José Luis Ramírez M.
Una indicación que rebaja a la mitad (de US$440 a US$220 millones) los recursos destinados al Metro de Santiago, asoma como la última oportunidad de elevar los presupuestos de las regiones, que en casos como Antofagasta, se anuncian menos abundantes durante 2016.
La indicación, presentada por los senadores Pedro Araya, Alejandro Guillier, Juan Antonio Coloma, José García Ruminot y Baldo Prokurica, fue sorpresivamente aprobada el viernes en la Sala de Cámara Alta, encendiendo las alarmas del Gobierno, que ha insistido en la necesidad de reponer los recursos descontados.
Lo importante del tema es que la indicación busca resarcir lo que se considera una "política centralista" en la distribución de los recursos públicos.
De ahí que la principal demanda de los senadores que la impulsan, sea que al menos parte de los fondos descontados al Metro sean usados para financiar la cartera de inversiones hospitalarias, suplementar los presupuestos FNDR y ejecutar obras postergadas fuera de Santiago.
Demandas
Los senadores Pedro Araya y Alejandro Guillier explicaron que la idea de fondo es "hacer justicia" con las regiones y desconcentrar el uso de los recursos públicos en un año donde éstos "serán el motor de la actividad económica".
"No nos parece bien que por un lado se inyecten US$440 millones al Metro y por otro se le diga a las regiones que no hay recursos para sus proyectos. Contra ese tipo de políticas va esta señal de molestia", indicó Pedro Araya.
El parlamentario conversó del tema con el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, a quien manifestó su disconformidad con una serie decisiones que afectan a regiones.
Araya mencionó la rebaja que en 2016 sufrirá el presupuesto FNDR de Antofagasta y la reciente redestinación de $13 mil millones del Fondo de Apoyo Regional (FAR) a obras hospitalarias que están en desarrollo y a las cuales el Estado no aportará el 100% de los recursos.
"Le hemos exigido al ministro que suplemente o redestine recursos, porque entendemos que el costo (del menor gasto público) no lo deben pagar sólo las regiones", indicó.
El senador Alejandro Guillier también remarcó este punto, asegurando que "mientras en Santiago los recursos no se tocan, en regiones los siguen rebajando".
Guillier puso como ejemplo a Antofagasta, donde -según asegura- los aportes de Hacienda al Gobierno Regional descenderán más de $5.600 millones en 2016.
"Cómo se explica que a la región se le recorte el presupuesto, en medio de un escenario tan negativo como el que tenemos, con miles de trabajadores que están quedando cesantes", apuntó.
El parlamentario dijo que aunque el Metro es claramente un servicio importante para la gente de Santiago, en el norte la lucha que se está dando "es por la supervivencia de la minería".
Trámite
El recorte en el presupuesto del Metro será votado hoy en la Cámara de Diputados y si es aprobado quedaría a firme, a menos que el Ejecutivo utilice algunas de las herramientas que le confiere la ley para forzar una nueva discusión.
Si la propuesta, por el contrario, es rechazada por los diputados, pasará a una comisión mixta, donde parlamentarios de ambas cámaras analizarán el punto.
Lo que se resuelva aquí también debe ser aprobado por ambas cámaras legislativas y si alguna de ellas rechaza, no habrá ley en la materia.
Tras la aprobación de la indicación el viernes, el gobierno reforzó sus contactos a nivel parlamentario para lograr que la Cámara Baja rechace la indicación de los senadores, apostando a que luego los recursos podrán ser repuestos en la comisión mixta.
Araya y Guillier dijeron ayer estar abiertos a conversar una fórmula intermedia con el Gobierno, donde parte de los fondos descontados sean devueltos al presupuesto del Metro y la otra efectivamente llegue a regiones.
Fondo concursable se reduce
La semana pasada las alarmas volvieron a encenderse en regiones debido a la aprobación de una glosa que permite destinar $13 mil millones del Fondo de Apoyo Regional (FAR) a gastos en Salud. Con esto lo que se buscaba era que las mismas regiones pudieran cofinanciar los proyectos hospitalarios en desarrollo y así paliar los menores recursos destinados a este ítem. El impacto de la medida en Antofagasta podría ser negativo, considerando que el FAR queda en buena medida comprometido y por ende habría menos opción de financiar proyectos tradicionales por esa vía. Hay que precisar que la región aspiraba a recibir del FAR unos $5 mil millones en 2016.
$2.559 millones menos recibirá el FNDR de la región en 2016, sin embargo, también habría otras rebajas.