El último y desafinado tango de Bertolucci
El director italiano ha tenido que aclarar una controversia que data de 1972, cuando junto a Marlon Brando engañaron a la actriz María Schneider para lograr una de las escenas más polémicas de la época.
Jeanne (Maria Schneider) y Paul (Marlon Brando) tienen sexo en un departamento vacío.
bernardo bertolucci.
en resumen
"El último Tango en París" es una película dirigida por Bertolucci y censurada en varios países cuando se estrenó en el año 1972. Una de las escenas hasta hoy genera polémica.
Por Andrés Nazarala R
Las polémicas se reciclan y reflotan para hacer ruido en nuevos contextos. Cuando en el año 2001, la actriz María Schneider acusó al director Bernardo Bertolucci y a Marlon Brando por haberla hecho sentir "violada y humillada" en el rodaje de "El último tango en París", la controversia no estalló de la misma manera en que lo ha hecho por estos días.
Sin Schneider -quien murió hace 5 años-, el cineasta italiano debe cargar ahora con el peso de los ataques luego de que el caso volviera a la luz pública.
"Lo que están viendo es una mujer de 19 años violada por un hombre de 48. El director planeó su ataque. Me siento enferma", tuiteó la actriz Jessica Chastain. "Nunca más volveré a mirar esa película. Siento rabia", la siguió en las redes sociales su colega Anna Kendrick.
Bertolucci tuvo que salir a asegurar que Schneider nunca fue violada y que su culpa fue haber omitido el detalle de la mantequilla -clave en una escena de dominación sexual que justificó su censura en Chile- para lograr un momento verosímil dentro del artificio cinematográfico.
"Algunos han creído que no estaba informada de la violencia contra ella. Falso. María sabía todo porque había leído el guión, donde todo estaba descrito", señaló el realizador. "Lo único nuevo con respecto al guión fue la idea de la mantequilla. Eso fue, según supe muchos años después, lo que ofendió a María. No la violencia que sufrió en la escena y que estaba prevista en el filme. Consuela y a la vez aflige que haya gente aún tan 'naif' que cree que lo que ve en el cine ocurra en la realidad. No saben que en el cine el sexo es (casi) siempre una ficción y probablemente creen que cada vez que John Wayne dispara a su enemigo, cae muerto de verdad".
Más allá del cuestionable método de Bertolucci y Brando para alcanzar cierta "verdad", Schneider se volvió drogadicta tras su participación en la cinta y, según ella, quedó encasillada a personajes perturbados.
Pero su carrera tendría otros hitos gloriosos. Protagonizó "Profesión: Reportero", de Michelangelo Antonioni, junto a Jack Nicholson. Fue dirigida por el gran René Clément en "La baby sittter" y por Philippe Garrel en "Viaje al jardín de los muertos". Trabajó, además, bajo las órdenes de otros directores legendarios como Jacques Rivette ("Merry-Go-Round"), Marco Belocchio ("La condanna") y Franco Zeffirelli ("Jane Eyre").
En la memoria quedó, sin embargo, una película que probablemente ha recibido más méritos de los que merece. Un melodrama exageradamente sombrío que también ha opacado la carrera de Bertolucci, responsable de películas superiores como "Antes de la revolución" o "El conformista".
imagen pelicula