Redacción
A trece años de presidio efectivo por el delito de homicidio simple, más 90 días de cárcel por hurto, fue sentenciado Pablo Creuz Arcos (21), quien fue encontrado culpable de ambos delitos por el Tribunal Oral de Antofagasta, luego que en agosto de 2015 diera muerte a Desiderio Guíñez Fierro de 24 años.
El dictamen fue dado a conocer ayer, luego de una semana de impactantes relatos de testigos y peritos que concurrieron al sitio del suceso, una pensión ubicada en la calle Leonardo Da Vinci, en la Villa México.
El tribunal estableció que la madrugada del 7 de agosto de 2015, el acusado aceptó la invitación de la víctima (para compartir unos tragos), al interior de la pieza de éste, toda vez que pretendía que olvidaran un altercado anterior, invitación que aquél aceptó con la única intención de simular que ingería alcohol hasta que el afectado se encontrara en estado de ebriedad.
Aprovechando la reducida capacidad de defensa de Desiderio Guíñez (se acreditó que tenía 2,9 gramos de alcohol en la sangre), comenzó a propinarle múltiples golpes principalmente en la cabeza, como también, en diferentes partes del cuerpo con un elemento contundente, específicamente con un fierro de forma tubular.
Seguidamente lo redujo con uno de sus brazos tomándolo del cuello por la espalda comenzando a asfixiarlo. Comenzó a estrangularlo con un cable que le puso alrededor del cuello, luego de lo cual, encontrándose aún con vida el ofendido, le extrajo además el globo ocular derecho.
Durante el juicio fue fundamental el testimonio de los oficiales de la Brigada de Homicidios de la PDI Antofagasta, que echaron por tierra el testimonio del acusado, que dio una versión alternativa, precisamente que lo ocurrido fue en "defensa propia".
Como explicaron los peritos en el juicio, este es uno de los homicidios más violentos del último tiempo en la ciudad, ya que el autor utilizó cuatro mecanismos distintos para atacar a la víctima.
Luego de cometer, Pablo Creuz tomó algunas especies, propiedad de la víctima, y salió del inmueble.
Animita
Posteriormente llamó a su madre y le dijo lo que había ocurrido. Una vez fuera de la casa concurrió hasta la animita de Juanita Guajardo (costanera) donde estuvo algún tiempo.
Después se trasladó hasta el terminal de buses donde intentó abordar una máquina hacia Santiago, cuando fue detenido por carabineros.
días por hurto deberá cumplir el acusado que está en el Centro de Cumplimimiento Penitenciario. 90