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ENTREVISTA. marcelo castillo, presidente de Escondida:

"El sindicato nos dejó claro que no tiene intención de sentarse a conversar"

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Eugenio Sugg Gálvez

En su punto más lejano desde que comenzara este proceso de negociación colectiva parecen las posiciones entre Minera Escondida y su Sindicato N°1. La quema de la carta-invitación de la empresa marcó un quiebre para el cual -al menos en el corto plazo- no habrá pronta solución.

En este escenario, el presidente de la compañía Marcelo Castillo, apareció en escena para liderar públicamente un cambio en la estrategia de la compañía cuyo foco no estará en seguir invitando al sindicato -aunque aseguran que siguen dispuestos al diálogo-, sino en retomar paulatinamente sus proyectos estratégicos y la producción.

¿Es éste el momento más complejo en lo que va de negociación?

-Hay un quiebre dentro del proceso. Nuestra apertura a negociar que ha estado permanentemente abierta -así como la voluntad de flexibilizar algunos puntos dejando sólo uno pendiente en la última reunión ante la Inspección-, pero la quema de nuestra carta invitación nos deja claro que el sindicato no tiene intención de sentarse a conversar.

¿Qué plazos se están dando para retomar los proyectos y la producción?

-Hoy (ayer) intentamos ingresar a Coloso, pero no fue posible. Lo vamos a seguir intentando todos los días y posteriormente en faenas. Tenemos previsto comenzar con los proyectos como la planta desaladora, luego buscaremos realizar mantenciones a equipos y luego la producción. En la medida que no podamos acceder a las áreas operativas, la suspensión parcial de actividades es un escenario factible.

¿Qué aspectos pueden cambiar para que los trabajadores en huelga les permitan entrar?

-Estamos buscando todas las alternativas legales que nos permitan ejercer el estado de derecho y entrar a nuestra casa, aunque el tema legal es lento. Seguiremos solicitando el apoyo de Carabineros e intentaremos seguir dialogando y eso nos podría permitir retomar actividades que están fuera del contexto de la huelga.

¿Esperan una postura más activa de las autoridades en materia de resguardar el estado de derecho?

-Siempre. Esperamos tener el apoyo para resguardar nuestro derecho de trabajar, nos mantenemos esperanzados de recibir ese soporte.

¿Hay posibilidad de mejorar algunas propuestas?

-Esto se soluciona conversando. Cuando entregamos la última carta estábamos convencidos de que dábamos un paso importante. Hoy cuesta entender la lógica de seguir alargando esta huelga.

Cuatro escenarios clave en la prolongada huelga en Escondida

MINERÍA. Compañía mantendrá decisión de retomar sus proyectos y producción. Desde sindicato acusan "amedrentamiento".
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Eugenio Sugg Gálvez

La huelga del Sindicato N°1 de Trabajadores de Minera Escondida cumple hoy 36 días y lejos de haber indicios de acercamiento, las posiciones parecen más lejanas que al comienzo del proceso.

La quema de la carta extendida por la minera marcó un giro en el proceso que distanció aún más a las partes.

Mientras la compañía anunció que cambiaría el foco de su planificación hacia retomar sus proyectos estratégicos en construcción, realizar mantenciones a equipos críticos e intentar reactivar paulatinamente la producción -sin descartar el cierre de faenas si no lo consiguen-, en la organización sindical calificaron estos anuncios como "amedrentamientos". Adelantaron en una carta pública que "seguramente en estos días veremos más acciones desesperadas de la empresa".

A continuación algunos de los escenarios que pueden marcar el desenlace de esta compleja negociación.

Cierre temporal de operaciones

Aunque en un comienzo Escondida aseguró que -de seguir las actuales condiciones- evaluaría la alternativa del lock out, lo cierto es que los plazos para activar esa petición a la autoridad ya habrían expirado. El director regional del Trabajo, Rubén Gajardo, declinó referirse al tema, asegurando que cualquier pronunciamiento sobre un tema donde hay distintas interpretaciones puede malentenderse. Sin embargo, desde la minera explicaron que un eventual cierre temporal de operaciones, no sería activado como lock out, sino como una determinación de hecho, lo que les obligaría a seguir pagando sueldos sólo al personal que no está en huelga.

Huelga prolongada Apoyo de la fuerza pública Renovar el contrato anterior

Clave en este proceso será la capacidad que tenga el sindicato para aguantar una huelga que ya se prolonga por 36 días. Si bien la organización viene preparándose desde hace mucho tiempo, lo cierto es que la situación de los trabajadores se irá complicando cada vez más debido a que no perciben sueldo, el bono de producción correspondiente a enero -cuando ya trabajaron más lento- será ínfimo y para el bono Fiscal Year seguramente no cumplirán metas, lo mismo ocurrirá con otras remuneraciones variables asociadas a esos cumplimientos, y los bonos de producción mensuales para los meses siguientes -donde estarán en puesta en marcha- también se verán mermados.

El Artículo 369 del Código del Trabajo da la posibilidad al sindicato -durante todo el periodo que dure la huelga- de acogerse a las estipulaciones contenidas en el contrato colectivo vigente al momento que se presentó el proyecto. Instrumento que puede tener una duración máxima de 18 meses y que excluye todas aquellas estipulaciones relativas a reajustabilidad, tanto de remuneraciones como de otros beneficios pactados en dinero. Esa es una posibilidad que el sindicato ya adelantó que estudiará a partir del día 45 de huelga, pero que los dejaría -por ejemplo- sin el reajuste (según IPC) propuesto por la empresa en su última propuesta.

Una eventual participación de la fuerza pública aparece como la única opción real para que la compañía acceda a sus centros de trabajo debido a los bloqueos que mantienen los huelguistas tanto en faena como en Puerto Coloso. En rigor, la minera viene pidiendo el apoyo de Carabineros desde que comenzó la huelga, sin resultados positivos para sus intereses. La posición de la autoridades de gobierno es intervenir lo menos posible en el conflicto y la intervención de la fuerza pública -como ya se vio en el bloqueo de la Ruta 5- puede generar enfrentamientos que terminen con heridos o algún trabajador muerto, como ya ocurrió en El Salvador.

36 días cumple hoy la huelga del Sindicato N°1 de Trabajadores de Minera Escondida, la más larga y costosa en la historia de la principal minera privada del país.

2.500 trabajadores están asociados al sindicato en conflicto, lo que representa cerca del 97% del total de operadores y mantenedores de la minera.

105.500 toneladas de cobre ha dejado de producir -aproximadamente- Minera Escondida durante los 36 días que ya cuenta la huelga en sus operaciones.