Secciones

Canal realiza emotiva transmisión tras asesinato de reporteros

E-mail Compartir

Un día después del asesinato de dos periodistas televisivos en Virginia, EE.UU., el personal del canal WDBJ-TV se reunió ayer para una emisión de su programa "Mornin"'. A las 6.45, la hora local del asesinato de la reportera Alison Parker y el camarógrafo Adam Ward, la estación realizó un minuto de silencio con las fotos de las víctimas en la pantalla.

Kim McBroom, la presentadora durante el tiroteo del miércoles, tomó las manos del meteorólogo Leo Hirsbrunner y de su colega Steve Grant. "Tomados de las manos aquí en la mesa. Es la única manera de hacerlo", dijo segundos antes del minuto de silencio.

Durante su segmento, Hirsbrunner recordó con voz temblorosa que Ward lo llamaba todas las mañanas para conocer el estado del tiempo antes de salir a hacer su trabajo. "No sé cómo dar el estado del tiempo en un día como éste", dijo.

La emisión matutina incluyó una serie de noticias sobre el suceso. Una se enfocó en la investigación penal de Vester Lee Flanagan II, el exreportero de WDBJ-TV que utilizaba el seudónimo artístico de Bryce Williams. Murió de un disparo autoinfligido horas después de la matanza.

Su familia dio a conocer un comunicado en el que expresó condolencias a las víctimas y pidió se respete su intimidad. "Las palabras no pueden expresar lo que sentimos", dice en una parte.

Pareció un ataque cuidadosamente planificado. Flanagan fue visto en un auto arrendado que había reservado previamente; su propio Mustang apareció abandonado en el aeropuerto local, dijo la policía. La entrevista fue realizada en un centro comercial aún no abierto al público ese día, en un lago remoto en Moneta, a unos 35 kilómetros de los estudios de WDBJ. El canal había promocionado la entrevista e indicado dónde tendría lugar.

Tres horas después del hecho, ABC News recibió una declaración de 23 páginas de Bryce Williams. Allí Flanagan se caracterizó como un afroamericano homosexual que había sido maltratado por personas de todas las razas, y como "un polvorín humano a punto de estallar".

Hallan decenas de refugiados muertos en camión en Austria

Europa. La policía cree que el número de víctimas podría alcanzar las 50 y sospecha de un delito de trata de personas.

E-mail Compartir

Entre 20 y 50 supuestos refugiados, cuyas nacionalidades por el momento se desconocen, fueron hallados muertos en un camión frigorífico abandonado en el este de Austria, país al que entró desde Hungría, en un presunto caso de trata de personas.

La policía austríaca informó que, por razones técnicas, recién hoy podrá dar a conocer la cifra exacta de las víctimas, cuyos cadáveres se encontraron ayer por la mañana en claro estado de descomposición.

Se calcula que las víctimas habían muerto entre 36 y 48 horas antes del descubrimiento de sus cadáveres. "Deben tener en cuenta que ya desde la parte de atrás del camión salía un líquido de descomposición. A primera vista no fue posible calcular el número de cuerpos", dijo el director de la policía del estado de Burgenland, Hans Peter Doskozil.

El policía estimó que la cifra de víctimas es de al menos 20, pero que puede ser mucho mayor, hasta 50. Explicó que el compartimento de carga, tras el primer momento en que se abrió para ver lo que había dentro, no se había vuelto a abrir al menos hasta las 18.00 hora local, ya que para hacerlo se esperaba alcanzar cierto grado de refrigeración.

El camión de 7,5 toneladas y un compartimento de carga de 5 metros de longitud estaba estacionado en una zona para vehículos averiados en la autopista A4, entre el lago Neusiedl y la localidad de Parndorf, en Burgenland, estado fronterizo con Hungría. La policía lanzó una operación para dar con el conductor del vehículo y las personas que estuvieron vinculadas con el presunto delito de trata de personas que se sospecha detrás de esta tragedia.

Doskozil declinó dar detalles sobre las pesquisas, pero sí reveló que se investiga "a un grupo de presuntos autores del crimen vinculados con una empresa eslovaca de construcción".

El vehículo fue transportado con los cadáveres dentro a una instalación de veterinaria fuera de servicio en la localidad de Nickelsdorf, junto a la frontera con Hungría, donde hay un sistema de refrigeración necesario para recuperar los cuerpos.

Una vez recuperados, los cadáveres serán trasladados al centro de medicina forense de Viena, donde se harán las autopsias para determinar individualmente la causa de la muerte y se intentará identificarlos.

Según la policía húngara, el camión, con matrícula húngara, fue visto al sur de Budapest el miércoles y más tarde cerca de la frontera con Austria, país al que se calcula entró el miércoles por la noche, cuando las personas que transportaba estaban probablemente ya muertas.

Las autoridades austríacas establecieron un gabinete de emergencia y reforzaron los controles de los pasos fronterizos para tratar de dar con los responsables. "Esta tragedia nos ha conmocionado a todos", declaró la ministra del Interior, Johanna Mikl-Leitner.

Este suceso se produjo mientras en Viena se celebraba una cumbre dedicada en principio a los países de los Balcanes occidentales, pero la actual crisis migratoria en la región se convirtió en el principal tema debatido. Los participantes en la reunión guardaron un minuto de silencio por los fallecidos. Una ola de refugiados, en su mayoría procedentes de países en conflicto como Siria y Afganistán, ha llegado en las últimas semanas a los países de los Balcanes occidentales en su ruta hacia Europa occidental.