Cosmovisión andina
El fruto muere, deja de ser fruto para entregar la semilla a la tierra. La semilla se expande, busca su espacio, revienta, deja de ser semilla para que surja un nuevo vegetal. Así es la vida. Desarrollarse, crecer, transformarse, ser otros a partir de lo que éramos, sin dejar de estar unidos a lo que fuimos.
La sociedad y la cultura andinas de la Región de Antofagasta es la consecuencia de una evolución e influencias milenarias; de invasiones indígenas, europeas y de estados nacionales; presiones económicas, ambientales, sociales, ideológicas y de todo tipo recibidas en sus miles de años de existencia.
Debemos tener presente la complejidad de la ocupación del territorio andino, donde conviven, lican antai, quechuas y aymaras, así como mestizos y miembros de otras sociedades, que vivieron y viven allí. Todo ello, con una concepción del espacio-tiempo integrada; una visión global y sistémica; dio origen a la sociedad y cultura actuales que también son diversas.
El medio ambiente andino ocupa un rol fundamental en la organización del espacio en la cosmovisión andina (lican antai, quechua y aymara). En la visión sociocultural andina, el espacio posee una importante organización, tanto vertical como horizontal. Se habla de la verticalidad del mundo natural andino y sus distintos "pisos (espacios) ecológicos" los cuales, aunque con distintas características específicas, necesariamente integran un mundo global, un sistema económico integral, total; en las sociedades actuales se incorporan incluso las ciudades y las actividades mineras ubicadas en áreas más bajas. La dimensión horizontal está marcada por el poblado, el valle, la quebrada o las vegas donde se encuentra normalmente la mayor parte de la población, la mayor parte del tiempo.
Entre carnaval y noche buena, desde los dioses de las cumbres a los dioses de la profundidad de la tierra. Los seres vivos y también los inanimados, somos parte de este mundo. Todos tenemos una función que cumplir.
Domingo Gómez Parra