Tener buenos vecinos causa efectos positivos en la salud
Comunidad. Un barrio cohesionado sería beneficioso para la salud mental y cardiaca, según un estudio que exploró los ambientes sociales de los vecindarios.
Varios estudios han encontrado que el ambiente físico de los barrios, es decir, el nivel de exposición al ruido, la contaminación, la violencia y otros elementos de estrés, afecta la salud de las personas. Pero ahora, un estudio explora las repercusiones del ambiente social de los barrios, sugiriendo que una buena relación con los vecinos mejora la salud mental e incluso la cardiaca.
Según la investigación, publicada en la revista Journal of Epidemiology & Community Health, entre más unido y cercano sea un barrio, mejor salud mental tienen las personas.
En esta investigación, los autores siguieron a más de cinco mil personas por un periodo de cuatro años. Todos los participantes eran mayores de 50 años y no tenían historiales de enfermedades cardiacas.
Los voluntarios debieron calificar las siguientes afirmaciones en una escala de 1 a 7: "Realmente me siento parte de este barrio, "Si tuviera un problema, hay muchas personas en el barrio que me ayudarían", "La mayoría de las personas de este barrio son confiables", y "La mayoría de las personas de este barrio son amigables".
El estudio resalta que el barrio en que vivía cada persona hizo una gran diferencia en la salud mental de éstas.
Además, las personas que se sentían mejor respecto del clima de su barrio fueron menos propensas a experimentar un ataque cardiaco durante los cuatro años del estudio.
Esto fue así incluso cuando existían factores de personalidad, biológicos y sicosociales que podían contribuir a un mayor riesgo de ataque al corazón, tales como el peso, el estado civil, el tabaquismo y el estado físico.
¿Por qué algunos barrios contribuyen a una mejor salud de sus residentes? Los investigadores sugieren que la cohesión del barrio puede mejorar la salud cardiaca al aumentar la actividad física debido a la percepción de comodidad social y seguridad. También se puede deber a que los vecinos se animan mutuamente a adoptar comportamientos saludables. Otro factor pueden ser los bajos niveles de estrés y el nivel de satisfacción en general.
En opinión de los autores, el estudio es una buena noticia para las autoridades de salud, pues a su juicio proporciona información sobre un mecanismo alternativo para promover hábitos saludables.
Los hallazgos de esta investigación sugieren que desarrollar condiciones de barrio más favorables podría proporcionar un impulso adicional para la salud de las personas. Según los investigadores que realizaron el estudio, las políticas de salud públicas y sociales deberían tomar en cuenta estos antecedentes en sus desarrollos.