Inmigrantes tienen dudas tras histórico acuerdo en Colombia
DESCONFIANZA. Refugiados en Antofagasta critican algunos de los términos del armisticio.
Arreglando vehículos en un campamento del sector norte de Antofagasta se encuentra Jesús Cárdenas, inmigrante colombiano que llegó hace seis meses a la ciudad, escapando de la violencia armada de su país.
Cárdenas, quien fue docente de Matemáticas en el municipio de El Dovio (Cali), no vio con optimismo la histórica firma de paz alcanzada ayer por el gobierno colombiano y las FARC.
"Es injusto que premien a personas que sólo han hecho sufrir a su propio pueblo. Tengo entendido que a los militares involucrados quedarán impunes y además les indemnizarán. ¿Es justo eso?", pregunta Cárdenas, cuya familia fue perseguida por los guerrilleros.
A su lado está su pareja, que también es profesora, pero de sistemas -computación-, y llegó hace un mes debido al constante asedio de los milicianos, ya que éstos pensaban que su padre era un 'informante' de los paramilitares.
De hecho, cuenta que fue tal el hostigamiento hacia su progenitor, que éste falleció debido al estrés por el acoso. La pareja aún recuerda su temor cuando caminaba por las calles de su patria.
Desconfianza
El testimonio de estos dos inmigrantes que llegaron a Antofagasta con el único objetivo de salvar sus vidas, es compartido por otros tantos que también han sufrido (directa o indirectamente) por las disputas de la histórica guerrilla y de los grupos paramilitares de su país.
"En Colombia no tienes escape. Si apoyas a los grupos paramilitares (que combaten a las FARC), recibes el hostigamiento y las amenazas de los guerrilleros. Si apoyas a los guerrilleros, recibes el hostigamiento y las amenazas de los paramilitares. ¿Qué hacen las fuerzas policiales? Nada", explica un refugiado que participó en una ONG en Cali, la cual brindaba apoyo a pequeñas empresas.
El refugiado, quien prefirió no dar su nombre, explica que en la ONG que participaba, realizaban salidas a terreno para ver cómo marchaban las pequeñas empresas que asesoraban.
"Recibíamos muchas amenazas de las milicias urbanas de las FARC. No cesamos en nuestra tarea hasta que un día asesinaron a un compañero en plena salida a terreno. Esa misma noche lanzaron una granada que estalló en nuestra sede central. Nos tuvimos que ir", cuenta.
Ante esto, opina que ve con escepticismo el acuerdo firmado, ya que no confía que los guerrilleros entreguen todas sus armas.
Además considera que la impunidad para los jerarcas de las FARC es una falta de respeto para las víctimas del movimiento armado. Pero no descarta votar por el sí en el referéndum del domingo.
Primer paso
Sin embargo, a pesar del clima de desconfianza, muchos refugiados en Antofagasta dicen que apoyarán la iniciativa para que, por fin, el país pueda hallar tranquilidad.
"Es un momento que hemos esperado por mucho tiempo. Si bien hay puntos en donde todos no estamos de acuerdo (con el tratado de paz), porque habrá impunidad para algunos, creo que es un pequeño paso muy importante para nuestra generación", opina el periodista y presidente de la colectividad de colombianos residentes en Antofagasta, Benjamín Cruz.
A cinco días del trascendental referéndum, los colombianos en la ciudad están expectante por el nuevo destino de su país.
Referéndum en Antofagasta
Como paso previo al referéndum, este viernes se realizará un conversatorio para abordar el contexto y la temática que tendrá la histórica votación. La comunidad colombiana residente en Antofagasta llama a todos los inmigrantes a participar de la charla "Conversemos sobre el plebiscito en Colombia", que tendrá lugar a las 19 horas en el Patio Remolino, ubicado en calle Eduardo Orchard N°1643. También para el día del referéndum (domingo), están habilitadas aproximadamente 480 personas para sufragar en la ciudad, quienes deberán ir con su cédula de identidad hasta el consulado de su país, ubicado en Av. Bernardo O'Higgins N°1291, desde las 8 hasta las 16 horas.