Proceso constituyente
"No es posible cerrarnos a que, mediante un debate racional, pueda mejorarse la carta fundamental".
Al anunciar la Presidenta de la República el camino para lograr una nueva constitución, ha dejado dudas y sospechas.
Dudas, porque ha decidido iniciar una discusión sobre la forma de modificar la constitución, dejando de lado los mecanismos que ella misma prevé y que permiten una modificación ya sea parcial o total; y sospechas, porque no se ha explicitado la causa real de disconformidad con la carta actual, salvo que fue dada en dictadura (aunque hoy lleve la firma del exPresidente socialista Ricardo Lagos y haya sido modificada más de veinte veces desde 1990 hasta ahora).
Por otro lado, el proceso de educación cívica empezará a operar sobre "una hoja en blanco" como dijo el ministro Nicolás Eyzaguirre:
Ahora bien, pese a las dudas y sospechas que surgen contra dicho proceso, no es posible cerrarnos a que, mediante un debate racional, pueda perfeccionarse la carta fundamental o, derechamente, llegar a una nueva. La política, como actividad deliberativa, obliga a que toda la ciudadanía participe de un debate amplio, incluso promoviendo la participación activa de quienes afirman que no debe haber cambios. Por ello, Renovación Nacional ha declarado que esta abierto a participar de un debate, pero con reglas claras e institucionales, que den plenas garantías.
Las constituciones son la expresión de un acuerdo político mínimo cuyo contenido esencial son las bases de la República. Tales bases constituyen los valores de la comunidad, los derechos y deberes de sus miembros, así como la estructura orgánica que sirve a dicha comunidad. A todo esto resulta transversal la distribución del poder y como éste será limitado.
Quizás no haya otro asunto tan esencial en la política como es distribuir el poder y limitarlo, pues de tal equilibrio surge el grado de libertad que como sociedad tendremos. La constitución no es, pues, un juego. Esperemos que el gobierno así lo entienda y, mediante la discusión abierta, enmiende a tiempo el rumbo.
Paulina Núñez
Diputada de la República