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Anuncian los principales invitados de la Feria del Libro de Santiago 2015

letras. Finlandia, Dinamarca, Noruega y Suecia serán los visitantes de honor.

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Escritores de todos los géneros literarios, profesionales de la educación, y artistas participarán de la próxima edición de la Feria del Libro de Santiago 2015 (FILSA), que se realizará del 22 de octubre al 8 de noviembre en el Centro Cultural Estación Mapocho.

Y este año serán Dinamarca, Finlandia, Suecia y Noruega, los países invitados al evento que es organizado por la Cámara Chilena del Libro.

Dichos países nórdicos destacan por su tradición en la literatura policial y de misterio, género del que visitarán Chile algunos representantes, además de poetas, ensayistas, cronistas y otros dedicados a la literatura infantil.

Ayer fue presentado el programa que traerán los países invitados en un encuentro en el que participaron el presidente de la Cámara Chilena del Libro, Alejandro Melo, el embajador de Dinamarca en Chile, Jesper Fersløv Andersen; junto a los agregados de Cultura Trine Danklefsen (Dinamarca), Riitta Alanen (Noruega) y Eija Pirttiaho (Finlandia).

Además de escritores asistirán ilustradores, bandas musicales, obras de teatro, y hasta un ciclo de cine.

Entre los 19 autores invitados a la FILSA, destacan los finlandeses Riikka Pelo (Premio Nacional de Literatura) y Timo Parvela (Premio Nacional de Literatura Juvenil); el noruego Kjartan Fløgstad (Premio de Literatura del Consejo Nórdico), y del sueco Johan Theorin (Premio de los Países Escandinavos a la mejor Novela Negra y a la Mejor Novela Sueca).

Desde Dinamarca también llegarán Sissel-Jo Gazan (novela del año); Carsten Jensen (Premio Golden Laurels de Literatura), Thomas Boberg (Premio de Literatura del Consejo Nórdico), Niels Frank (Medalla Emil Aarestrup), Hanne Bartholin (Premio de Ilustración del Ministerio de Cultura), Christian Jungersen (mejor Novela danesa del año), y Pia Juul, nominada este año al Premio de Literatura del Consejo Nórdico.

Lee y Antonelli

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El ser humano tiene íconos personales que cubren vivencias que han quedado para siempre en los caminos de la vida y que, al recordarlos, se transforman en emociones fundamentales.

Pancho, uno de mis hijos, tenía seis años cuando le hablé del actor Christofer Lee sobre la base de "Drácula", la obra de Bram Stoker escrita a fines del siglo XIX y dirigida en 1960 por el inglés Terence Fisher para la famosa productora Hammer. Le comenté de la magia del cine que transforma a un ser humano en una visión pavorosa por efecto del maquillaje y el lenguaje.

La conté que cuando se proyectó el filme en el Cine Alhambra de Copiapó hubo conmoción entre los jóvenes que repletábamos la sala del recuerdo. Cuando el lenguaje cinematográfico plantea ese primer plano con el rostro de Lee-Drácula, las chicas del Liceo de Niñas dieron alaridos de horror y una perdió el sentido. La función fue detenida.

Pancho tiene 34 años y vive en Wellington, capital de Nueva Zelandia. Me puso un correo recientemente: "Papá…murió Christofer Lee. Lo siento". En esas seis palabras estaban nuestras vivencias cinematográficas que detallan el histrionismo profesional del actor inglés. Poco conocido por su labor en el Old Vic de Londres en obras clásicas de Shakespeare.

Murió un integrante de nuestras fantasías adolescentes y de niño de Pancho que entendió lo que le explicaba, ubicando al actor entre sus íconos añorados.

Laura Antonelli es uno de los personajes de mi novela "Las Muertes Perpetuas". Falleció el lunes 22 de junio en Italia. Una de las actrices más bellas y sensuales del cine italiano de los 70.

Uno de los protagonistas de la novela es un conscripto del regimiento de Copiapó que se apresta a ingresar a sangre y fuego a la U. de Atacama el 5 de septiembre de 1984. Sus fantasías eróticas las tiene con la Antonelli de "Malicia" (1973) de Salvatore Sampieri y su mítica escena de amor con el joven Alessandro Momo.

Antonelli y Lee ya no están pero siempre permanecerán en las mentes de quienes sienten que el cine es una incontenible sensación de las emociones humanas.