"Es triste tener que recordar todos los días lo que pasó y peor aún, que no encuentren a nadie. Eso desespera porque no murieron animales, ¡eran tres personas!". El tono de voz de Daisy León Cortés refleja rabia y desconsuelo por una justa razón: el 28 de diciembre su hija, quien tenía cuatro meses de embarazo, murió atropellada junto a una amiga por un vehículo que escapaba de la policía.
La tragedia ocurrió de madrugada en calle Río Maule, arteria ubicada en el sector norte de la ciudad, donde transitaban Susana Navea Tapia (48) y Aurora Gutiérrez León (37), quien tenía cuatro hijos, además de estar embarazada.
Ambas eran amigas ya que vivían en el mismo domicilio y esa noche salieron a comprar comida rápida. Sin embargo nunca regresaron a su hogar, ya que un vehículo Nissan Murano, que había sido robado una hora antes y que escapaba de la policía, las atropelló, matándolas de manera instantánea.
pesquisas
Pasaron 18 días desde el incidente y lo más cercano a un detenido que tiene este caso es el joven de 22 años a quien Carabineros controló su identidad. Éste habría confesado ser el copiloto del automóvil, pero como el testigo del hecho no pudo reconocerlo, la Fiscalía no ordenó su detención.
Daisy León asegura que hasta el momento desconoce si hay algún avance en la investigación por la muerte de su hija. Agregó que tiene conocimiento del rumor que indicaría que un menor de 15 era quien conducía el vehículo, pero cree que es una información que busca librar de responsabilidad al verdadero involucrado.
León vive sola en su casa y sostiene que es difícil soportar lo sucedido, teniendo en cuenta de momento no hay ningún detenido por el fatal atropello.
"Esto no puede seguir así, porque uno es pobre no hay rapidez. No hablamos de que mataron un perro, son tres vidas que se perdieron, queremos justicia porque nadie devolverá la vida de mi hija", manifestó Daisy. Incluso dijo que tuvo una reunión con una abogada que le explicó que podría recibir dinero por el seguro del vehículo del accidente, pero que sólo desea que atrapen a los responsables del atropello.
Enrique Tapia perdió a su madre Susana a manos de los delincuentes que huían de Carabineros. Afirmó que el jueves pasado acudió a la Fiscalía para conocer detalles del caso, donde se enteró que por falta de pruebas no detuvieron al joven de 22 años que la policía fiscalizó esa noche.
"Pero tengo entendido que van a ubicarlo para interrogarlo nuevamente, porque tenía fracturas cuando lo controló la policía, y le preguntarían por qué terminó con esas lesiones", precisó Tapia.
Frente a la pregunta de qué piensa que casi 20 días después de lo ocurrido aún no tengan ningún detenido, el hijo de Susana explicó que se siente ganas de hacer justicia por sus propias manos, ya que debe sentarse a esperar resultados que hasta el momento no llegan.
Enrique lo único que desea es que la justicia actúe y que verifiquen si los apodos que circulan por el lugar del accidente, apuntarían realmente a los culpables del atropello, ya que hay información que podría llevar a los delincuentes que robaron el vehículo y lo conducían al momento de la tragedia.
"Sé que aunque detengan a alguien y le den varios años de cárcel, eso no devolverá la vida de mi mamá. Pero al menos me dará tranquilidad de que exista un responsable que va a pagar por todo el daño que hizo", concluyó.