Eugenio Sugg Gálvez
Adjudicada quedó esta semana la realización del estudio que evaluará alternativas para una nueva planta de tratamiento de aguas servidas en Antofagasta. Así lo informó ayer el gerente general de Econssa, Patricio Herrera, quien detalló que ese trabajo busca proponer una solución tecnológica acorde a la ciudad, abordando como aspectos esenciales su localización y la futura demanda.
Efectivamente, Econssa -una sociedad anónima de propiedad del Estado de Chile- es la operadora de la planta de pretratamiento y del emisario submarino que deposita las aguas servidas de la ciudad.
La firma -junto a Sembcorp- es sindicada por la autoridad de Salud como una de las empresas responsables de los episodios de emanaciones de gases y olores molestos en el sector centro norte de la ciudad.
"No se ha demostrado que necesariamente la planta de tratamiento sea la causante único de los problemas que se han ocasionado en el Liceo Industrial. El diagnóstico apunta a que hay una situación multivariable en la cual deben participar otros actores", partió aclarando Herrera.
Pese a eso, el ejecutivo aseguró que la firma tiene la convicción que es necesario modernizar el sistema de tratamiento de aguas servidas en la ciudad.
Ubicación
Y es con ese objetivo que el directorio de la compañía adjudicó el miércoles la realización del estudio "Alternativas de tratamiento de aguas servidas para Antofagasta".
Mediante ese contrato, se encargó a la consultora Causse que evalúe tres aspectos básicos: cuál es la demanda de aguas servidas en la ciudad, cuál es el mejor sistema de tratamiento -en términos ambientales- y una vez elegida la tecnología, desarrolle la ingeniería básica para posteriormente avanzar a la tramitación ambiental del proyecto.
"No se trata de producir menos aguas servidas tratadas, sino por el contrario, tratar de generar más de ese recurso, pero en un sistema productivo sustentable y compatible con su ubicación", dijo.
El estudio tiene un plazo de ejecución de seis meses y también definirá -en concordancia con la tecnología elegida- la localización de la nueva planta.
"Una alternativa es impulsar el agua servida hasta el sector más cordillerano y tratarla allá y otra es construir una planta que sea tan moderna que no produzca ningún impacto secundario en el mismo terreno donde está emplazada hoy", detalló Herrera.
La apuesta es que esta nueva planta de tratamiento esté operativa en 2024, cuando finaliza el actual contrato con Sembcorp y absorba la demanda de Antofagasta durante al menos 30 años.
Atrasos
Por ahora Econssa está desarrollando un proyecto denominado "Aumento de la capacidad de manejo de las aguas servidas de Antofagasta", iniciativa para la cual se calculó una inversión de US$14 millones y que está destinada a cubrir el crecimiento de la demanda proyectada para la ciudad.
Sin embargo, su ejecución ha sufrido varios retrasos, los cuales ya fueron causal de una multa de 300 UTA ($168 millones) y de la apertura de un proceso sancionatorio por parte de la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS).
Este último puede terminar en una nueva multa que puede variar entre las 51 y 10.000 UTA, según adelantó la SISS.
Los atrasos -según oficio de la Seremi de Salud- "agrava aún más el problema y no deja alternativas para buscar una solución técnica, que no sea la reparación total de los problemas de ambos sistemas de evacuación de aguas servidas de Antofagasta", en referencia a los episodios de emanaciones.
"Tuvimos problemas en el sistema que se construyó en 2015, básicamente asociados a la calidad del agua que llega a la planta y durante 2016 debimos solucionarlos. Eso atrasó la etapa siguiente, pero pretendemos ponernos al día con las inversiones comprometidas ante la SISS", explicó.
Patricio, Herrera, Gte. general Econssa"
"No se trata de generar menos aguas servidas, sino tratar de generar más de ese recurso, pero en un sistema sustentable"."