Francisco Ovando apaga la luz en una ficción
Un escenario desértico sin suministro eléctrico es el que crea el joven novelista chileno en "Acerca de Suárez", libro objeto exquisitamente diseñado, el segundo de Ovando.
La carencia de servicios básicos es la hendidura que abre temas como el conocimiento, la acumulación de objetos dependientes de un recurso que no controlamos y la salud pública. La historia se va revelando por capas en "Acerca de Suárez", manteniendo la ambigüedad en los personajes y los valores que detentan: el contagio de la peste determina el aislamiento de una menor, una protesta de los enfermos se manifiesta enviando los cadáveres a la vista del resto de la población. En tiempos en que la experiencia parece fundamental, Ovando decide inventar una narración y tonos que bajo ningún punto de vista podrían provenir de su vida.
El objeto físico tiene calidad de arte, marca de trabajo de la editorial Libros del Pez Espiral, refinado expositor de la camada de nuevas editoriales chilenas. Las letras cobrizas de su interior se vinculan a materiales fundamentales de la ficción.
-Tu anterior novela, "Casa Volada", fue creada como tesis. ¿Crees que "Acerca de Suárez" se podría entender cómo tu primer libro?
-Es cierto que se creó en un espacio "de laboratorio", pero también, si se piensan las reglas y pies forzados que siguió en algún momento, también se hizo como un juego. Eso no la hace menos o más libro. Muy por el contrario, si tuviera que hacer otra tesis, una investigación propiamente tal, esa sería mi primera tesis. Que "Casa volada" haya tenido su vida propia fuera de los círculos académicos habla bien de su naturaleza de libro más que de tesis. Es una infiltrada, sí, de alguna forma.
-El libro cuenta con un cuidado diseño, donde se mezcla fondo y forma. ¿Fuiste parte de ese proceso o la editorial se hizo cargo exclusivamente de ello?
-En Pez Espiral es el artista Daniel Madrid quien hace una lectura física del texto: lee e imagina, acuerpa una visión. Y luego eso se discute, se conversa. Ahora, yo siempre había querido trabajar con él un texto, entonces operamos con mucha confianza mutua. Él fue radical en su propuesta de diseño y yo no podría estar más feliz con el resultado.
-¿Qué posibilidades da el lenguaje literario en "Acerca de Suárez" frente a otros que trabajan la distopía?
-Creo que tiene que ver con los materiales de la indeterminación. Lo difícil de esto es que de todas maneras a mí me gusta aspirar a cierta especificidad, a hacer brotar algo de los detalles, digamos, aprovechar la particularidad de los lugares. Si mi lugar no es ningún lugar entonces debo volver con insistencia a estos "materiales indeterminados", abordarlos desde el lenguaje literario.
-La peste genera la paranoia, y tal como la falta de electricidad o agua remiten a un pasado no tan lejano. ¿Por qué te interesó la enfermedad como eje de la novela?
-La enfermedad, la peste o pandemia hablan más bien del presente. La falta de agua o de electricidad, aunque fantasmas que pululan las preocupaciones contemporáneas, se ven o viven como algo más bien lejano. Por el contrario, como sociedad, estamos constantemente asediados por la idea de la enfermedad, por la idea de alcanzar un cuerpo sano. Está ahí en la publicidad -hagan el ejercicio, vean cuántos réclames apuntan al cuerpo sano como consumidor-, en las noticias. Está en el virus Zika, en la gripe AH1N1, en la constante idea que será una enfermedad la que haga caer el orden mundial. Está también en lo que no vemos, en la pandemia del VIH que se expande hoy en día entre los jóvenes de Chile, por falta de educación y por leyes inútiles con respecto al test. En la novela está como una forma de poner en aprietos, como le gustaba a Vonnegut, a los personajes, y si la elegí es porque me parece una de las más cercanas que tenemos, una con la que todos nos podemos identificar.
-Ante los puntos de vista que se superponen y la ignorancia sobre ciertos acontecimientos, podemos pensar en la información y la falta de ella como recurso social y literario. ¿Hay alguna metáfora en ello?
-Creo que no es ninguna revelación que mantener a la gente desinformada es una forma de control social, y esto se vuelve particularmente complejo en los tiempos modernos, en los que la equivocación se vuelve fácil por el exceso de información. ¿Has pensado en lo que le sucede a un hipocondriaco cuando busca sus síntomas por Internet? ¿En Yahoo respuestas? En alguna escala eso está pasando en muchos frentes hoy en día. En la novela falta cierta información y en nuestra vida muchas veces hay un exceso de ésta. A nadie se le enseña cómo lidiar con esos datos, cuales elegir y cuáles desechar, y eso termina siendo más o menos lo mismo que no tener ninguna información.
-Antes de tu viaje estabas editando libros en la editorial independiente Cuneta, en los que destacaban nuevos autores (Pablo D. Scheng, Alberto Cardani y Bruno Lloret) que trataban temas casi inexplorados para la literatura chilena. En ello siempre hay algo de curatoría, ¿qué buscabas en las nuevas escrituras?
-En la primera recepción de manuscritos llegaron cerca de cien propuestas de autores inéditos, que era la consigna de la colección Almácigo. Para mí la respuesta estuvo en la idea de un riesgo, de una propuesta. Me parecía importante consignarnos como un espacio de exploración, de escrituras que asumieran búsquedas sin miedo a los fracasos. Es una cosa muy desoladora ser escritor y que nadie quiera arriesgarse contigo, así que la primera vara de medición era esa: que alguien pusiera su texto en la frontera sin tapujos. Ya sea por temática o por estilo, me gusta pensar que cualquiera de los textos que alcancé a editar viene a proponer algo fresco a la discusión literaria.
Francisco ovando será uno de los chilenos en la próxima feria del libro de guadalajara.
"Acerca de Suárez"
Francisco Ovando
Editorial Libros
del Pez Espiral 64 páginas
$7.000
Por Cristóbal Gaete
Francisco Ovando (1989), que antes había publicado "Casa volada", resultado de su tesis de Licenciado en Literatura y ganadora de los premios "Roberto Bolaño" y "José Nuez Martín", cambia la metaficción para crear una distopía cercana en su tiempo y escenario, por ende posible. Ese giro no es el único: el autor acaba de comenzar el Máster en Escritura Creativa en Nueva York y será uno de los representantes de la literatura joven chilena en la próxima Feria Internacional del Libro de Guadalajara.
lara alonso