Secciones

Robots y drones 'buscan' minas antipersonas en las Ruinas

TECNOLOGÍA. Teams compiten en UCN para difundir peligros de los campos minados que aún quedan en el norte.
E-mail Compartir

Lentamente un pequeño robot recorre un simulador de campo minado imitando el trabajo de su colega militar en la frontera chilena con Perú, donde a fines de mayo el Ministerio de Defensa reportó la extracción 31 mil minas antipersonas en 13 campos de sembrado.

Con un sistema de campo electromagnético, el androide debe hallar la mayor cantidad de minas superficiales y subterráneas, en la competencia de desminado humanitario 'Minesweepers 2016', que comenzó ayer en la Universidad Católica del Norte (UCN).

En la primera jornada de competencias se presentaron en la categoría "Academia", los robots de la Universidad Arturo Prat; Universidad Mayor de San Andrés, en representación de Bolivia; y el equipo de la UCN. En tanto que en la categoría de "Industria" se presentó el proyecto de la empresa Solidwork.

"La idea es concientizar sobre el desminado humanitario, porque en el mundo hay más de 110 millones de minas activas que producen más de 55 mil muertos al año y el 46% de esos son niños", explicó Ricardo Pérez, académico del Departamento de Ingeniería en Sistemas y Computación UCN y organizador de la competencia.

Las palabras de Pérez se traducen en las 130.497 minas extraídas en distintas zonas de las 181.814 sembradas en el país.

Esto es positivo, ya que hasta mayo de este año, la Agrupación de Víctimas de Minas Antipersonales cifró en 174 los afectados por estas armas que generalmente mutilan a los enemigos en guerras.

A Egipto

Tras una dificultosa competencia, el ganador asistirá al Minesweepers de Egipto en octubre, el mundial de esta actividad que realizan hace cuatro años.

"Tarapacá, Antofagasta y Arica-Parinacota son las regiones de Chile donde hay más minas. Fíjate que Chile y Colombia son los países más minados de Sudamérica y con minas activas, donde el peligro es inminente", dijo Pérez.

De pronto el parlante de Rubén Castro, profesor de Ingeniería Civil Electrónica de la Universidad Arturo Prat, suena al recibir señales del pequeño robot que encontró una mina antipersonas con su capacidad de detectar metales.

"La programación que se hizo fue considerando el recorrido en forma matricial a través de celdas (como el juego buscaminas) y al detectar una mina él guarda la posición y al final del recorrido muestra en la pantalla de un computador las coordenadas de la posición de esas minas", explicó.

Para que su robot llegase a competir en la UCN, Castro requirió de la colaboración de Mauricio Parra y Nicolás Gook, sus estudiantes, para armarlo.

Un trabajo duro tuvo Carlos Sánchez, ingeniero de la empresa antofagastina Ingeniería SolidWork al dedicar dos semanas en solitario para armar a Rob, elaborado con materiales económicos.

"Específicamente el robot cuenta con sensores magnéticos activos, que producen un campo electromagnético que al entrar en contacto con algún metal ferroso, el sensor altera su comportamiento que es leído por una tarjeta electrónica. Este convierte la señal análoga en un pulso detectado por un microcontrolador que captura una señal de GPS indicando la coordenada de captura de esta mina", explicó Sánchez.

Prototipo

Desde la empresa Casa Royal también exhibieron prototipos para competencias de robots con sensores de distancias y movimiento que pueden adecuarse e intercambiarse. Son desmontables, tienen balizas y un control remoto.

Por ello estos robots contribuyen en la docencia y motivan a la juventud para armarlos y programarlos junto a los detectores de metales con ruedas radiocontrolados que compitieron para imitar a los robots del Ejército que extraen minas antipersonales reales en las fronteras de Chile.