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Dos detenidos al ser sorprendidos sustrayendo agua en terreno fiscal

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Personal de la Brigada de Investigación Criminal Calama de la PDI detuvo a dos personas por el delito flagrante de usurpación de aguas, contemplado en el artículo 459 del Código Penal. En terrenos fiscales la policía divisó a un camión que tenía un contenedor de agua de 1000 litros, que estaba en plena sustracción agua con una motobomba.


En el baño de un bus detectaron 231 unidades de anabólicos inyectables

Un peligroso contrabando de esteroides anabólicos incautó el Servicio Nacional de Aduanas en la Avanzada de Quillagua. Los fármacos estaban ocultos en el baño de un bus y serían comercializados en Tocopilla, Antofagasta y Copiapó. Una revisión al interior de la máquina, permitió detectar una bolsa con 231 unidades de anabólicos inyectables.

Intensificaron los controles para evitar paso de sustancias ilícitas

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Durante este fin de semana y apoyados por el can detector de drogas "Aragon", carabineros del OS-7 Antofagasta, incrementó sus controles vehiculares, tanto en las rutas de esta ciudad puerto, como también en el terminal de buses "Carlos Oviedo Cavada", esto debido al primer fin de semana largo de este año.

Si bien es cierto, este tipo de controles son actividades frecuentes de esta unidad antidrogas, durante fechas especiales, estos servicios son incrementados, ante la eventualidad de que por las rutas de la Segunda Región, se desplacen cargamentos de sustancias ilícitas o "correos humanos".


BH de la PDI y el Sernameg inician campaña para prevenir femicidios

El jefe de la Brigada de Homicidios de la PDI Antofagasta, comisario Herwin Rojas acompañado de la directora regional del Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género, Viviana Ramírez dieron el inicio a la campaña Contra el Femicidio "No esperemos que la evidencia hable".

La instancia que se desarrolló en dependencias del cuartel policial viene a reafirmar el compromiso por parte de la PDI, con una labor educativa a la comunidad, que permita sensibilizar respecto de la importancia que juega cada persona para detener este tipo de delitos, entendiendo que el homicidio es el último de una escalada de violencia, que puede ser prevenida.

ENTREVISTA. Fiscal especializado en delitos violentos

Juan Castro Bekios cuenta su pasión por la investigación de los crímenes

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Dániza Urrutia Sepúlveda

Trabajólico, perfeccionista, estudioso y comprometido ciento por ciento con la justicia, es Juan Castro Bekios, el fiscal que investiga los delitos de alta connotación y violencia en Antofagasta.

Nacido y criado en la capital regional , este sanluisino de 40 años, padre de dos hijas y enamorado esposo, tiene sobre sus hombros la investigación de complicados casos que conmueven a la ciudadanía

Incansable lector y amante de la vida sana, vive y respira porque se haga justicia. Se reconoce como un "servidor público" a quien le faltan horas del día para hacer todo lo que piensa, lo que proyecta.

¿Es cierto que su primera opción no fue estudiar Derecho? ¿Tenía otra pasión?

-La verdad no quería estudiar Derecho, a mí me gustaba la literatura y el cine. Por cosas de la vida tenía que escoger una carrera más tradicional y aquella que se acercaba más a la parte literaria, era precisamente el Derecho.

Desde adolescente que leo bastante y escogí finalmente Derecho, porque me acercaba a la lectura. En el colegio no era un alumno destacado por mis notas, me iba bien, pero no estudiaba.

¿Desde sus tiempos sanluisinos ya se vislumbraba un futuro promisorio?

-Recuerdo que me integraba a cuanta cosa había, en scouts, movimiento CVX, talleres de cine, hacía videos.

Incluso recuerdo haber escrito una obra de teatro para un aniversario del colegio, participaba en los concursos de videos, fui vicepresidente del Centro de Alumnos, cuando Jaime Araya era el presidente. Estaba metido en todo y hacía muchas actividades.

¿Siguió con ese mismo ritmo al ingresar a la universidad?

-Cuando entré a la universidad tomé la decisión de estudiar en serio.

En el colegio tenía la fortaleza de leer, pero en la universidad me empezó a ir bien porque me dediqué sólo a estudiar. Antes pude haber sido un poco desordenado, pero en la universidad fui muy estudioso.

Me empezó a gustar el derecho cuando tuve como profesor a José Luis Guzmán Dálbora, actualmente profesor de la Universidad de Valparaíso. El me escogió como ayudante. Era profesor de Derecho Penal y ahí me encantó el derecho, porque tenía mucha filosofía.

¿Esa experiencia marcó su destino profesional?

-Me titulé relativamente joven y mi primer trabajo fue acá en el área penal. Llegué a la fiscalía como asistente y estuve poco tiempo porque postulé a un cargo de fiscal en Iquique.

El 2003 ya estaba trabajando en investigar delitos violentos, que incluían también delitos sexuales. Luego me fui a Santiago y tomé la especialidad de tráfico de drogas en la Fiscalía Occidente, luego vi los casos de lavado de dinero y crimen organizado.

Luego comencé a investigar en el área anticorrupción.

Trabajólico

Usted es conocido como un fiscal todoterreno. ¿Qué opinión tiene al respecto?

-Tenemos la obligación de dar a conocer lo que se está haciendo, dentro de lo que permite la ley. De alguna manera tenemos que ir dando cuenta al público de lo que hacemos.

No podemos encerrarnos porque somos funcionarios públicos, somos servidores públicos. Siempre he procurado tener contacto con las víctimas, tratar de explicarles lo complejo. Me gusta ser súper transparente, y no generar expectativas que no sean reales.

¿Es verdad que sólo duerme cinco horas? ¿Cómo es su día habitual?

-Mi día comienza a las 6 de la mañana. Voy a dejar a mi hija menor al colegio, y luego a mi esposa a su trabajo, ella es sicóloga. Mi hija mayor estudia Derecho en Santiago. Luego a la oficina como a las 8.15 horas y empiezo a trabajar. No almuerzo, no hago pausa, costumbre que adquirí en Santiago. Suelo hacer un pequeño break para disfrutar de un buen café de grano, y una barra de cereal.

Además hago dos días docencia en la Universidad de Antofagasta, imparto clases de derecho penal. Mi día laboral termina como a las 19.30 horas.

Trato de llegar a mi casa a las 20 horas, pero siempre me llevo trabajo. Jamás me desconecto porque quedan cosas pendientes, especialmente en algunos casos. Duermo sólo cinco horas.

Perfección

¿Se le conoce por ser detallista, incluso perfeccionista?

-Aprovecho de llevarme algún informe para leer, revisar. Si hay algo que preparar y si hay dudas -cuando se acerca un juicio por ejemplo-, me llevo la carpeta para estudiar, repaso y repaso una y mil veces.

Cuando tengo que formalizar alguna investigación también estudio hasta tarde. Reviso todo, y eso soy un poco obsesivo y bastante detallista.

Soy detallista porque me gusta tener claridad sobre los casos. Por lo mismo con las policías son bastante demandante, y les pido muchas cosas.

Si fuera del horario de trabajo es requerida mi presencia, por casos de alta connotación, yo me muevo adonde sea.

Me gusta trabajar junto con las policías. Una cosa es dar instrucciones y otra es estar trabajando con ellos, y eso lo aprendí en las investigaciones que hice por drogas.

¿Y además del trabajo, que otra pasión lo mueve?

-Me gusta leer harto. De hecho, tengo una colección de 2 mil ejemplares de distintas materias. Me gustan las novelas, los escritores rusos y alemanes, y ahora estoy leyendo a algunos escritores nórdicos.

Tengo el mal de Diógenes de los libros. No suelo darme otros gustos, pero los libros son mi debilidad. No soy un sibarita, soy de cosas sencillas. Casi no como carnes rojas, soy casi vegetariano. Además me gusta correr, así me relajo, pienso. En general disfruto de los deportes, andar en bicicleta y poder estar con mi familia.

"Me gusta trabajar junto con las policías. Una cosa es dar instrucciones y otra es estar trabajando con ellos. Eso lo aprendí en las investigaciones por drogas"."