Migración: mitos y realidades
La Provincia de Antofagasta se gestó sobre la base de la migración. Son muchas las historias de nuestros abuelos que reseñaban los dolores al momento de partir desde sus tierras, las esperanzas al llegar y el esfuerzo por intentar surgir.
El mestizaje y sincretismo cultural de nuestra zona han sido parte de nuestro sello como región. Sin embargo, hoy existe un aprovechamiento del fenómeno social que nutrió nuestra tierra, siendo necesario deslindar mitos y realidades:
Mito: los extranjeros roban los puestos de trabajo a los chilenos. A los extranjeros les fascina que les regalen todo porque son flojos. Falso: demás de ser ilógico que al quitar puestos de trabajo sean paralelamente holgazanes, la experiencia y los estudios nos indican que los migrantes superan en promedio los años de escolaridad de los chilenos en 2 años. El 26,4% tiene estudios técnicos y superiores, el 12% son profesionales, científicos e intelectuales y cerca del 50% de ellos teniendo una calificación profesional o técnica sobresaliente se desempeñan en áreas de servicios como el comercio.
Mito: a los extranjeros se les paga un bono por venir a Chile. Falso: este proceso migratorio no ha sido propiciado con ofertones de ninguna clase. No es la migración intencionada en el sur de Chile de fines del siglo XIX donde se entregaron tierras a europeos para la colonización. Ha sido nuestra estabilidad política y social lo que motiva que muchos hermanos latinoamericanos busquen vivir tranquilos en nuestra tierra.
Mito: a los extranjeros se les regalan las casas. Falso: es sin lugar a dudas el mito más infundado. Hasta el año 2016 para que un migrante pudiera acceder a un subsidio de vivienda era necesario tener su residencia definitiva. De hecho, un migrante siendo ciudadano podía estar fácilmente sin poder postular al subsidio habitacional durante 7 años.
Mito: sólo a los chilenos se les desaloja. Falso: el Gobierno Regional tiene un Plan de Superación de Campamentos. Este año hemos evitado el levantamiento de 13 nuevas tomas, en las que estaban involucrados ciudadanos chilenos y extranjeros.
Mito: los extranjeros no pagan salud. Falso: hasta el año 2014 y durante nuestro Gobierno, la primera medida de trabajo provincial fue precisamente ésta. Ocurría que extranjeros regulares trabajando y cotizando su 7% de salud, no podían obtener bonos ni programas de ninguna clase hasta que no tuvieran su carnet de identidad en las manos. Así, personas que pagaban por su salud no podían acceder a ella, debiendo endeudarse para el pago particular o evadiendo el cumplimiento de los pagarés. Esta situación se revirtió el mismo año 2014: Hoy todos los migrantes cotizantes pagan por su prestación.
Mito: los extranjeros son quienes forman la mayor cantidad de bandas criminales. Falso: de todos los detenidos por delitos en Chile, sólo el 2,1% corresponde a extranjeros.
Mito: no hay filtro en la frontera. Falso: la PDI conforme a su Ley Orgánica tiene entre sus misiones específicas, la de controlar el ingreso, egreso y reingreso de personas del territorio nacional y la fiscalización de la permanencia de extranjeros en el país, función que se encuentra centrada en esta Jefatura Nacional de Extranjería y Policía Internacional.
Invitamos a no difundir información injustificada. Hoy al hablar de migración se desatan una serie de asertos teñidos más por la emoción que por la razón formados por consideraciones discriminatorias arbitrarias, no repliquemos.
Gobernadora
de Antofagasta
Fabiola
Riveros,