"Tierra de Gabriela y Sismos"
Este 10 de Diciembre se cumplen 70 años, en que Lucila Godoy Alcayaga recibiera el Premio Nobel de Literatura de manos del rey Gustavo de Suecia. La Agrupación Altazor de escritores antofagastinos gracias al Core 2% de Cultura, viajamos a homenajearla a la Feria Internacional del Libro de Santiago y nos Unimos a la Ruta de Gabriela Mistral 2015; que la Sociedad de Escritores de Chile SECH filial Coquimbo, realizaron acudiendo 35 escritores argentinos y 30 chilenos.
En ese viaje visitamos los lugares en que vivió Lucila, el valle del Elqui Vicuña, la Serena, Coquimbo; volvimos a escuchar sus poemas, y testimonios de su vida. Los escritores, los alcaldes de Vicuña, Paihuano, el gerente de Pisco Capel, la prensa, radio y otros nos agasajaron. En nuestro recorrido destacamos el excelente concierto en la Iglesia Santa Inés la más antigua de la Serena dado por su famosa orquesta.
Las charlas de los escritores asistentes en la Mezquita de Coquimbo, la visita al Museo de Vicuña, y Casa de Gabriela Mistral en la Compañía.
Pero lo más inolvidable fue visitar Monte Grande: la tumba y recorrer la casa escuela, donde Lucila vivió sus primeros años y desde donde se ven las cien montañas y más, ayer piedras grises ; hoy un vergel de espalda al valle y al río, que eleva el alma al ver tantas viñas al goteo.
La casa museo, es un cordón de recuerdos, un repasar dichoso con edad. Afuera una anciana nos detuvo para decirnos, que cuando estaba en la escuela, conoció a Lucila en su última visita Nos contó que todo está igual, el dormitorio con sus camas y catres de fierro, en la sala de clase, los pupitres, pizarrón guardan los recuerdos y en el patio la campana silenciosa, deja escuchar el trinar de los pájaros.
Allí Lucila con las trenzas de los siete años y las batas claras de percal jugaba a las rondas, persiguiendo a los tordos huidos en la sombra del higueral. Yo sentada en el patio sentí la fragancia de la salvia, romero y una paz, hervor que aprietan los cerros.
Pero en la noche uno de los 3.000 sismos con epicentro en La Higuera 6.9, nos asustó a los escritores del hotel frente al mar. Un Sr. Inglés indiferente ni se inmutó, igual que cuando Charles Darwing estaba en Coquimbo en 1835.
Nancy Monterrey C.
Escritora