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Bolivia justifica militares en la frontera porque es "zona roja" de contrabando

NORTE. El ministro de Justicia de ese país pidió la liberación de los nueve detenidos.
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El Gobierno de Bolivia justificó ayer su decisión de trasladar una fuerza militar de elite a la frontera con Chile, argumentando que en el lugar hay "zonas rojas", donde el contrabando ha creado un problema de seguridad nacional.

"En la frontera de Chile hay un problema de seguridad nacional. Hay zonas rojas donde la fuerzas de la aduana, policiales y de los militares no pueden entrar", dijo el ministro de Defensa, Reymi Ferreira, en una entrevista a la estatal Radio Patria Nueva.

La fuerza de elite destinada originalmente a la frontera era de medio centenar de agentes, pero ahora sólo 15 uniformados se encuentran en la frontera con patrullas móviles, armas de reglamento y material de disuasión lacrimógeno.

La autoridad boliviana aseguró que no se puede "considerar una amenaza" al grupo militar de elite, ya que "no son equipos de artillería, blindados ni de armas medianas siquiera. Por lo tanto es una sobrerreacción la del Gobierno de Chile", en alusión a las críticas que hizo el ministro de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz, quien calificó el movimiento de tropas como "una acción delicada".

Detenidos en chile

En tanto, el ministro de Justicia de Bolivia, Héctor Arce, insistió que la detención de nueve militares y aduaneros en Chile bajo acusaciones de asalto, robo y porte de armas es "ilegal" y que el tema nunca debió haber sido judicializado.

Los nueve bolivianos, dos militares y siete aduaneros, fueron detenidos el pasado 19 de marzo en territorio chileno y acusados de asaltar camiones con el objetivo de llevarlos a su país.

"No existe ninguno de los tres delitos y después del análisis correspondiente, se evidenciará esta situación con una absoluta certeza y claridad matemática", afirmó Arce, desde Iquique, hasta donde llegó el viernes para visitar a los detenidos y asesorarlos.

"Se ha demostrado ante la Fiscalía de Tarapacá que (los presos) habían reportado su actividad en la frontera con Chile a sus superiores (...) Tampoco puede existir el delito de contrabando (...) es un verdadero absurdo", indicó Arce, que el jueves visitó a los detenidos en la cárcel de Alto Hospicio.

"Hacemos un llamado respetuoso a las autoridades chilena a que se vuelva encausar este caso por vía diplomática", agregó el ministro boliviano, que recibió la vida de la Cancillería para viajar.