Secciones

Temen colapso en géiseres de El Tatio por exceso de turistas

E-mail Compartir

No son más de diez los lugares turísticos más concurridos en San Pedro de Atacama, el principal polo de atracción en la región, y cada vez es más necesario contar con una planificación que permita ordenar y proyectar a largo plazo el desarrollo de este sector.

Según el miembro del directorio de la Fundación de Cultura y Turismo de San Pedro de Atacama, Justo Zuleta, están poniendo énfasis en formar equipos de trabajo.

"Eso implica que para este año se contrataron los servicios de una geógrafa que nos está ayudando en todo lo que significa la delimitación para las Zonas de Interés Turístico (ZOIT), en este caso para la actualización de la renovación de la declaración", explicó.

Agregó que junto con eso viene asociado un Plan de Desarrollo Turístico y "para eso se está gestionando con los diferentes actores públicos y privados, ya sean asociaciones indígenas como los gremios que agrupan diferentes sectores del empresariado y así tener diversas visiones".

Aprovechando la época de alta temporada, la fundación está realizando visitas a los sitios turísticos para recabar información acerca de la gestión de este destino turístico.

"Hay destinos como los Géiseres de El Tatio, el Valle de la Luna, las Lagunas Altiplánicas y hasta hace poco la Laguna Céjar que ya están siendo sobrepasados en su capacidad de carga. Las mismas comunidades nos han manifestado poder trabajar y ver un plan de manejo que pueda controlar y dar sustentabilidad a cada sitio", argumentó Zuleta.

Lo anterior, implicará que también se pueda ir diversificando la oferta, "abriendo otras oportunidades de desarrollo turístico y teniendo horarios que no concentren todas las visitas al mismo tiempo como es el caso de El Tatio y en el Valle de la Luna", dijo Zuleta.

Experiencia

El presidente de la comunidad de Coyo, Jorge Álvarez, quien administra la Aldea de Tulor y la laguna Tebenquiche cuenta que este último lugar está siendo reordenado desde el año pasado a través de un proyecto con mejoras en servicio, infraestructura y protección medioambiental, debido al deterioro y hundimiento que estaba sufriendo producto del exceso de vehículos que diariamente ingresaban.

Por ello planificaron tener entradas limitadas diarias que permitan un mejor control. Sin embargo, el alza de precios de la Laguna Céjar que marca el recorrido de los tours, terminó por bajar drásticamente la cantidad de visitas. "Antes llegaban 25 furgones ahora llegan siete u ocho", dijo.

1916 es el año

en que inauguraron la exestación de trenes del FCAB, la cual cumplió con su función durante más de 60 años en Antofagasta. Su destino es incierto.

Piden plan para rescatar lugares emblemáticos en total abandono

Preocupación. Históricas casonas, parques y espacios públicos de la ciudad presentan un deplorable estado y son guarida de delincuentes.

E-mail Compartir

Antofagasta tiene una serie de atractivos que hablan de su historia de grandeza y pujanza económica. Sin embargo, también muestra una cara poco grata de espacios públicos que están en el más absoluto olvido.

Sólo basta un recorrido por la ciudad para comprobar cómo espacios públicos, monumentos y sitios históricos presentan hoy un deplorable estado, algunos incluso convertidos en verdaderos focos de delincuencia, tal como ocurre con la Cachimba de Agua en el sector centro norte.

Floreal Recabarren, profesor de Historia y Geografía y exalcalde de la ciudad, manifestó que estos lugares deberían ser preservados debido a su importante contribución a la historia de la ciudad, señalando que debiese existir más preocupación por parte de las autoridades.

"Creo que en estos espacios no se ha invertido absolutamente nada, hay falta de iluminación, de personal. La Casona de Resguardo Marítimo es utilizada como bodega por la Dibam, y muchos de estos lugares sólo son pintados de vez en cuanto, pero al rato vuelven hacer rayados. Falta preocupación de las autoridades", manifestó.

Mantención

Varios de estos puntos son supervisados por el municipio bajo la Secretaría Comunal de Planificación del Desarrollo (Secoplan) y otros pertenecen a privados, en los cuales las gestiones por salvaguardar la infraestructura presentan una mayor dificultad.

En la mayoría de los casos, Secoplan ha velado por el mantenimiento de estos lugares, pero el poco compromiso de la ciudadanía y la acción de antisociales provocan que habitualmente presenten daños en su estructura (Parque Japonés, Edificio del Resguardo Marítimo) o en su funcionamiento (Hilo de Agua).

El arquitecto César Rojas explicó que si bien la ciudad cuenta con muchos lugares que datan de fines del siglo XIX y principios del XX, es necesario realizar un catastro para ver cuáles realmente cumplen con la condición de poseer un valor patrimonial.

Ciudadanía

Para Nelly Lemus, gestora Cultural y Ancla de Oro, el tema es preocupante. "En pleno siglo XXI tener lugares abandonados... es impensado, más con la cantidad de artistas en busca de espacios para expresarse", comentó.

Los vecinos también claman por el rescate de estos lugares, tal es el caso de la exEstación de Trenes. Para muchos, sería un sueño verla remodelada y ser un aporte al turismo.

La obra de 27 metros de altura se encuentra sin bombear agua (su función principal) y con su alrededor atestado de ropa y basura. La mayoría de los indigentes que llegan al lugar lo ocupan para dormir. Desde Secoplan dijeron que el sector ha sido sometido a arreglos, más los desperfecto perduran.

El que fuera uno de los puntos de encuentro preferido por la gente, hoy se mantiene con su principal atracción vacía. Nos referimos al Parque Japonés, donde su otrora pileta de aguas cristalinas con exóticos peces kois está completamente vacía. El proyecto que lanzó la municipalidad para recuperar el espacio aún no se ha ejecutado, debido a un rediseño de las obras originales, según comentó el director de la Secretaría Comunal de Planificación (Secoplan), Dante Novoa la semana pasada, que debería ejecutarse el primer semestre del presente año. También se hace un llamado a la comunidad a cuidar y respetar este espacio.

La Cachimba del Agua, ubicada en General Bonilla, representa hoy un verdadero peligro para los habitantes del sector, quienes se quejan que después del cese de labores (a las 19:00hrs), el lugar se transforma en un foco delictivo donde jóvenes se juntan para perpetrar robos y consumir drogas.

Aquí funcionó hasta 1977 la exestación de ferrocarriles de Antofagasta. La construcción data de 1916 y se encuentra en la actualidad en el más completo abandono, cercada y prohibida para los ciudadanos, pues el área pertenece al FCAB. Hoy la estructura se encuentra con la mayoría de sus ventanales rotos y con su frontis en un evidente estado de deterioro. Vecinos del sector manifiestan que les gustaría poder ver la antigua estación recuperada, ya que destacan la belleza arquitectónica que presenta y su valor histórico para Antofagasta. Consultado sobre el tema, FCAB aún no entrega declaraciones.

Desde que fuera azotado por las marejadas en 2013, el paseo costero ubicado detrás del Mall Plaza no ha vuelto a abrir sus puertas a los visitantes, esto a raíz de las condiciones en que quedó producto del oleaje y que representan un eventual peligro. A ello se suma la acumulación de basura y escombros, que no ha hecho más que dañar la imagen del sitio, la cual entregaba un verdadero espacio de esparcimiento para la comunidad debido a la inmejorable panorámica que entregaba a sus visitantes. EPA, que está a cargo de la zona, aseguró que se realiza un proyecto para recuperar el Molo, pero aún no tiene fecha definida.

Uno de los puntos de contraste se da frente a la plazoleta del al Mall, que actualmente se presenta descuidada. Si bien el personal del centro comercial se ocupa de su mantenimiento, la basura prolifera desde todos sus puntos. Botellas, latas de cerveza, envases desechables, colchones, carros de supermercado y gran cantidad de bolsas de basura se pueden encontrar desperdigados por el lugar. También es preocupante la cantidad de mendigos que habitan el sector, quienes instalan sus carpas en toda la calzada.

El exedificio de Resguardo Marítimo, construido en 1910, sirvió en su función hasta 1940. Sin embargo, hoy sólo alberga los archivos del Museo Regional. En la actualidad su frontis se ha transformado en un verdadero "baño" debido a la práctica constante de antisociales de hacer sus necesidades en el lugar.

Lamentable son las condiciones en las que se encuentra la cancha comunitaria de la población Balmaceda. Durante las noches el sitio es "tierra de nadie", debido a que es utilizada por antisociales para realizar microtráfico o por indigentes para pernoctar. Carece de iluminación.