"La caída de Antofagasta"
René
Cortés
comentarista
deportivo
Con lo justo, pero necesario: el gol, Deportes Temuco derrotó a Club de Deportes Antofagasta. Merecido no lo fue y resultó demasiado para el local. La igualdad pareció el mejor premio, sobre todo por el desempeño de los de Larcamón, especialmente en el primer tiempo. Presencia casi permanente en el campo contrario y cuatro ocasiones de gol desperdiciadas y ningún acercamiento del rival, reflejan que el resultado pudo ser diferente.
La solución a la falta de eficacia para definir no es cuestión de hombres en el CDA. Y no lo es porque tiene muy poco para hacer algo distinto. La mayoría son jóvenes, Flores y Sasmay, esta vez. Los errores que cometen tienen que ver mucho con aquello. Entonces las alternativas suelen no ser las ideales y la responsabilidad recae en otros que tampoco tienen la madurez necesaria. Es el caso de Araos y Carvallo, por ejemplo, llamados a ir más allá que el armado del juego.
Ante Temuco, sobre todo en la primera parte, de nuevo, el tema no fue cuantas veces llegas, sino como llegas y como defines. La propuesta y construcción no merece reparos, pero sí, por lo explicado antes, fallaron Araos, a los 10 y 13, Barrios a los 15, más Flores a los 43. Ahí, en buena medida, se selló el destino de los "rojinegros".
Dalcio Giovagnoli, el técnico de Temuco, es especialmente certero. Sin variar jugadores, ordenó movimientos determinantes en el segundo tiempo. Ajustó las mercas en la zona central. Presionó más arriba. Cerró el camino a la proyección de Barrios y aligeró el juego por las bandas, especialmente atacando a Romo con la presencia de Donoso o bien Harbottle. De esa manera equilibró y consiguió presencia ofensiva, sin ser más eficiente en ese aspecto que el CDA en los primeros 45 minutos.
El árbitro Julio Osorio, "irregular en toda su carrera", pecó una vez en su desempeño en la correcta aplicación del reglamento. No mereció mayor discusión el penal de Rojas a Donoso, pero poco antes falló en la mano de Nicolás Ramírez en su área. No fue un movimiento muy amplio, aunque "no tuvo nada de natural" y debió ser tiro de los doce pasos. Detalle "relevante en el partido", tal como terminó siendo la anotación de Cris Martínez de definió el resultado final. -