100 años | 1 de marzo de 1916

Hay nuevas esperanzas para Cobija

Cuando nada hacía pensar en la resurrección del puerto de Cobija, convertido ya en una ciudad fantasma, se abría a la posibilidad de reconvertirse en un puerto salitrero y minero. De esta forma, regresaba el viejo anhelo de 1863, de convertir al puerto en un punto directo ferroviario hasta Potosí, en Bolivia, lo que ahora podría concretarse.

50 años | 1 de marzo de 1966

Crearán Escuela Vocacional para hombres

La creación de una escuela Vocacional para Hombres en Antofagasta fue solicitada a la Dirección General respectiva y ya se dio el visto bueno, dijo el señor Raúl Bosque, director provincial de Educación Primaria. La escuela tendrá cursos preparatorios y relacionados con el tipo industrial que se dicta en la zona.

10 años | 1 de marzo de 2006

Seis nuevas salas de cine tendrá Antofagasta

Ayer quedó confirmado que el nuevo Mall Plaza en construcción en la ciudad ofrecerá otras seis salas de cine para Antofagasta, las que se sumarán a las actualmente ofrece Cinemundo en el shopping del Lider. De esta forma la ciudad pasará a contar con 12 salas para exhibir películas. Se espera ofrecer unas 14 por jornada.

La campaña de alfabetización "Contigo Aprendo", ha logrado que el año 2015 miles de adultos hayan aprendido a leer y escribir en el país. Sin lugar a dudas que tras esos números hay testimonios de personas que con esfuerzo, haciendo un alto en sus quehaceres diarios y venciendo prejuicios sociales, lograron salir de la oscuridad del analfabetismo.

Muchos de estos adultos señalan que cuando niños no pudieron estudiar porque sus padres carecían de recursos para enviarlos a clases o porque tenían que salir a trabajar o asumir tareas hogareñas. Pero nunca es tarde para aprender.

Según datos que ha dado a conocer la Unesco, a pesar de los avances en las tasas de alfabetización, en el mundo hay 774 millones de adultos que aún no saben leer o escribir; siendo dos tercios de ellos (493 millones) mujeres. Entre los jóvenes, hay 123 millones de analfabetos, de los cuales 76 millones son mujeres. Aunque la magnitud de la población analfabeta a nivel mundial se va reduciendo, la proporción de mujeres en esta condición ha permanecido invariable, entre 63% y 64%.

Pero ha habido avances en el acceso a la educación. Casi nueve de cada diez adolescentes de Latinoamérica y El Caribe cursan estudios secundarios, aunque en algunos países el nivel de escolarización es inferior al 70%, como ocurre en El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Paraguay. En tanto, la enseñanza superior (universitaria) exhibe cifras positivas, ya que en 2008 había casi veinte millones de estudiantes matriculados en este nivel, dos veces más que en 1999.

No obstante todos los avances que Chile ha logrado en el acceso a la instrucción, desde que se instauró la educación primaria obligatoria, más de 480 mil personas son analfabetas absolutas, que no saben leer y escribir, según el censo de 2002. Es cierto: nuestro analfabetismo se llevó a una mínima expresión, colocando a Chile en el grupo de los países más adelantados en esta materia. Sin embargo, los expertos hablan también de un analfabetismo funcional, es decir, de personas que teniendo una instrucción básica no son capaces de comprender lo que leen o escriben. Y ésta es una tarea pendiente.

Este llamado no deja de ser seductor y desafiante. Reconocer que nuestros resultados regionales son contradictorios al estatus económico de la zona; reconocer que el profesorado sufre los mismos síntomas de los colegas nacionales, pero con aspectos que lo agudizan, como ser el clima valórico donde se confunde desarrollo con malls, casinos, o turnos estresantes. El presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta, Sr. Marko Razmilic definía a Antofagasta como una ciudad jornalera. Este ethos cultural complejiza mucho más cualquier diagnóstico.

Finalmente reconocer que la tarea de educar se jibarizó al "rendirse" ante los parámetros uniformes del Simce y PSU.

Las capacitaciones, los perfeccionamientos, etc. ¿tienden a una innovación pedagógica y de las mallas curriculares? (El mundo de mañana ya será más que distinto e insospechado para el de pasado mañana). La educación chilena se quedó "pegada" en sus resultados, siempre bajo, al promedio de los países de la OCDE.

A riesgo de orillar los simplismos y reduccionismos, nos atrevemos a insistir juntamente con los pilares de la UNESCO: enseñar y aprender desde el ser de las personas, a pensar, saber hacer y convivir el aprendizaje en un clima socializado. Sincerándonos en cada uno de estos pilares, ¿el sistema actual, permite ejercitar estas tareas? Duele que el sistema carezca de los amplios espacios para ejercer una pedagogía enraizada en estos vitales predicamentos. "El más de lo mismo" son los agujeros negros del universo educacional. Sin cambios de paradigmas es imposible salir de una educación estancada.

Abiertas las puertas de la sinceridad podríamos rubricar estos considerandos al recordar que despertar los sentidos por la belleza de lo que se enseña, de lo que se estudia, es el polen para adentrarnos a la comprensión del mundo que nos llama a desvelarlo. Mientras las abejas hacen lo suyo brindándonos su miel, la educación hará lo suyo irguiendo conciencias.

Pedro Aranda Astudillo

Académico universitario