El exceso de velocidad es el responsable de uno de cada tres accidentes de tránsito en el mundo
El exceso de velocidad es responsable de uno de cada tres accidentes de tránsito, que al igual que la cifra de muertos y heridos podrían reducirse con medidas relativamente simples y ampliamente conocidas, pero que no se aplican en la mayor parte del mundo, según planteó la OMS.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) presentó ayer un informe sobre seguridad vial que subraya que las acciones preventivas están siendo particularmente difíciles de aplicar en los países de ingresos medios y bajos, que concentran el 90% de las víctimas, a pesar de que representan el 54% de vehículos registrados.
Según los datos y estudios analizados por los expertos de la OMS con ocasión de la Semana Mundial de la ONU sobre Seguridad Vial (del 8 al 14 de mayo), entre el 40% y 50% de conductores violan habitualmente los límites de seguridad, con graves consecuencias en la vida de los transeúntes, en especial de los niños, así como de ciclistas y motociclistas.
Cada año, 1,25 millón de personas mueren en las calles, lo que hace que los accidentes de tránsito sean la novena causa mundial de mortalidad en general, pero la primera de personas entre los 15 y 29 años.
Además, 50 millones sufren heridas que no son fatales, pero que pueden causar algún tipo de discapacidad.
Un total de 500 niños mueren a diario en las rutas y miles quedan heridos, según los datos de la OMS, que enfatiza que el limitado desarrollo físico y cognitivo de los menores hace que para ellos los riesgos sean mayores por las dificultades que tienen para interpretar imágenes y sonidos de un peligro inminente.
La velocidad es el riesgo más importante y cuando más alto es el límite más probabilidad hay de un accidente.
"El aumento de 1 kilómetro por hora de velocidad resulta en un aumento del 3% en la incidencia de choques con heridos y del 4% al 5% con muerte", dijo en una rueda de prensa el director del Departamento de Enfermedades No Transmisibles y Discapacidad de la OMS, Etienne Krung.
El especialista indicó que si un automóvil que va a 50 kilómetros por hora atropella a un transeúnte, este tiene un riesgo del 20% de morir, pero si la velocidad es de 80 kilómetros este riesgo sube hasta el 60%. La correlación entre velocidad y accidentes también se explica en la medida en que cuanto más alta es la velocidad mayor es la distancia que se necesita para frenar.