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"La enseñanza que me dejó el Dakar pasado es que no hay que descuidar detalles".

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Es imposible hablar del Dakar en Antofagasta y no mencionar al piloto Marco Reinike. Fue el primer competidor oriundo de esta ciudad en participar en la carrera "más difícil del mundo", y en 2016 irá por su quinta competición, con la ilusión de superar el trago amargo de la versión anterior.

El antofagastino iba a mitad de la carrera en el puesto 40, el mejor de todas sus participaciones, pero el Salar de Uyuni le jugaría una mala pasada. Una torrencial lluvia en la noche anterior había provocado que el lugar se transformara en un verdadero lago, situación que su moto no aguantó, terminando completamente con los sueños de Reinike en el Dakar 2015.

Fue un golpe durísimo para el piloto, que entre lágrimas señalaba que se retiraba definitivamente de esta competencia. Pero con el correr de los meses su decisión varió y hoy se prepara con todas sus fuerzas para su revancha fuera de Chile, con la ilusión de que la competencia vuelva en 2017 al país para despedirse definitivamente del "sueño de su vida".

¿Cómo se ha preparado para su quinto Dakar?

-A comienzo de año estaba todo incierto si iba otra vez o no, por lo sucedido el año pasado. Pero a medida que pasaban los meses comenzó nuevamente las ganas y la motivación. Ahora estoy 100% motivado y con ganas de empezar la carrera.

Después de lo que pasó en Uyuni, comentó a este medio que pensaba seriamente en no correr el 2016, además de analizar el retiro definitivo de la actividad ¿Qué lo motivó a participar en la próxima edición?

-La pasión por este deporte nunca muere. A medida que avanzaban los meses volví a subirme a la moto, a pensar en el recorrido, a planificar. Mi sueño fue siempre terminar cinco Dakar, pero este año no se pudo. Además en esta nueva versión no pasa por Chile lo que hace más difícil el financiamiento. No quería dejar esta ventana abierta y lo voy a tomar como una preparación del 2017, donde supuestamente terminaría en Chile.

Al no terminar el año pasado, ¿la organización le dio algún castigo?

-Sí, voy a empezar muy atrás. Voy con el número 113 por lo que tendré que remontar mucho en los primeros días pero a casi dos semanas del Dakar estoy muy motivado, enfocándome mucho en el físico, viendo los últimos detalles de la moto. Falta solamente ajustes menores y mi padre parte el 25 de diciembre a dejar la moto a Buenos Aires.

¿En caso de que el Dakar vuelva a Chile en 2017, sería el último que correrá?

-Sí, es lo más probable. Si pasa por Chile sería espectacular despedirme en esa instancia y después que alguien siga el camino. Por el hecho de que no pasa por nuestro país, en esta oportunidad van solamente seis chilenos en motos, un número bastante inferior a los años anteriores.

El hecho de que la carrera no pase por Chile, ¿pensó en no competir?

-Sin dudas. Solamente van seis pilotos porque el terreno es muy distinto y no nos favorece.

En ese mismo sentido, ¿cambia la preparación física y de la moto al no pasar por el país?

-Por el mismo tema estoy en el gimnasio con un preparador físico y nos hemos enfocado a tipo de ejercicios que sirvan para la competencia en altura. Vamos a tener que ir de pie casi el 90% del tiempo para tener una visibilidad mejor. Yo creo que habrá menos velocidad final pero vienen buenos corredores.

¿Existe incertidumbre al no conocer el terreno?

-Un poco. Si bien he estado en Argentina y Bolivia, el terreno es completamente nuevo pero se a lo que voy. El hecho de quedarme en el Salar de Uyuni me permitió conocer que cosas se deben hacer y evitar errores. Todo el arnés eléctrico está reforzado, los cables van sellados por cualquier elemento que pueda afectar al sistema.

¿Cómo se supera en lo emocional y motivacional lo sucedido en la edición anterior?

-Después de lo de Uyuni llegó anímicamente destrozado y deprimido porque la preparación para un Dakar no es de un día a otro. Venía haciendo mi mejor Dakar, completo físicamente y entrando dentro de los 40 y que uno quede afuera por un tema eléctrico daba mucha rabia, pero gracias a la familia y al apoyo de los amigos se pudo salir.

¿Qué enseñanza le dejó el retiro en el Dakar 2015?

-La gran enseñanza que me dejó es que no se puede descuidar ningún detalle, especialmente en una carrera como el Dakar. Nunca habíamos cruzado un salar con agua y eso también es parte del juego. Este año hemos revisado la moto muchas veces, imaginando distintas dificultades. Hemos tomado todas las medidas para evitar lo que pasó en el Dakar pasado, ya que en el detalle está el éxito o el fracaso.

¿Competirá con la misma moto?

-Básicamente es la misma moto pero mejorada. Le sacamos algo de peso y nos enfocamos a la protección. Vamos con dos baterías en la moto y con refuerzos en el sistema eléctrico. Son pequeños detalles pero que en una carrera de 15 días se notan.

¿Contará con un equipo de asistencia en carrera?

-Lamentablemente como van pocos chilenos, no habrá un equipo de asistencia como es Caballero San Lorenzo que reunía a los pilotos chilenos independientes. Mi padre me va a dejar la moto a Buenos Aires y ahí me acoplo con un equipo holandés que de alguna forma me está apoyando para hacer la ruta.

Ya lleva varios Dakar además de otras competencias por lo que puede ser considerado un piloto "experimentado", en este sentido ¿no ha recibido ofertas para competir por algún equipo?

-La verdad es que no. Este equipo holandés que me está apoyando con la asistencia se ofreció para ayudarme. Pero para poder ser mochilero o piloto oficial hay que estar 100% dedicado a la actividad y eso no sucede en mi caso. Pero de todas formas acepto esta situación y estoy viviendo esto como si fuera mi primer Dakar.

¿Fue más caro este Dakar al no pasar por Chile?

-Esto encarece los costos y hace más difícil la logística. Además se me fueron algunos auspiciadores por no pasar por el país.

¿Difícil lograr auspiciadores?

-Muy difícil aunque se puede sumar otros factores. El panorama económico no es el de los mejores. Pero de todas formas, una vez tomada la decisión de ir, no quería dejar una venta abierta y perderme esta fiesta.

¿Cuánto cuesta su participación en el Dakar?

-Este año lo hicimos más austero que nunca pero aun así estamos bordeando los 50 millones de pesos.

¿Cuáles son los objetivos de esta carrera?

-Lo principal es terminar la carrera y ojalá quedar lo más adelante posible de cara al 2017.

"Si pasa por Chile (el 2017) sería espectacular despedirme en esa instancia y después que alguien siga el camino".

entrevista. MARCO REINIKE, piloto antofagastino que correrá el Rally Dakar 2016: