tener capacidad de interrelacionar datos y trabajar en equipo con los analistas que le van a proporcionar la materia prima para sus investigaciones.
¿Y cómo se complementará el trabajo con ambas policías?
-Para eso se crearon sistemas computacionales donde uno pone datos y se busca la información, pero no podremos hacer nada si las policías no ponen a disposición grupos especiales de trabajo. En Chile estas unidades especiales se establecen con la Fiscalía, que es la que da confianza que las cosas se pueden hacer bien. Necesitamos que las policías pongan personal especializado en análisis criminal.
Queremos fiscales que tengan una mirada diferente del delito y que la policía también tenga un modo de trabajo diferente al realizado durante los últimos 17 años.
¿Qué espera lograr con esta transformación en la forma de perseguir delitos y delincuentes?
-Esperamos mejorar nuestra persecución penal de algunos hechos puntuales. Pero para eso debemos hacer análisis y enfocar nuestro diagnóstico y posterior trabajo. Queremos, por ejemplo, ver los problemas de microtráfico en determinados sectores, donde la gente se queja que hay venta de drogas. Vamos a fijar un foco en esa población, investigar y después vamos a intervenir ese sector para tranquilidad de los vecinos.
"Con esta unidad queremos atacar nuevos delitos, estructuración de bandas y focos delictivos a través del análisis criminal"."