José Luis Ramírez M.
Unos 11 mil metros lineales de aceras y calzadas comprende el área que Antofagasta Terminal Internacional (ATI) deberá limpiar, de mantenerse a firme la resolución ambiental que le asignó responsabilidad por la presencia de metales pesados en el área urbana cercana al Puerto.
La medida correctiva fue impuesta por la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) en agosto del año pasado, pero recién esta semana fue confirmada por el Tribunal Ambiental de Santiago, junto a una multa de $837 millones por distintos incumplimientos detectados el año 2015.
ATI puede recurrir de casación ante la Corte Suprema, sin embargo, desde la compañía aún no se confirma ninguna nueva acción judicial.
Cuadrantes
Según establece la resolución ratificada por el Tribunal Ambiental, ATI debe limpiar el área urbana donde fueron halladas las mayores concentraciones de plomo, zinc, cobre y arsénico, todos "contaminantes asociados a la actividad de la empresa".
La resolución acompaña un mapa donde se muestran los principales depósitos de metales pesados, y explica que las tareas de descontaminación deberán abarcar "manzanas completas", pero sólo a nivel de aceras y calzadas.
En total son 15 los cuadrantes afectados por esta disposición, desde Sucre, por el norte, a calle Hugo Silva, por el sur (ver infografía).
Un cálculo hecho por la SMA indica que los cuadrantes donde se detectó contaminación suman una superficie de 28,6 hectáreas, lo que a su vez representa 11 mil metros lineales de veredas y calzadas, aproximadamente.
Como se explicó, son estos últimos espacios los que deberán ser intervenidos por la concesionaria del Frente N° 2, de no haber cambios en lo ya resuelto por la institucionalidad ambiental.
Trabajos
El jefe regional de la SMA, Ricardo Ortiz, comentó que la orden de limpieza busca eliminar la contaminación que existe en el área urbana adyacente al Puerto de Antofagasta, la que de acuerdo a la investigación realizada, es atribuible a dos de las infracciones detectadas en fiscalizaciones a la compañía.
"Esta es una medida muy potente, porque va en directo beneficio de la gente, a diferencia de las multas, que se van a tesorería fiscal", afirmó.
Respecto al procedimiento, la resolución confirmada establece que en los trabajos de descontaminación se podrán emplear máquinas barredoras y aspiradoras viales.
Para aquellos sectores donde tales equipos no puedan usarse, explica que se deberá recurrir a "limpieza manual" con elementos de aseo casero.
Todas estas labores tienen que desarrollarse en horarios de bajo tráfico y con mínima presencia de vehículos estacionados, a objeto de garantizar la efectividad de la solución.
Ricardo Ortiz explicó que estas acciones deben efectuarse de acuerdo un plan que previamente debe ser aprobado por la autoridad sanitaria.
"Ellos tendrán 30 días para presentar un programa con las medidas", afirmó.
Costos
La acción correctiva impuesta por la superintendencia será sin dudas de alto costo.
Un buen parámetro de comparación son las cotizaciones que distintas empresas presentaron al Gobierno Regional durante una primera campaña de limpieza de metales pesados realizada en 2015 en cuatro planteles educativos.
De acuerdo con las estimaciones hechas en ese momento por las empresas interesadas, aspirar, recoger, encapsular y disponer en un vertedero autorizado los contaminantes tiene un costo de entre 15 y 30 mil pesos por metro cuadrado.
La seremi de Salud, Lila Vergara, reparó en la delicadeza de este tipo de trabajos, que deben realizarse conforme a los manuales y guías de la Asociación de Protección Ambiental de Estados Unidos.
Agregó que para la autoridad sanitaria es deber fiscalizar todo lo relacionado con la salud ocupacional de los trabajadores que hagan la limpieza, así como también que los desechos sean adecuadamente tratados y depositados en vertederos autorizados.
Lila Vergara afirmó que desde el punto de vista sanitario, es clave eliminar los focos de contaminación detectados en el área cercana al puerto.
"En este polvo sedimentable hemos constatado que efectivamente existen metales pesados, por tanto, liberar los espacios públicos reducirá de manera importante los riesgos para la población", apuntó.
Vergara agregó que la limpieza y los sistemas de monitoreo instalados a través de la Seremi del Medio Ambiente, contribuirán a la solución de un problema sanitario "muy relevante para Antofagasta".
Hay que precisar que fiscalizaciones realizadas por la Superintendencia de Medio Ambiente no han detectado nuevas deficiencias en las instalaciones de ATI.
Desde la empresa además manifestaron que las observaciones realizadas por la SMA fueron superadas hace un año y que sus actividades cumplen los estándares establecidos.
personas son residentes permanentes de los 15 cuadrantes afectados, según datos de Censo 2002. 1.375
