Antonella Casali Allende
Con tan sólo 22 años, el estudiante de Filosofía y Teología de la Universidad Católica del Norte (UCN), Ignacio Pozo Piña, es el concejal más joven del país.
Pozo, candidato por el pacto 'Por la Fuerza del Futuro', obtuvo un total de 1.136 votos, que le permitirán, a partir del próximo 6 de diciembre, ocupar uno de los diez puestos que tiene el Concejo Municipal de Antofagasta.
Este antofagastino proveniente de una familia cercana a la política. Siempre se interesó por seguir los pasos de su abuelo, Carlos Piña, militante del Partido Radical, por quien tenía una gran admiración e influyó que a los 17 años se inscribiera en el mismo partido.
Si bien su activa participación en el partido, una labor social como dirigente en la población Lautaro, además de ser el asesor de los bailes religiosos de la comuna, jamás pensó que sería electo para el cargo de concejal.
Triunfo
¿Cómo fue enterarse de la victoria en las urnas?
-Fue una situación que no la podía creer. Fue un proceso largo, donde costó, pero se dio la pelea y por fin conseguirlo me llena de alegría. Demuestra que los jóvenes podemos lograr un cambio positivo. Quiero que, a través de la oportunidad que me dieron a mí, se comience a gestar un cambio.
¿Qué piensa tu familia y conocidos de tu desafío en el municipio?
-Frente a este triunfo he recibido bastante apoyo y eso me tiene contento. A mi partido que me apoyó y a las autoridades que han llamado para felicitarme como la diputada Marcela Hernando para felicitarme, la excandidata Andrea Merino, el diputado Marcos Espinosa, y ayer me contacté con el senador Alejandro Guillier y me comentó que, según los padrones electorales, soy el concejal electo más joven de Chile.
¿Qué significa asumir como concejal con tan sólo 22 años?
-Si bien soy joven también tiene un punto a favor: tengo una perspectiva diferente de las cosas y voy con mucha motivación de transformar la política y acercarla mucho más a la comunidad.
¿Cuál crees que fue la clave para ganar un cupo en el gobierno municipal?
-Creo que es en parte del trabajo que realicé cuando aún era un adolescente. Eso genera cercanía de la comunidad, creen en mis proyectos y también en mis capacidades porque es parte de lo que he demostrado con el tiempo.
A los 16 años fui dirigente de la población Lautaro y a los 19 años me hice cargo de los bailes religiosos en la comuna, esto igual generó una mayor cercanía con la gente. Vieron que era un personaje que podían apoyar.
Carrera
¿Cómo fue ser dirigente de tu población?
-Bueno, me transformé en dirigente por los constantes problemas que hemos tenido como población. La inquietud partió por mí y mis vecinos, quienes quisimos comenzar a generar soluciones frente a las demandas sociales que hacían falta. Si bien, actualmente no soy dirigente, sigo al tanto de la causa.
¿Cómo pasaste de tu gestión como dirigente a formar parte del comité organizador de bailes religiosos?
-Fue un trabajo que comencé a realizar de forma paralela.Siempre he realizado laborales con la iglesia. Antiguamente realizaba catequesis, pero nació la iniciativa de ayudar mucho más. Así que fui a una entrevista con el obispo y le dije que tenía un gran interés por hacerme cargo de los bailes religiosos. Es así como dos semanas más tarde me confirmó como asesor de los bailes religiosos y que trabajaría en la sede central. La verdad es que tenía mucha iniciativa, pero con 19 años no tenía idea de bailes, había estado participando con la iglesia. Era un nuevo mundo para mí.
¿Cuánto tiempo llevas como asesor?
-Cumpliré casi cinco años en los bailes, pero ya el próximo me retiro porque vence el decreto (designación). Me siento muy agradecido de todo lo que aprendí y si existiera la posibilidad de repetir la experiencia, sin dudas que aceptaría nuevamente el desafío.
Política
A los 17 años te inscribiste en el Partido Radical, ¿cómo fue que tu labor social te llevó a ser un nuevo concejal por la comuna?
-Jamás lo esperé. Recuerdo que estaba ensayando uno de los bailes, cuando me comentaron que mi nombre estaba sonando fuerte dentro del partido, para postularme. Inesperadamente recibí una llamada de la diputada Marcela Hernando -con quien habían estado trabajado anteriormente- y me motivó y entregó todo su apoyo. Sin ella yo no hubiera tomado la decisión final.
El domingo me llamó para felicitarme y me dijo algo: 'cuando tu asumas tu cargo como concejal, voy a entrar a la municipalidad después de cuatros años sólo por ti'.
Desafíos
¿Cuáles son las ventajas y desventajas de tu nuevo cargo?
-A veces pienso que mi edad, puede jugarme en contra porque pueden existir críticas o dudas, pero más allá de eso no dudo de mis capacidades.
¿Cuál es el mayor desafío al que te enfrentas?
-Pretendo generar cambios positivos en la ciudad, motivar a los jóvenes que participen de la política comunal. Buscaré que a través de mí, la juventud se vuelva a encantar con la política y ese será uno de mis desafíos.
"Si bien soy joven también tiene un punto a favor: tengo una perspectiva diferente de las cosas y voy con mucha motivación de transformar la política y acercarla mucho más a la comunidad". "A los 16 años fui dirigente de la población Lautaro y a los 19 años me hice cargo de los bailes religiosos en la comuna. Esto igual generó una mayor cercanía con la gente"."