Políticos venezolanos se contradicen respecto a proceso de diálogo
CRISIS. La oposición y el chavismo señalan que no hay posiciones claras.
Las conversaciones entre la oposición y el Gobierno venezolano, motivadas por la crisis que enfrenta el país, fueron blanco de críticas de parte de ambos sectores, al no presentarse los detractores de Nicolás Maduro a la reunión planificada con el oficialismo el miércoles.
Ante ello, el presidente de la Asamblea Nacional (Parlamento), el opositor Henry Ramos, se justificó señalando que el diálogo "está absolutamente muerto" y que no tiene ningún sentido continuar en él porque "ha fracasado como instancia".
"La credibilidad de la oposición se vería muy comprometida si siguiéramos en ese jueguito de hablar, prometer, de me paro, no me paro cuando no hay resultados, eso no tiene sentido", dijo el parlamentario a Globovisión.
Ahí, Ramos reiteró que la participación de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en el diálogo es un "acto de albedrío" de las partes, por lo que nadie los "obliga" a permanecer en él. "No se logró nada, cada uno que retome sus agendas", agregó.
El jefe del Parlamento venezolano explicó que para comenzar el diálogo el Gobierno exigió dar "señales" "de parte y parte".
Entre estas señales, Ramos recordó que la Cámara retiró a los diputados opositores de Amazonas -acusados por el Gobierno de cometer fraude para ganar las elecciones- y también difirió la "declaratoria de responsabilidad política" en la crisis que atraviesa el país del presidente, Nicolás Maduro.
Chavismo
El jefe de la delegación del Gobierno venezolano para el diálogo con la oposición, el chavista Jorge Rodríguez, aseguró que "la mesa está instalada y funcionando, lo que pasa es que les cuesta (a la oposición) decírselo a aquellos que bastante plata les han entregado, o como siempre, juegan al policía bueno y el policía malo".
El miércoles, el enviado del Vaticano, el secretario general de Unasur, y los exPresidentes mediadores entregaron a las partes una serie de propuestas para iniciar una etapa de revisión del diálogo.