En 2016 parte construcción de primeras 4 mil casas
LA CHIMBA. Ministerio confirmó inicio de dos proyectos para paliar déficit histórico en Antofagasta.
Tras varios años de acumular déficit, en 2016 debiera retomarse la construcción de viviendas sociales en Antofagasta.
Según confirmó el Minvu, para el segundo semestre está contemplado el inicio de dos importantes proyectos que sumados, aportarán más de 4 mil viviendas para familias de clase media y emergente, ambos en el sector La Chimba.
El primero consta de 803 soluciones habitacionales y se construirá en 4,6 hectáreas de exterrenos agrícolas situados sobre el parque Juan López.
El otro, más importante aún, se desarrollará en el sector Altos La Chimba, donde existen 93 hectáreas disponibles, de las cuales 60 serán destinadas a uso habitacional.
En este lugar se planean construir 3 mil viviendas en una primera etapa, y otras 6 mil en dos fases posteriores que comenzarían cuatro y ocho años más tarde.
Seremi
El seremi de Vivienda, Mauricio Zamorano, explicó que ambos proyectos deberían iniciar obras el segundo semestre de 2016, para entregar las primeras casas durante 2017.
"Son proyectos muy importantes porque nos permitirán generar oferta habitacional que prácticamente no hemos tenido los últimos años en Antofagasta. Hay que recordar que entre 2010 y 2013 apenas se construyeron 88 viviendas sociales en la ciudad", apuntó.
De acuerdo a la planificación que se maneja, a fines de 2017 se entregarían las 803 viviendas en los exterrenos agrícolas y mil de las tres mil que se espera edificar en la primera etapa del proyecto Altos La Chimba.
Sumando a esto otras 294 soluciones correspondientes a tres proyectos de la "línea de campamentos" (Caparrosa, Salar del Carmen y Catalina Cruz) se estima que ese año en total más de 2 mil familias podrían acceder a casa propia.
Etapas
Los proyectos en La Chimba están superando las etapas previas al inicio de obras.
En el caso de las 803 viviendas sobre el parque Juan López, existe un anteproyecto aprobado y ahora se deben tramitar los permisos de construcción en la Dirección de Obras de la municipalidad.
Para esta iniciativa el ministerio optó realizar un "concurso de anteproyectos habitacionales", en el cual la cartera genera unas bases técnicas, las empresas presentan propuestas de diseño y la oferta que resulta favorecida, inicia de inmediato su ejecución.
Un dato no menor es que con esta fórmula el mandante del proyecto es el Serviu, lo que implica retomar una política de desarrollo habitacional que no se aplicaba hace años.
Por su parte, las obras en Altos La Chimba se realizarán en un predio que entre 2014 y 2015 fue urbanizado y que además cuenta con vialidad estructurante gracias a inversiones del Gobierno Regional.
Allí la estrategia del Minvu es mixta, ya que involucra tanto un concurso de anteproyectos, como la realización de "licitaciones condicionadas".
Esto último significa que un privado construye viviendas y las pone en oferta, pero bajo parámetros muy precisos que define el ministerio.
Por ejemplo, estará la condición de que cierto porcentaje de las soluciones que se construyan tengan valores inferiores a 2.200 y 1.000 UF, de manera que en ellas se puedan aplicar los subsidios habitacionales que entrega el Estado.
En este caso el privado mantiene un margen para construir viviendas más caras para otros segmentos sociales (lo que rentabiliza su inversión) y además tiene la ventaja de obtener el terreno a "valor fiscal" y no "comercial".
"Con eso el privado disminuye mucho sus costos y a nosotros nos favorece porque se genera oferta de vivienda subsidiable", afirmó el seremi.
Zamorano dijo que otra cualidad es que se produce "integración social", al haber familias de distinta condición económica compartiendo un mismo espacio.
Mauricio Zamorano precisó que tanto el proyecto en el exsector agrícola como el que se ejecutará por etapas en Altos La Chimba considera áreas verdes y equipamiento.
El de Altos La Chimba es especialmente importante, pues allí está previsto que en un horizonte de doce años vivan unas 25 mil personas (9 mil viviendas), cantidad que equivale a la población de Tocopilla.
Por eso, junto a las viviendas, se planifica equipamiento de salud, escolar, comercial y el futuro paso de la nueva Avenida Circunvalación.
Calama tiene obras avanzadas
El Minvu también trabaja en soluciones en otras comunas de la región, por ejemplo, en Calama, donde ya existen tres proyectos habitacionales en desarrollo. Se trata de Inés de Suárez, con 674 viviendas: Sol y Cobre, con 118; y Las Vegas, que suma otras 160. Estas tres iniciativas entregarán las primeras soluciones en 2016. Además avanzan proyectos en Mejillones (110 casas) y Sierra Gorda (65 casas).