El EI extiende sus dominios hasta la frontera con Irak
ofensiva. Un ataque en la ciudad siria de Palmira dejó al menos 150 muertos.
El grupo terrorista Estado Islámico (EI) avanzó ayer por el desierto central sirio, donde consiguió extender sus dominios hasta la frontera con Irak, país en el que también busca ampliar territorio.
En su recorrido por la provincia siria de Homs, el EI apenas encontró resistencia del Ejército nacional, que se desplegó por distintas zonas para frenar el avance del grupo.
Según explicó a EFE el activista Samer al Homsi, de la opositora Red Sham, los yihadistas tomaron ayer el control de la planta de gas T3 en Homs y las localidades de Al Sauana y Jinifis, a unos 40 y 70 kilómetros al oeste de la ciudad monumental de Palmira, bajo dominio del EI desde hace dos días.
La ofensiva logró estos objetivos gracias a que la noche del jueves conquistaron el paso fronterizo de Al Walid, también conocido con Al Tanf,ubicado entre Homs y la provincia iraquí de Al Anbar, que era el último cruce con Irak que tenía en sus manos el régimen del Presidente sirio, Bashar al Assad.
Al Homsi explicó que los efectivos gubernamentales sirios apostados en ese lugar se retiraron hacia la parte iraquí del paso, controlada por las fuerzas del Gobierno de Bagdad, no sin antes prender fuego a las instalaciones.
Según consignó AP, los milicianos yihadistas fueron de casa en casa en la ciudad de Palmira con listas de nombres y datos de informantes para rastrear y asesinar inmediatamente a los soldados del Gobierno y otros enemigos, y los asesinaron inmediatamente a tiros. Se calcula que la ofensiva dejó al menos 150 muertos en los dos últimos días.
El EI se atribuyó ayer el atentado contra una mezquita de la población saudí de mayoría chií de Al Qadih, donde murieron al menos once personas. "El hermano mártir Abu Amer al Nashdi irrumpió con su cinturón explosivo en una concentración de chiíes infieles en un templo de Al Qadih", publicó el EI en un comunicado.